CAPÍTULO 3- Cameron Miller

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Alejandra

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Alejandra

Tal vez sea una mal educada, y que además y he sido contratada y como decido comportarme, nisiquiera se su nombre y dudo que el sepa el mío, de ser así lo hubiese dicho.

¿No?

Después de todo mañana lo veré.

No creo que le afecte el que lo haya dejado con la palabra en loca, si es que enrealidad tenia algo por decir.

Él debería entender, la vergüenza es algo que posiblemente él no tiene o no ha conocido, en cambio yo. Tengo mucha y la situación de hace un memento era muy bochornosa.

Dios, pensé que no volvería a verlo.

¿Quién pensaría que un desconocido con el cual te besaste y casi tienen sexo, podría ser tu jefe al siguiente día?

Siempre que tomo de más algo hago. La vez anterior besé a un chico que gracias a Dios era gay, y no lo he vuelto a ver.

Yo no veía el momento para salir de su oficina que después de todo, sentí como si estuviese con él en un lugar pequeño.

Y soy tan impulsiva que estoy segura que si me hubiese quedado un poco más, algo habría dicho, y no me refiero a algo decente.

Mientras salgo de la empresa y ahora lugar de trabajo observo maravillada las instalaciones de esta, puedo observar en algunos mostradores con edificios en miniaturas que son hermosos, también algunas casas y un parque acuático.

Al ver el último me tomo el atrevimiento, de acercarme hasta donde sé encuentra, en la maqueta es pequeño pero me imagino que si ya está construido debe ser una maravilla.

¡Me encanta!

Lo admiro un poco más antes de salir por completo del lugar, suspiro entre emocionada y pensativa.

Al menos tengo el trabajo.

Al llagar al apartamento lo que hice fue, quitarme los zapatos y acostarme en el largo sofá a ver televisión, quería despejar un poco la mente y dejar de pensar en cuenta personita.

¿En serio tenía que ser justo él?

—Alejandra. —escuchó a lo lejos el mencionar de mi nombre.

—En la sala, tirada en mueble. —le respondo a mi mejor amiga.

—Amor, ¿como estas? Cuéntame cómo te fue en la entrevista ¿te contrataron? —cuestiona con evidente emoción, lo último.

Suelto un suspiro antes de incorporar mi cuerpo por completo, ella deja de sonreír y hace una divertida mueva de disgusto.

—Terrible Yeniffer, me fue mal... no vuelvo a salir contigo. —le digo y ella toma asiento.

—¿Y yo que tengo que ver con todo esto? —cuestiona sin entender, la miro de soslayo y parece captar algo —. En serio Aleja perdóname por no haberte despertado, es que estabas tan relajada que me dio pesar llamarte. Pero... ¿obtuviste es opuesto o no?

Después De Aquel Beso [Editando]Where stories live. Discover now