[Terminado] La Razón de Estar Juntas [Libro 1] [Historia Lésbica ]

Parte 22

Capítulo22

A pesar del acuerdo legal, Julia tenía sus dudas sobre la clase de mujer que era Mayra, la nueva esposa de Hugo. Quería asegurarse de que no era un monstruo que pusiera en peligro la vida de su hija. Además, estaba interesada por conocer con qué clase de fulana la había cambiado su ex. Y sólo había una manera para aclarar esas dudas: invitándola a cenar.

—¿Me veo bien? dime que me veo bien.

—Oh, entonces tengo que mentirte —bromeó Vanesa mientras le cepillaba el cabello delante del espejo—. Escucha, deja de compararte con ella. Tienes buenas cualidades.

—Sólo lo dices porque me quieres.

Vanesa rodó los ojos y la abrazó por detrás para mirar juntas su reflejo. Julia creyó que eran una linda pareja, pero seguía teniendo sus dudas sobre sus sentimientos hacia la otra mujer. No es que no la quisiera a su lado, ni mucho menos. Le gustaba verla en su casa y su presencia la hacía sentir segura y valorada. El problema era que jamás había amado a una mujer y le preocupaba no ser buena para el compromiso que acababa de aceptar. Las dos buscaban una relación madura y no un simple noviazgo de adolescentes. Si Vanesa fuera un hombre, entonces el rol de Julia como mujer sería evidente. Al ser ambas chicas, ¿cómo quedaban esos roles? Estaba confundida al respecto y no conocía a otra lesbiana a la que preguntar.

—¿Cuándo les diremos a las niñas sobre nosotras? —Inquirió Vanesa dándole una multitud de besos en las mejillas. A Julia le gustaba más en la boca, y giró el cuello para buscar sus labios.

—Tal vez sea buena idea decirle sólo a Ashley. Si Amelie se entera, y lo dice en la escuela, vas a tener problemas. La directora es muy homofóbica.

—Ah, vaya. Miren quién se está quejando de una homofóbica. Tú también lo eras meses atrás.

Julia no respondió. Sus ojos se iluminaron y se levantó de la silla. Rodeó la cintura de Vanesa y juntó su frente con la de ella.

—Eres la única mujer en el mundo por la que me siento atraída, así que no me considero lesbiana. No confundas las cosas.

—¿Ah, sí? ¿Se supone que debo sentirme halagada?

—Claro. Si me pusieran a Scarleth Johhanson en frente, seguiría eligiéndote a ti. Bajemos, Hugo y su fea esposa ya van a llegar.

Julia se adelantó y dejó a Vanesa en la habitación. Ella la vio marcharse, y su rostro se puso colorado.

"Soy única para ella".

Jamás le habían dicho algo tan bonito y con tanta naturalidad. Su corazón se aceleró y se tiró sobre la cama con los brazos extendidos.

—Voy a casarme con esa mujer un día de estos.

***

Se sintió mal nada más verla aparecer frente a la puerta. Tardó unos segundos en reaccionar y parpadeó para quitarse ese espejismo de la cabeza. Jamás en su vida había tenido que forzar tanto una sonrisa.

—Hola, pasen.

Con Mayra estaba Hugo, y con él, una niña de la edad de Amelie perfectamente peinada y con un vestido de puntos negros. Madre e hija tenían las manos llenas, una con un pastel y la pequeña llevaba un obsequio envuelto y un moño rojo. Ninguna de ellas se percató de la mirada asesina que los ex esposos se echaron y la tensión saltó en el aire.

Julia los acompañó al comedor, donde ya estaban dispuestos los platos para la cena. Ashley fue la primera en recibir a su papá y lo abrazó con cierto nerviosismo. Aún no le perdonaba que se hubiera llevado a su hermanita. Amelie, por otro lado, saltó de emoción y corrió hacia Hugo. Los ojos del hombre se llenaron de diminutas lágrimas. Julia se sintió mal y bajó la cabeza.