Cap. 11. eres bueno

1.4K 139 26
                                    

Declaración: no soy dueña de one punch man. ni de sus dibujos, historia o personajes. todo eso le pertenece a One y Yusuke Murata. solo uso los personajes y su universo para escribir un fanfic sin fines de lucro.

Otro capitulo ....porque es Viernes!! ...y para mantener la continuidad del anterior jejejej

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

En su sueño, el recuerdo la traslado a un dia en que se encontraba volando por la ciudad regresando de su trabajo, donde de repente llamó su atencion la presencia del simpático-idiota que insistía en un imposible...la mision de " ser su amigo". En fin , viendo que se dirigía corriendo misteriosamente por un callejón decidió seguirlo desde el cielo...pero se sorprendió al verlo abrazar a una chica y pegarla a la pared del lugar, sintió celos y luego asco al interpretar que tal vez él era en efecto un patan mas en el mundo. se iba a acercar, hasta que divisó a otro hombre alto y fornido que caminaba girando la cabeza lado a lado como cazando a alguien, fue allí que empezó a dilucidar que su pequeño héroe estaba intentando ayudar a la muchacha, pero fue en vano porque fueron rápidamente interceptados por aquel crápula. tatsumaki mantenía la distancia tal vez por curiosidad o simples celos, en este punto era difícil de decidir. de lejos vió como fueron acorralados y saitama empezó a luchar con el hombre, hasta que esté a punto de perder, sacó un revólver con el que apuntó a la mujer, cuando disparó saitama no pudo evitar interponerse, pero se sorprendió al ver que la bala quedó a centímetros de su pecho detenida por una característica energía verde, miró a su alrededor y la vio elevada tras el hombre que lo atacó, se veía bastante enojada. cambió la dirección de la bala poniéndola en la frente del delincuente manteniéndolo asustado y arrinconado contra la pared del callejón, luego miró a saitama

-¿qué haces idiota? no te he dicho que no juegues al héroe si no tienes poderes?-

- chica esmeralda...ufff gracias, eso estuvo cerca-

-Tu, niña!! Debiste llamar a la policía...y no quedarte allí esperando sin hacer nada!! ...eres inutil. ya no los llames porque de eso ya me encargué. deben estar por llegar-

tatsumaki miraba a saitama expectante, parecía que lo miraba tratando de identificar alguna herida grave, luego la otra joven se acercó a saitama intentando ayudarlo. tatsumaki estaba allí de brazos cruzados tratando de controlar algo que jamás pensó tener, celos. por el rabillo del ojo les dirigía miradas para saber si ellos se conocían desde antes, se alivió al oír que no era así, por lo que más tranquila y cuando la policía se llevó a las otras personas se acercó y lo llevó volando a su casa.

-gracias chica esmeralda...esta vez me salvaste...-

- debes ser más prudente.ya te lo he dicho, si te vas a dedicar a ser héroe hazlo...pero no estés en este ir y venir, puedes terminar herido de muerte-

-no molestes de nuevo con eso...ya lo sé, pero es difícil...no puedo ignorar a alguien en peligro...y pelear es demasiado emocionante en mi aburrido día a día-

al llegar tatsumaki no dijo nada y solo se giró para irse...

-espera!! déjame invitarte a comer -

-no quiero -

-no seas así, será una cena ...en agradecimiento-

-no gracias...- dijo con sorna

saitama bufó derrotado - como quieras, igual gracias...eres buena amiga-

-no somos amigos, solo no podía dejar que alguien muriera frente a mi...adiós-

-Adiós!!- se despidió con calma mientras se giraba a abrir la puerta y entrar a su hogar rascándose la cabeza como gesto de fatiga.

tatsumaki solo lo ignoró y se alejó...aunque no lo admitiera, encontrarselo hacía agradables y menos monótonos sus días. además que le parecía intrigante saber cuanto más resistiría una persona aparentemente tan altruista como él, estaba esperando a ver si su fachada de "héroe" caía y poder así comprobar que las personas son siempre malas, para así lograr dejar atrás las dudas que, desde que lo conoció, estaba teniendo con respecto de la frase de su salvador. lo cual la avergonzaba.

Para sanar, tuve que recordarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora