Epílogo "Emerald"

98 3 5
                                    

El tiempo pasó y las heridas sanaron, tanto Mewni como la bruja lograron recuperarse de los acontecimientos provocados por Toffee, con el pasar de los meses todo volvió a su estado normal, exceptuando por algunos sucesos extraordinarios.

Eclipsa volvió y se le fue entregado el trono, así como su esposo e hija finalmente fueron aceptados, pero las Naciones Oscuras no se quedaron atrás.

Emerald y sus amigos trataron de mantener en secreto la muerte de Toffee y la causa, más que nada para preservar la paz y evitar que hubieran levantamientos de armas en busca de venganza.

Sin embargo, no contaban con que Carter consiguiera reducir la severidad de su condena, debido a buen comportamiento, lo suficiente como para asistir a una celebración en el castillo de Septarsis y conocer ahí a Amanda, amiga cercana de la familia de Jason y Angélica, pero sobre todo, ex pareja de Jason.

Este hecho desembocó varios conflictos y discusiones que al final lograron arreglar, pero el principal daño fue que gracias a Carter y Amanda, la muerte de Toffee terminó siendo revelada ante todo el reino.

Angélica y Emerald no estaban en el mejor ánimo para enfrentar la situación, por lo que Jason, siendo el actual rey de Reptown, salió a dar la cara. Demostró que tenía la habilidad de un líder al apaciguar a la población y dar una buena imagen al llevar a cabo un proyecto para honrar a Toffee y todos los hombres y mujeres que perdieron la vida en la guerra, incluyendo a los mewmanos que en algún momento lucharon junto a ellos.

Angélica no estaba feliz con la idea de honrar a Toffee con una estatua en medio de Septarsis, pero terminó cediendo ya que era lo mejor para mantener el pueblo tranquilo; después de todo, él fue el último miembro de la familia real directa que quedaba y la última esperanza de su gente, de alguna forma tenían que mantener esa esperanza viva.

Una vez que el proyecto fue terminado, se hizo una gran inauguración junto a un evento nacional para conmemorar a todos los caídos en batalla, sobre todo a Toffee; nunca se supo su causa de muerte ya que el Consejo de Septarianos prefirió fingir que no sabían exactamente lo que pasó y alejar la atención lo más posible de las Butterfly.

Aunque los demás sí sentían aunque fuese un poco de genuina melancolía por Toffee, Angélica no sentía nada más que rencor hacia él, pero se vio obligada a mostrarse igual de dolida que todos con el fin de preservar la mentira.

Y funcionó, las Naciones Oscuras se mantuvieron pacíficas después de aquel evento, pero la tranquilidad no duró mucho para la bruja y compañía.

Eran comienzos de verano por lo que la flora estaba en su máximo esplendor, todos los reinos estaban completamente repletos de la naturaleza que les rodeaba, en Septarsis se estaba celebrando un festival como nunca gracias a los cambios que les llevaron prosperidad y estabilidad.

El grupo de amigos, o al menos lo que quedaba, se reunió en el castillo de Septarsis para celebrar y pasar unos días juntos en la paz que les daba vivir apartados y ocultos del resto de Mewni.

Emerald se encontraba en su habitación descansando después de un agitado día, pero en medio de su profundo sueño escuchó la voz de alguien, al principio lo que decía era inentendible, pero en cuestión de segundos pudo entender lo que estaba diciendo.

—Emerald... — esa cosa la estaba llamando.

Oyó que su nombre fue repetido varias veces hasta que abrió los ojos y se levantó de su cama, miró a sus alrededores confundida —Emerald— volteó al techo y lo vio, era Black posado en uno de los cristales sobre su cabeza —Emerald— repitió el cuervo bajando hasta el brazo de la bruja.

—¿Qu-qué ocurre? — le preguntó mientras se tallaba los ojos. 

—Problemas, problemas— el cuervo extendió sus alas y voló hacia la puerta, con su peso giró la perilla y salió de la habitación. 

Toffee: El Último Guerrero de Septarsis - El Legado de Mewni Vol. 1Where stories live. Discover now