¡No es un mochi poseído!

Sueños recurrentes

Después de tantas semanas soñando lo mismo estaba harto.

Hoseok decía que los sueños eran una proyección inconsciente de sus deseos o temores, que cada cosa tenía algún significado o algo así.

Agradecía su compañía y constante ayuda, gracias al pelirrojo había conseguido empleo en una sucursal de tienda de electrónicos.

Eran el dúo dinámico; Hoseok convencía a la gente para comprar y YoonGi cobraba.

Sin embargo cada vez que llegaba a casa tenía esa sensación de que alguien lo estaba observando, sentía un aura extraña.

Él no creía en ese tipo de ridiculeces, lo atribuía al estrés/cansancio de su día a día.

Recordó que alguna vez TaeHyung habló sobre aquello de manera muy vaga, o al menos eso recuerda.

Con pesadez dejó su lapicero en el escritorio, por fin había terminado aquella estúpida investigación, estiró sus brazos y espalda y tronaron cual baguette fresco.

Al menos mañana al fin podría llamar a TaeHyung y contarle todo lo que acontecía de su vida estos dos meses.

Arrastrando los pies se dejó caer en la cama suspirando enamorado, se quitó las pantuflas pateando al aire y dejando que volaran a donde quisiesen, se removió un poco quitando lo que sintió con la espalda, era su muñeco de peluche.

No le había puesto un nombre aún, el de TaeHyung se llamaba JeJun, era un nombre extraño pero él tenía en mente uno mejor.

---Digorino, ese será tu nombre--- las carcajadas no se hicieron esperar, estiró su mano para apagar su lámpara y luego abrazó su muñeco de peluche para al fin ir al mundo de los sueños.

Pero su muñeco no estaba nada contento, quizás lo volvería a molestar hoy.

Otra vez ese colegio de mala muerte, no se comparaba en nada ni al instituto privado del extranjero en el que estuvo algunos años.

Su nuevo dueño por otra parte veía el lugar como lo más maravilloso del mundo y al chico frente a él también, era tan obvio que era algo así como su crush.

Alimentarse de él y sus sueños era algo tan fácil.

---Digorino, claro--- bufó molesto vestido con ese uniforme corriente, acto seguido chasqueó los dedos haciendo que aquél chico castaño se fuera automáticamente.

El chico pálido no sabía el lugar por el que su príncipe se había ido, caminando por toda la institución chocó con un cuerpo bajito haciéndolo caer estrepitosamente contra el suelo.

---M-mis cuadernos--- decía inocentemente mientras se frotaba las rodillas.

El pálido se agachó asustado olvidando que todo era un sueño y que paredes invisibles comenzaban a construirse encerrando a ambos.

---Lo siento, lo siento mucho yo- --- el pálido no supo que hacer cuando el chico comenzó a llorar.

---Manipulable--- pensó el rubio.

Con suavidad su cuerpo fue levantado hasta quedar de pie por completo. Las manos del contrario eran huesudas pero no lo molestaban en absoluto.

Lo consideraría como boyfriend material de no ser porque es muy bajito y no tiene dinero, sí, sonaba cruel pero era la verdad.

San en ese aspecto si cumplía con sus requisitos...

---T-Tae...--- el pálido miraba la silueta del chico castaño que se iba por ahí.

¿No era suficiente? Ya tenía bastante en todos estos días tratando de ser el centro de atención del chico frente a él.

¡¿No era suficiente ni para un pobretón?! Sonaba increíblemente ridículo. Odiaba que su comida estuviera ignorándolo por un producto de su propia imaginación.

Se aferró a su pecho soltando lágrimas y más lágrimas, pronto YoonGi se enfocó en él y aquellos dedos limpiaron su rostro.

Si, así es como debía ser.

YoonGi despertó antes que su alarma preguntándose otra vez por qué mierda seguía soñando con aquél chico, es como si su mente se empecinara en exclusiva y extrañamente ese rostro.

Quizás lo vio en alguna película o en algún anuncio, ese rostro era tan irreal como el de TaeHyung.

Quizás es como aquella vez que soñó que comía fideos junto a SiWon de Super Junior, un sueño muy muy extraño.

♪♪♪♪♪♪♪♪

---Pero qué rayos...--- tomó su celular que tan extraño como toda la situación que vivía se había desconfigurado y no sonó su típica alarma en la que el chico que le gustaba le decía con voz dulce que despierte.

Enfadado, arregló el asunto y fue a bañarse, estaba somnoliento.

Una vez salió fue directamente por su toalla que no estaba en su lugar habitual, sino casi tocando el suelo.

Con pereza la levantó descubriendo a su muñeco de peluche debajo de la misma, un detalle poco importante de no ser porque el recuerda haber despertado junto a él y no haberlo traído hasta el baño.

Frunce más sus cejas, toma la toalla y la pone alrededor de su cintura tapando a sus YoonGis, toma al muñeco y regresa a su habitación lanzándolo a la cama.

JiMin rebotó cayendo de cara a las mullidas almohadas.

YoonGi creyó haber escuchado una risita.

No les pasa que por primera vez usan dinero real en Wattpad para comprar monedas solo para leer las historias de Hybe? 🥴🥴🥴
🐧💜🐧

Bye •~•
JIRCKM_