Un Nuevo Comienzo

Capítulo 79

Mi madre decidió por recordar viejos tiempos cuando yo era pequeña, me había enseñado los álbumes mientras me recordaba cosas que había hecho.

-Te acuerdas cuando tu padre compro un puzle nuevo para ti – negué riéndome era muy chiquitita.

-Cuando llegamos a casa tú lo cogiste echándolo al cubo de agua – siguió contándome mientras que reía sin parar por mis tremendas locuras que hacía de pequeña.

-¿Por qué hice eso? - la pregunté sin saber porque hacía esas cosas.

-Según tu querías lavarlo – reímos las dos juntas sin parar.

La poca tristeza que tenía se había esfumado hace un rato, esto es lo que echaba de menos y necesitaba.

Empecé a vivir con el dolor de la falta de Jasón, mientras que mi madre estuviera a mi lado durante mi gran camino y su apoyo no necesitaba nada más.

Nunca me arrepentiré de todas las cosas que pase con Jasón, lo que sentimos uno por el otro, pero los dos tenemos caminos diferentes, que el este en la cárcel no significa que tenga que estar todos los días en la cama tirada llorando por el sin parar por sus errores que cometió en el pasado, aprendí que tengo que seguir para adelante pase lo que pase, no me considero que sea fuerte, solo sé que he cogido fuerzas en todos los momentos que lo he pasado mal.

Mañana tendría uno de los exámenes más importantes de toda mi vida, ese examen decidirá por así decirlo mi fututo, el futuro de mi bebe de mi vida.

-Tu padre cuando supo que estaba embarazada de ti hizo una fiesta por todo lo alto, decía que era el hombre más feliz de toda la tierra – sonreí.

-Era el mejor – la conteste con una gran sonrisa consiguiendo no derramar una lagrima, porque mi padre se merecía una sonrisa de mi parte sin ninguna lagrima.

-Se sentía muy afortunado de la vida que había construido mi amor, nos toca recordarle por fin de una vez por sus cosas buenas y como era el – apoye mi cabeza en su hombro observando las fotos del último álbum.

-Tienes toda la razón mama, tenemos que seguir para adelante de una vez cerrando este ciclo – acaricio mi pelo dejándome un beso en el pelo.

-Te amo mi niña tal y como eres, tendrás mi apoyo en todo momento no estarás sola – las palabras de mi madre hacían que tuviera más fuerzas, me relajaban escuchar esto de ella, no sé qué hubiera sido de mi vida si ella no me hubiera llamado para hablar y volver a estar con ella como siempre.

Me levante cuando mi móvil comenzó a sonar, en los bolsillos no le tenía, busque en el bolso que me había llevado encontrándolo, fruncí el ceño al ver que era un numero desconocido, mi madre me miraba atentamente.

-¿Pasa algo? - dijo mi madre.

-No, me está llamando un numero desconocido.

Una hora antes:

Maica estaba dándose una ducha cuando volvió de compras con Selene.

Me alegraba que por fin pudiera arreglar las cosas con su madre, se lo merecía después de todo el dolor que paso a lo largo de su vida, es una chica buena que se merece ser feliz y si se trataba de que estuviera con mi hermano Jasón a su lado los deseaba lo mejor.

Estaba sentado en la cama abrí mi cajón de la mesilla quitando el doble fondo que tenía, aparte las balas de la pistola que tenía cogiendo el teléfono que tenía para ponerme en contacto con Jasón.

Revise la hora en mi reloj de la muñeca, a estas horas Jasón podría pasar por su celda lo que menos queríamos los dos que le pillasen con un teléfono móvil en su celda, eso sería un gran problema si le pillasen, ya que estaría castigado en aislamiento por una simple cosa como un móvil.