Capítulo 2. La gota que colma el vaso que rompe el lomo del camello.

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Cuando Wei Wuxian tropezó con la puerta de Cloud Recesses cuatro días después de su desaparición, Hanguang-Jun prácticamente había corrido a su encuentro. La cara de Lan Wangji estaba despeinada y angustiada y el círculo oscuro debajo de sus ojos mostraba las noches de insomnio que había pasado buscando a su esposo.

—¡Wei Ying! —Su mano recorrió todo el rostro de Wei Wuxian, buscando alguna herida. Excepto por el leve olor a hierbas e inciensos, Wei Wuxian se veía bastante bien para un hombre que había estado desaparecido durante cuatro días. —Wei Ying, ¿qué pasó?

—¡Lan Zhan! —Wei Wuxian agarró las manos de Lan Wangji y lo llevó a su habitación. Necesitaba limpiar lo más rápido posible. El núcleo que ardía dentro de él era el familiar sentimiento que había perdido dieciséis años atrás. Odiaba a Jiang Cheng por esto. También odiaba cómo eso le hacía comprender mejor la amargura de su hermano. La tendencia al autosacrificio, especialmente mintiendo a las personas que amaba, era el peor tipo de caridad. Wei Wuxian finalmente se dio cuenta de que lo que le hizo a Jiang Cheng fue en realidad un movimiento muy idiota. —¡Necesito ir a Lotus Pier!

La preocupación en el rostro de su marido se disolvió ante la mención de ese maldito lugar. Lan Wangji odiaba Lotus Pier y aún más al líder dentro de él. Jiang Wanyin era un hombre amargado y egoísta que no merecía tener el núcleo puro de su marido. ¿No había sufrido Wei Ying lo suficiente? ¿Por qué todavía quería ir a Lotus Pier?

—¿Por qué? —El tono brusco y duro fue suficiente para decirle a Wei Wuxian cuán profundo era el odio de Lan Wangji por Jiang Cheng. Le dolió porque solo ahora se dio cuenta de que después de todas estas veces después de haber sido devuelto, ni una sola vez había tratado de disuadir la ira y el odio de Lan Zhan hacia su hermano menor. ¿Cómo podía culpar a Lan Zhan cuando él era el culpable?

—Porque~ —Wei Wuxian empujó la carta de Jiang Cheng hacia Lan Wangji antes de correr para refrescarse. Lan Wangji frunció el ceño con curiosidad cuando se dio cuenta de que Wei Ying tenía a Suibian en la mano. ¿No estaba Suibian en posesión de Jiang Wanyin?

Lan Wangji miró la carta y sus ojos se agrandaron y su boca se abrió en total, en absoluta sorpresa. Su mente rápidamente conectó los puntos - 4 días perdidos, Suibian regresó y Wei Ying con más movimiento enérgico - de ninguna manera... El corazón de Lan Wangji dio un vuelco y su rostro se puso pálido. ¡¡¡De ninguna manera!!! ¡¿Jiang Wanyin transfirió el núcleo a Wei Ying?!

¿Pero por qué? ¿Por qué Jiang Wanyin iría tan lejos? ¿Era así de vengativo? El viejo odio azotó inmediatamente a Jiang Wanyin. Tenía la costumbre de siempre culpar a Jiang Wanyin cada vez que algo malo le sucedía a Wei Ying.

De repente, su mente le recordó brutalmente a Lan Wangji las palabras que le había dicho al rostro de Jiang Wanyin hace dos meses. Si no fuera por el desinterés de Wei Wuxian para regalar su núcleo dorado, te habrías estado pudriendo en la calle de Yiling como el hombre miserable que eres. Algo parecido a la culpa congeló su corazón. Esa mirada pálida y conmocionada en Jiang Wanyin ese día no era la mirada de alguien que planea una represalia rencorosa. Era la mirada de un hombre que se había rendido; Jiang Wanyin se sintió derrotado.

En ese entonces, todo lo que Lan Wangji sintió fue una sensación de victoria porque ese hombre odioso ya no estaba en la vida de su esposo, pero ¿ahora? ¡¿Ahora?!

¿Empujó a Jiang Wanyin a hacer esto?

—¿Vienes? —Wei Ying se había cambiado de ropa y había atado a Chenqing y a Suibian a la cintura. El resplandor del núcleo fuerte era evidente en el rostro radiante de Wei Ying y sabía que era cierto. Jiang Wanyin le devolvió su núcleo a Wei Wuxian.

𝐀𝐋𝐋 𝐇𝐈𝐒 𝐋𝐈𝐅𝐄, 𝐇𝐄 𝐇𝐀𝐃 𝐁𝐄𝐄𝐍 𝐃𝐑𝐎𝐖𝐍𝐈𝐍𝐆. | ˣⁱᶜʰᵉⁿᵍDonde viven las historias. Descúbrelo ahora