Prefacio

136 12 2
                                    

Hay momentos en la vida que dependen de unos segundos. Salir un poco más tarde de casa, alcanzar a pasar un semáforo cambiante, detenerse a mirar un anuncio. Segundos más, segundos menos, que determinan nuestra participación en hechos decisivos.

Si aquel muchacho hubiera hecho una sola cosa de manera distinta, quizás no habría terminado estrellado contra un muro de contención. Pero así como los planetas se alinean, los eventos también lo hacen. Bien dice mi abuela: cuando te toca, ni aunque te quites; y cuando no te toca, ni aunque te pongas.

Si yo no hubiera llegado tan temprano a la universidad aquel día, el Doctor Ulises habría sido asignado a mi compañera de laboratorio en vez de a mí. Ése fue el primer planeta alineado. Y los próximos planetas, más pesados y más grandes, no tardarían en posicionarse.

Tira y AflojaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora