Tae Hyun se encontraba yendo de un lado a otro en la habitación del azabache mientras que Beom Gyu lo observaba desde donde se encontraba sentado. Kang había notado la presencia de Yeon Jun cuando Soo Bin y Joshua se abrazaron y, aunque no había estado lo suficientemente cerca del chico de felinas facciones para saber sus intenciones, supo que ver aquella muestra de afecto había hecho sentir mal al pobre del azabache.
Ahora, se encontraba pensando en un plan para que el chico supiera la verdadera razón de esa muestra de afecto. Porque conocía a Yeon Jun y estaba seguro de que había mal interpretado aquello.
—¿Todavía nada? —Le preguntó el de ojos pequeños suspirando con algo de pesadez y el otro negó. Ver a Tae Hyun ir de aquí para allá lo había mareado e irritado un poco—. Entonces, ¿para qué me pediste ayuda si todavía no tienes un plan, genio?
—Pensaba que a ti también se te podría ocurrir algo. Quizá hasta sea mejor que mi plan —confesó con toda naturalidad y el de ojos pequeños entrecerró sus ojos, cosa que hizo que Tae Hyun se confundiera—. Beom Gyu, ¿cómo puedes quedarte dormido en un momento tan importante como este?
—Idiota, no estoy durmiendo. Estoy fulminándote con mi mirada —aclaró—. ¿Sabes lo estúpido que me siento ahora por solo verte y no decirte el plan que se me ocurrió desde hace rato?
—Lo siento —Tae Hyun ahora se sentía algo avergonzado. Aunque debía admitir que le gustaba ver como el otro se fastidiaba a veces—. Ya que no se me ocurre nada... Habla, te escucho.
—Bien —Beom Gyu aclaró su garganta y, en cuanto Tae Hyun le hizo saber que tenía toda su atención, empezó a hablar—. En los últimos meses, Soo Bin acostumbra a ir los fines de semana al orfanato, ¿cierto?
—Cierto.
—Ayer Yeon Jun fue pero no entró al lugar por ver al más alto abrazar a tu primo, ¿también es cierto?
—Cierto.
—Lo que tenemos que hacer es asegurarnos de que Myung Soo vaya hoy al orfanato a la misma hora que Soo Bin —aclaró—. Pero... Debemos hacerle creer que el alto no se encontrará ahí para que parezca que ha sido pura casualidad que llegó al mismo tiempo que él, ¿entiendes? —Tae Hyun sonrió ampliamente y Beom Gyu comprendió que había captado a la perfección el objetivo.
—Pero... ¿Y si no funciona? —Preguntó Tae Hyun algo preocupado.
—Existen dos probabilidades por ahora. La primera, que Yeon Jun decida ignorar a Soo Bin y este esté preguntándole a cada rato porque no le ha dirigido la palabra o, que Soo Bin trate de entablar conversación con Yeon Jun y que; en todo el rato que estén conversando, salga la verdad de que Joshua y él no son pareja... Aunque; ahora que lo pienso, puede que tampoco se hablen y Yeon Jun se enteré de la verdad de otra forma —el de ojos pequeños torció la boca y añadió—: Tengo altas expectativas de que suceda lo segundo pero; por el momento, debemos convencer a Yeon Jun... Hablando de él, ¿dónde está?
—El restaurante de su amigo el oso.
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