Discúlpame (Camilo y Mirabel - Relación familiar)

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A la mañana siguiente, el desayuno se realizó en el jardín. Luisa movió la mesa e Isabella levantó una enredadera para cubrirnos del intenso sol de la mañana.

No estaba con apetito, así que sólo me serví un par de arepas y unas frutas. Papá insistió en que me sentara a un lado de la abuela, pero al ver a Mirabel ubicarse en el otro extremo, tomé mi plato y me senté al final de la mesa.

— ¿Descansaste? — Dolores me dio un beso en la cabeza antes de tomar asiento —

— Ah, sí. Gracias por dejarme dormir contigo —

— Todo por mi hermanito — Dijo con su característico volumen bajo mientras me servía jugo —

— ¡Cami! — Antonio corrió a abrazarme — ¿Seguro que estás bien? — Yo asentí — Pero aún no sonríes, y tampoco estás comiendo mucho — El miraba preocupado mi plato —

— Pues, es que mi apetito es porque cambio de forma, pero como no he utilizado mi don aún, no tengo tanta hambre — El pequeño me miraba sin estar convencido. Rápidamente sentí que más gente me observaba, al levantar la mirada de Antonio pude ver a mis padres igualmente preocupados —

El desayuno fue rápido. Al inicio la abuela se tomó un momento para hablar, y nuevamente pedir disculpas por su actitud con nosotros, y que consideraba todo lo sucedido como una oportunidad de arreglar los conflictos del pasado. "Sé que una disculpa no es suficiente, pero quiero tomarme el tiempo necesario para ayudarlos a sanar las heridas de cada uno".

Ella tenía razón, una disculpa no será suficiente, y las cosas no se arreglarán de la noche a la mañana.

Ya terminado el desayuno, no quise salir de la casita al mismo tiempo que Mirabel, así que me quedé con tía Julieta llevando las cosas a la cocina.

— ¿Tía Julieta, no está enojada conmigo? —

— ¿Por qué estaría enojada contigo? — La miré sorprendido un momento —

— Pues... ¿Por como traté a Mirabel ayer? — Ella sólo sonrió —

— Como mamá debo decir que no fue la mejor actitud hacia mi hija. Pero sé que no es la primera vez que terminan así —

— ¿Qué? —

— Probablemente no lo recuerdas, pero cuando tenías cinco años corriste hacia mí, llorando, porque Mirabel había pedido que te alejaras de ella — Al escucharla, mi mente desbloqueó ese recuerdo casi de manera automática. Si, luego de que Mirabel me gritara corrí por toda la casa, y al sentir a alguien en la cocina me dirigí hacia allá, esa persona era mi tía —

— Pero, aun así — Hice una pausa — Todo este tiempo traté mal a mi prima —

— Pero siempre me has demostrado que sigues preocupado por ella — No entendí que quiso decir con eso — ¿No te has dado cuenta? — Dejó a un lado la loza y comenzó a hacer unas arepas — Junto con mis hermanos, todos tenemos un sobrino "más querido" por así decirlo —

— ¿Y? —

— Tu mamá tiene a Isabella, Bruno desde siempre tuvo un cariño especial por Mirabel, y tú eres mi querido por supuesto — Me pasó una arepa. Ahora si tenía un poco más de hambre, así que la recibí — Pero eso se dio con el tiempo, yo me había prometido no tener una preferencia por mis sobrinos — rio con dulzura —

— Sigo sin entender porque yo sería tu sobrino favorito — A decir verdad, no entendía el punto de mi tía —

— Cuando comenzaste a ayudar en la aldea, todas las mañanas venías a la cocina por más desayuno ¿Lo recuerdas? — Yo tenía mi boca llena, así que sólo asentí — ¿Pero no te has dado cuenta de que TODOS los días preguntas por Mirabel? – Me atoré con la comida —

— ¿QUÉ? — Pregunté después de que volví a respirar. No creí que la comida curativa de mi tía pudiese algún día llevarme a la muerte — Eso es una broma ¿Cierto? —

— No, incluso hasta ayer por la mañana todavía lo hacías — Yo la miré sin creerle — El punto es — Se acercó — Sé que quieres mucho a tu prima, mucho más de lo que claramente demuestras. Y estoy segura que lo de anoche fue producto de ese conflicto — Me abrazó, aquello me calmó. Creo que necesitaba saber que mi tía no estaba enojada conmigo —

— Quiero disculparme con Mirabel, pero no sé cómo. Ayer iba a hacerlo, pero sucedió todo eso — Soltó el abrazo y me tomó de las mejillas —

— Cualquier cosa, absolutamente cualquier cosa, que necesites saber o consultar, puedes hacerlo conmigo —

— Gracias tía — Le sonreí —

— Cualquier cosa por ver a mis pequeños juntitos nuevamente —

~ O ~

Yei!!! Finalmente pude publicar otro capítulo!!

Como saben, voy adelantada dos capítulos respecto del que está publicado. Y esperaba poder publicar este desde hace varios días. 

Como siempre, quiero agradecer a las personas que me siguen, votan por la historia, y también a quiénes dejan comentarios. Es que estos últimos días llegaron muchos y disfruté cada uno de ellos!!!!

Debido a mi trabajo no tengo tiempo de responder a cada uno, pero sepan que me hacen feliz cada vez que comentan <3

Cariñitos y cuídense, los leo :)