EN LAS GARRAS DEL DEMONIO [Adaptación]

CAPÍTULO 50

Oab yacía inconsciente en la cama de aquella habitación, a pesar de eso su rostro pálido y sudoroso reflejaba incomodidad; como si estuviera en un mal sueño.

Jumpol se acercó a un costado para despertarlo mientras Neen y yo nos situamos al pie de la cama, simplemente observando. Anteriormente Jumpol había usado sus poderes para despertar a Oab, así que asumí que haría lo mismo esa vez y por ello no pude evitar sorprenderme y sobre exaltarme cuando una sonora bofetada resonó en la habitación.

Neen tenía una expresión igual de perpleja mientras veíamos a Oab incorporarse rápidamente aturdido y asustado, mirando a todos lados para después detener su vista en su agresor. Jumpol lo miró con desdén un segundo y regresó su atención a nosotros.

—Ya despertó. Okey, Gun habla con él —.Hizo un mueca que claramente expresaba su disgusto y se alejó unos pasos a regañadientes para que me acercara en su lugar.

—¿Dónde estoy? ¿Qué pasó?—. Cuestionó Oab frotando su mejilla izquierda, un atisbo de dolor se mostró en su rostro.

Tosí un poco incómodo recordando las acciones de Jumpol. Miré a Oab nuevamente con cautela buscando descifrar su expresión.

—¿No recuerdas nada?—Al ver que negaba lleno de confusión descarté la posibilidad de que él y Aamon estuvieran involucrados intencionalmente. —.Viniste a mi casa a hablar un rato y luego te desmayaste, como está no es la primera vez decidimos traerte a casa de Neen...—.

Decidí no contarle nada al respecto porque no quería que se involucrara en este asunto peligroso. Pero la mirada incrédula en los ojos de Oab sólo permaneció unos segundos antes de fruncir el ceño y mirarme molesto, así que me fue imposible seguir hablando.

— Gun, no soy idiota. Tu explicación es incoherente y sé que eso no fue lo que —. No pudo continuar cuando la voz exasperada de Jumpol lo interrumpió.

—Entonces, ¿Qué fue lo que pasó exactamente según tú? Habías dicho que no recordabas.— Espetó con raciocinio.

—Realmente es así, pero sí recuerdo algunas cosas. Sé que estaba en mi casa y después, lo último que recuerdo es haber visto a un tipo de ojos naranja frente a mí—.Después de aclarar su punto, nos miró aún más enojado—. Ustedes saben algo y me lo tratan de ocultar, incluso si tratan de engañarme no les voy a creer porque no soy estúpido. ¡Quiero que me digan la verdad!

Los tres compartimos una mirada seria sin inmutarnos por su reacción exaltada. Solté una suspiro y me preparé para contar resumidamente lo que está pasando.

—El sujeto que viste es un demonio, Aamon está detrás de nosotros, y tomó posesión de tu cuerpo para atacar.— Expliqué con seriedad.

Hubo un silencio pesado envolviendo el ambiente mientras Oab nos miraba inexpresivo.

—¿De verdad me ven cara de pendejo?—.Cuestionó en un tono de fastidio. Se levantó de la cama y comenzó a moverse hacía la puerta.— Si solo van a decirme tonterías prefiero irme de una vez.

Jumpol se movió con rapidez y se interpuso en el camino en un suspiro, sus ojos brillaron en su característico tono rojizo mientras hablaba entre dientes.

—Si para ti es un juego entonces prefiero que mueras ahora mismo—.

La impresión de aquella mirada demoníaca fue lo suficientemente aterradora para hacer a Oab trastabillar. Volteó a vernos con los ojos desorbitados, Neen asintió con solemnidad para confirmarle que esto era real. La vi sosteniendo su móvil y pronto noté que estaba grabando la situación...

«¿También te tomas esto como un juego?» Me quejé en mi cabeza y volví a concentrar mi atención en esos dos.

