𝐋𝐔𝐀𝐑༢ ︴𝑹𝑰𝑵𝑫𝑶𝑼 𝑯𝑨𝑰𝑻𝑨𝑵𝑰 𝑿 𝑶𝑪 🜸

꒰ 𝐌𝐎𝐎𝐍𝐋𝐈𝐆𝐇𝐓 𝐌𝐄𝐋𝐎𝐃𝐘 ꒱

– ָ   ֙⋆ Un sonido que nunca antes había escuchado, "la inolvidable melodía de la luz de la luna".

Rindou jamás habría imaginado que aquella muchacha de cabellos negros llegaría tan de repente a su vida para quedarse.

Si alguien le hubiera dicho que iba a estar rotundamente enamorado de cierto chica, él se habría burlado y tal vez partido alguna extremidad por inventar tal tontería, pero ahí estaba, embobado por la simpleza que la fémina portaba.

– ¿Estas sorda acaso? – El de lentes ya la había llamado a lo lejos, pero al ser ignorado olímpicamente por la contraria decidió a cercarse. –No puedes estar aquí a estas horas ¿Eres nueva aquí acaso?

–Tranquilo, sólo vine a apreciar la luna. – Rindou se sorprendió aun más cuando la chica volteo a verlo. – Y si, me acabo de mudar aquí.

Sin duda, era hermosa y no comprendía porque se sentía atraído por ella, no estaba ni cerca a su "estándar" de chicas con las que salía.

– Supongo que no sabías, pero no puedes andar por donde quieras a estas horas.

– Que quejoso eres. – El de mechas celestes se sorprendió, jamás le habían hablado de esa forma. – de todos modos no es como si fueras el dueño de aquí.

– Técnicamente si lo soy.

– Como sea, sólo cállate y siéntate, la luna está muy hermosa como para escucharte.

Y cómo si las palabras de la contraria fueran magia, se sentó a un lado de ella. Eran completos desconocidos pero aún así el silencio entre los dos era muy lindo. Por primera vez, Rindou aprecio algo con tanto cuidado, inspeccionó cada facción de la contraría hasta que la fémina volteo a mirarlo.

– Tienes bonitos ojos. –  El de lentes se sorprendió un poco por las repentinas palabras de la chica, pero en seguida relajo su expresión por una mas orgullosa.

– Lo sé. – Rindou sonrió cuando vio cómo la contraria volteaba sus ojos por tal respuesta.

– Ugh, se ve que eres egocéntrico.

– Bueno, varios me lo han dicho. – Los dos dejaron salir una risa vaga volviendo a apreciar la luna.

Después de todo, no fue mala idea hacerle caso a la chica, con la luna de testigo sobre las vagas pláticas que ambos tenían, intereses, pasatiempos, gustos y disgustos, compartiendo así gusto por la música.

Rindou se entero de cómo le fascinaba a la fémina leer y que su pasatiempo era escribir, también le contó que sabía tocar algunos instrumentos como el piano y violín.

La pelinegra lo obligó a contar sobre él, este le contó sobre Ran, su extraño gusto por el café amargo donde tuvo una absurda pelea con ella por cómo ambos preparaban el café, mientras ella le ponía cinco cucharadas de azúcar, él no le ponía ninguna.

Rindou pensó que ella se iba a sorprender cuando le contó que era parte de una pandilla y que junto con su hermano manejaban todo roppongi.

– Entonces ¿Me podrías enseñar como dislocar articulaciones? En verdad que tengo curiosidad.

Levantó una ceja por las extrañas preguntas que ella le hacía, se supone que se tenía que asustar, no preguntarle cuáles eran las mejores maneras de torturar.

Así duraron un buen tiempo, aunque la pelinegra no lo quisiera admitir, el color violeta de los ojos contrarios se convirtió en su favorito, sin duda, se enamoro perdidamente de aquella mirada perezosa del de lentes.

Aquel encuentro se hizo común entre los dos, charlaban por horas cuando el sol se ocultaba para dar la bienvenida a la hermosa Luna.

– Sabes, a pesar de haber platicado desde hace días. – Rindou apartó su vista de sus manos para observar a la chica de cabellos negros escribir cualquier cosa en su cuaderno. – No me has dicho tu nombre.

– ¿Y para que quisieras saber mi nombre Haitani?

– No es justo que sólo tú sepas mi nombre. – él contrario formó una sonrisa a boca cerrada tras tener la atención de la chica en él.

– No tengo la culpa que seas un pandillero y tu nombre esté por todo Roppongi.

– Bueno, pues quieras o no tendrás que decirme tu nombre linda. – El Haitani agarro delicadamente la mandíbula de la chica cuando esta volvió a apartar su vista de él, obligandola a mirarlo.

– No me digas linda o te romperé los lentes.

– Entonces dime tu nombre. – Rindou se acercó más a la contraria, estando sus caras a pocos centímetros.

Agregaría a su lista de pasatiempo hacer sonrojar y poner nerviosa a la contraria, en verdad que le encantaba cuando el color carmesí pintaban las mejillas de la pelinegra y sus ojos cafés miraban a cualquier cosa menos su cara.

– Olvídalo, ya es tarde así que nos vemos.

– ¡Cuidado linda! – El Haitani estalló en risas cuando la contraria le enseño su dedo medio ante el nuevo "apodo".

Las noches siguieron pasando, empezaron a conocerse aun más, sin embargo Rindou seguía sin saber el nombre de aquella chica, le generaba intriga pero más que nada frustración el que ella no quisiera decírselo.

Y un día ella dejó de llegar a aquel parque donde se sentaban por horas a platicar sobre cualquier tema trivial.

Solo había sido una semana donde se sentaban bajo la luz de la luna, donde la fémina le platicaba alegremente su día, el como odiaba matemáticas y después se disculpaba por hablar tanto. Aunque a él jamás le molesto que ella hablara, le encantaba oírla y verla dibujar o escribir cualquier cosa en aquella libreta.

𝐿𝑢𝑎𝑟 ﹏﹏﹏﹏↷

  ︴꩜  ︴𓍯  𝐿𝑢𝑧 𝑑𝑒 𝑙𝑢𝑛𝑎

𝒏𝒐𝒕𝒂 𝒂𝒖𝒕𝒐𝒓𝒂  ⎧ ୧ ⋅ ..⃗.     holaaa espero les haya gustado este primer capitulo, quiero dar una diferente perspectiva de Rindou a lo que estamos acostumbrados la mayoría, estaré trabajando en los demás capítulos. Aclaro que esta historia es mía por lo cual las copias y adaptaciones no se permiten, gracias por leer LUAR ♡⃕

𝑛𝑜 𝑡𝑒 𝑜𝑙𝑣𝑖𝑑𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝑣𝑜𝑡𝑎𝑟 ! 

𝐋𝐔𝐀𝐑 ┇𝟎𝟖𝟎𝟏𝟐𝟐

—𝐧𝐚𝐦𝐢  ❍