♡♡

6.7K 676 13
                                    

Pasado

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Pasado.

Chifuyu conoció a Baji a su tierna edad de 9 años, cuando tan solo era un cachorrillo juguetón y sumamente torpe.

No conocía muy bien el mundo. Mucho menos tenia en cuenta los peligros de lo que estaba rodeado. El solo amaba jugar a que era un piloto exitoso, que surcaba los aires en busca de nuevas aventuras.

No fue hasta que cumplió los 9 años, que empezó a tener intereses por otras cosas.

A escondidas soñaba en como seria enamorarse y sentir que se te partía el mundo entero por amor hacia alguien más. Se imaginaba ya crecido —quizas casado—, viviendo en algún apartamento de esos bonitos —los cuales cada que pasaba por la gran ciudad, lo dejaban encantado.

En sus tiempos libres imaginaba como seria el amor de su vida. Si seria un Alfa torpe o inteligente y sumamente guapo.

No termino de darle forma a su fantasía, sino hasta que conoció aquel Alfa de ciudad.

Keisuke nunca fue un sujeto muy agradable. Ni a sus cortos 10 años ni mucho menos ya crecido, donde la cosa no es que terminara de mejorar del todo.

— Te he dicho que dejes de llamarme por ese apodo ridículo —gruño molesto—. Es tonto y solo haces que pase verguenza.

Como era costumbre, la pequeña pandilla habia ido a patinar al lago congelado mas cercano. Hacia frió, pues ya casi seria navidad y con ella, el comienzo del invierno. La rutina para esa semana, era la misma que cada año, en la que por supuesto Chifuyu nunca conseguía estar a solas con el Alfa. Sin embargo, no le importaba de a mucho, le gustaba ver a Baji feliz, aunque su método fuera burlándose de su pequeña y débil presencia.

No le daba mucha relevancia en aquel entonces.

— Kei-Kei~.

— ¡Para idiota, suena ridículo!

Matsuno creía que Baji explotaría de la ira en cualquier minuto. Lo sentía venir. Casi podía jurar que sus mejillas rojas se debían a la furia que se cocinaba en su interior.

— Ya, ya —susurro resignado—. Si tan problemático se vuelve, pues dejo de decirlo.

— Lo tienes bien domado.

— Ya cállate.

Esa tarde no volvió a llamar mas a Baji por aquel honorifico. Ni al dia siguiente. Ni los días restantes a sus mini vacaciones.

Pero a Chifuyu no le importaba, por que el amaba complacer a su querido Alfa.

Le funciono por algunos años. Incluso paso noches en vela preguntándose el porque, el amor debía de funcionar asi. En el fondo, detestaba el poco valor que el Alfa solía darle. Como si Chifuyu fuese una maquina de cumplir caprichos, sin obtener nada a cambio.

Un dia, quizas algo tarde. Se canso.

Se dio cuenta de que Baji no era lo que el creía y dejo de luchar por alguien que ni siquiera se atrevía a voltear en su dirección.

Sin caer en cuenta de que justo cuando volteaba la cara y se alejaba, Keisuke por fin se atrevía a buscar sus ojos azules.

Un Bebe Para Navidad | BajiFuyuWhere stories live. Discover now