Jumpol ahora sujetaba a Oab del cuello de su camisa y lo miraba con sus ojos infernales, Oab luchaba por soltarse y gritaba asustado. Cansado de la intimidación del demonio me acerqué a ellos y empecé a empujar a Jumpol para alejarlo.

—¡Ya basta!—. Le grité a Jumpol y sólo entonces detuvo su agresión hacia el otro.

Oab se aferró a mi brazo instintivamente buscando protección... Y el aura amenazante de Jumpol no disminuyó por esta razón. Sólo le di una mirada de advertencia y me giré para encarar a Oab, lo llevé a sentarse nuevamente en la cama.

—Bien, ¿ahora nos crees? —. Le pregunté. Su mirada continuaba atónita pero parecía un poco más calmado.

Respiré profundo y entonces comencé a contarle desde el principio, desde la tabla ouija hasta el acoso y persecución de Aamon, omitiendo detalles menores. Cuando terminé él nos miraba en silencio todavía aturdido por la información.

—Y ahora somos pareja—. Agregó Jumpol como detalle final...

Lo miré enmudecido mientras escuchaba a Neen reprimir su risa a nuestras espaldas. Oab no dijo nada, solo bajó la vista pensativo.

—¿Sigues sin creernos?— Inquirió Neen impaciente.

—Por favor entiende, es que es difícil de creer, mi cabeza aun no puede asimilarlo del todo. Creí que todo eran mierdas de la biblia y esas cosas...—. Respondió nervioso.

—La biblia es una mierda, yo no.—. Espetó Jumpol.

Ignorando su comentario arrogante mantuve mi expresión seria mientras observaba a Oab.

—Entiendes lo que significa ¿verdad? Como eres cercano a nosotros también estas involucrado ahora, incluso si es difícil de creer para ti, al menos ya tienes claro el peligro en el que estamos metidos—guarde silencio unos segundos antes de continuar.— Aunque el objetivo real somos Jumpol y yo, Aamon no dudó en usarte para atacar—.

—¿Qué planean hacer entonces? Siendo él un demonio no tendrá dificultades en volver a actuar y yo no me puedo defender.—  Murmuró Oab con preocupación.

—No sabemos que hará después, por el momento solo podemos intentar mantenernos alertas.—

—Con la situación actual, no es conveniente que Oab regrese y se exponga a los planes de Aamon—. Habló Neen. —Aamon sólo quiere dañar a Gun así que esperará el momento indicado de debilidad, sí Oab está cerca lo usará como herramienta...

Jumpol asintió en acuerdo con sus palabras.

—Correcto. Oab se queda en tu casa y lo cuidas, yo cuidaré de Gun y me ocuparé de Aamon.— Expresó resuelto.

—¡Espera! Si hay algo que pueda hacer quiero ayudar, no quiero quedarme de brazos cruzados mientras Gun se encuentra en peligro—. Oab se quedó congelado después de recibir una mirada seria de Jumpol y luego asintió con sorpresa en sus ojos.

Rápidamente comprendí que usó sus poderes para hablarle mentalmente. Miré a Jumpol preguntándome qué le dijo, pero él ignoró mi mirada.

Después de eso, Oab no volvió a oponerse a la idea de quedarse, acordamos estar en contacto si surgía algún problema y para mantenernos alertas. Neen le dejó ocupar esa habitación mientras estuviera allí, y nosotros nos preparamos para regresar.

—Bien, no sé si seré de ayuda pero pueden contar conmigo.—  Dijo Oab.

—Sí. Voy a encargarme pronto de esto.—Murmuró Jumpol, como para sí mismo.

Su expresión seria me preocupaba, sabía que no poder resolverlo rápidamente, lo molestaba. Aamon estaba siendo un verdadero dolor de cabeza para fastidiar a Jumpol, y eso también me enojaba.

La mano de Jumpol en mi hombro me sacó de mis pensamientos, lo miré confundido porque no lo había escuchado.

—¿Nos vamos?—. Repitió y esta vez sí respondí con un asentimiento.

—Vamos

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