Ensayo

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Algunos días habían pasado desde que Minghao y Mingyu estuvieron juntos por primera vez. En el trabajo les era inevitable mirarse o pasar cerca del otro y rozarle la mano, pero no querían demostrar más que eso para mantenerse profesionales. Aún así, a la hora del almuerzo, los besos y las caricias no faltaban, mucho menos las risas.
Un viernes por la tarde Minghao se encontraba en su casa. Estaba ensayando coreografías que había inventado él cuando el timbre sonó.
Se fijó por la mirilla: era Kim.
-Hola Mingyu. ¿Qué haces por aquí? -preguntó con una sonrisa cuando abrió la puerta. La sorpresa lo había alegrado.
-Hola cariño. -el coreano se acercó y lo tomó por el rostro para besarlo. -Tuve que buscar una escultura por aquí cerca y decidí pasar a saludarte.-
-¿Quieres quedarte un rato?-
-Sí, claro. ¿Qué estabas haciendo que estás tan transpirado? ¿Pensabas en mí? -preguntó el más alto con una sonrisa mientras se sentaba.
-¿Alguna vez dejas de pensar cosas sucias? Sólo estaba bailando. -The 8 lo siguió y se sentó frente a él.
-Sí, pero no sucede cuando estoy contigo. Y quiero verte bailar algún día, aún no me has mostrado.-
-Cuando quieras. Pero voy a empezar a creer que sólo me quieres para tener sexo.-
-Jamás. También puedo imaginarte a mi lado hasta que seamos viejitos.-
-¿O sea que cuando seamos viejitos me vas a dejar?-
-Sabes a qué me refería.-
-Por supuesto. Sólo quería escuchar que nunca vas a dejarme.-
-Siempre estaré a tu lado, Hao.-
-Te quiero, lindo.-
-También te quiero, pequeño. ¿Me das un beso?-
-Todos los que quieras. -Xu se acercó y comenzó a besarlo mientras se acomodaba sobre su falda a horcajadas.
-Mingyu, ¿siempre que te bese vas a ponerte duro?-
-Si te molesta entonces deja de sentarte encima mío y bésame como una persona normal.-
-No soy normal.-
-Es verdad, perdón.-
-¿Quieres ir a mi cuarto?-
-¿Para...?-
-¿Cómo "para"? Literalmente llegaste hablando de sexo ¿y ahora no sabes para qué quiero ir a mi cuarto?-
-Era un chiste, Hao, no te enojes. Vamos. -Kim lo cargó en sus brazos. -¿Dónde es?-
-Al final del pasillo. -indicó el chino. Cuando llegaron, el más alto lo bajó. -Bésame, por favor.-
Y el coreano obedeció. Lo acorraló contra la pared y comenzó a besarlo apasionadamente. Apenas unos segundos después, ya se estaba quitando la camisa.
El dueño de casa comenzó a dar manotazos intentando encender la luz. Después de varios intentos lo logró y pudo admirar el fornido cuerpo de su pareja, quien lo guió hasta la cama mientras seguía besándolo.
-Perdona el desorden. No esperaba visitas. -expresó Minghao cuando notó que la cama estaba destendida.
-Shh. No importa. -respondió Kim comenzando a besar su cuello a la vez que le quitaba el pantalón.
La situación se ponía interesante cuando el timbre volvió a sonar.
-Mierda. Son mis amigos. -Xu se incorporó y de vistió.
-¿No podías avisarme que venía gente? -dijo Mingyu haciendo lo mismo.
-Cuando llegaste olvidé que vendrían. Tenemos que ensayar.-
-¿Y yo qué hago?-
-Creo que conocerás a mis amigos después de todo. Puedes quedarte a ver si quieres.-
-Será un placer. Ahora voy-
El chino fue a abrir la puerta. -Hola chicos.-
-Buenas tardes, señor no virgen. -saludó Hoshi burlándose de su amigo.
-Siempre es tan lindo verte.-
Todos entraron y sus ojos se toparon con el moreno alto.
-¿Y este ropero nuevo, Little 8? -rió Hoshi.
-Es Mingyu.- Xu se paró a su lado y lo tomó del brazo. -Mingyu, estos son mis amigos Hoshi, DK y Jun. -indicó señalando a cada uno.
-Es un gusto conocerte en persona, Kim. -expresó Dokyeom.
-Qué bueno que seas real. Es un placer conocerte. -dijo Hoshi.
-Finalmente pudimos ver a quien logró conquistar a nuestro amigo. -se entusiasmó Jun. -¿Estaban haciendo ejercicio?-
-¿Eh?-
-Hao, estás más transpirado de lo usual. Y Mingyu, tienes mal abotonada la camisa.-
Los otros dos amigos se rieron ante la observación y la pareja se miró y se sonrojó.
-¿Por qué no comenzamos con el ensayo? Tenemos mucho que hacer. -dijo el dueño de casa para romper el hielo.
-Es verdad. -lo apoyó DK. -Traje la cámara para grabar e ir viendo la evolución.-
-¿Qué es lo que van a hacer? -preguntó Kim con curiosidad.
-¿Minghao no te dijo? Qué grosero. Hacemos videos para YouTube. -le explicó Junhui.
-¿De veras? Qué lindo.-
-Sí. Ahora vas a ver a tu novio bailando. Es el mejor del mundo. -le dijo DK en voz baja, orgulloso de su amigo.
-¿Pongo la música? -preguntó Xu, a lo que todos asistieron.
El ensayo comenzaba, esta vez con público incluido.

Por error •Gyuhao•Onde histórias criam vida. Descubra agora