1.UN NUEVO COMIENZO.

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 PRISIÓN ESTATAL DE BUSAN, COREA DEL SUR.

Las ruedas de un carro de servicio que llevaba libros rechinaban por los pasillos de la fría cárcel, la falta de mantenimiento en ellas era más que evidente; pero a ninguno de los habitantes del lugar parecía importarles una mierda, era un ruido común y corriente, al menos para ellos. Irónicamente se podía decir que significaba entretenimiento, o simplemente una manera de matar el ocio con cierto provecho. Era la hora de recibir el libro que habían pedido, o para entregar el que ya habían terminado de leer.

Choi Minho. Un hombre de 45 años, alto, musculoso, varonil, pero de rostro adusto. Llevaba bigote y barba. Un recluso condenado a 20 años de prisión por un fraude no cometido. Era el encargado de la biblioteca del lugar. 

  – ¡Hola Kai! Aquí está el libro que pediste, cuídalo por favor la pasta ya está muy maltratada

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  – ¡Hola Kai! Aquí está el libro que pediste, cuídalo por favor la pasta ya está muy maltratada.

– ¿A quién le importa, Choi? La mayoría de estos estúpidos ni siquiera saben leer. Sólo fingen hacerlo para sentirse importantes.

– Como sea, sólo no lo rompas y ya.

– ¡Bah! Lo que digas.

Después de escuchar eso, Minho siguió su camino hacia la siguiente celda. – ¡Hey, Chanyeol! ¿Ya terminaste de leer alguno de los dos libros que te traje hace tres semanas?

– No jodas Choi, no me han traído mis nuevos anteojos.

– Lo siento pero me los tendré que llevar, los puedes volver a pedir dentro de dos semanas, ya conoces las reglas.

– No necesitas decirme eso, ¿Se te olvida que llevo 8 años viviendo en esta mierda de lugar? Me sé el maldito reglamento de memoria.

El recluso se levantó de su catre, tomó los dos libros de una vieja repisa y se los pasó por entre los barrotes despintados de su celda. Minho los inspeccionó cuidadosamente para saber en qué estado se los estaba regresando.

– ¡Carajo, Chanyeol! ¿Por qué le pintaste bigote y barba a la chica de la portada?

–Jjajajjjaaajja, pensé que no te darías cuenta, pero no se te escapa nada. Acércate y te lo digo. –Minho obedeció, y Chanyeol le susurró al oído. –Es que me di cuenta que ella se parece a ti, pero sin bigote. Y como nunca me has querido regalar una foto tuya, pues yo tengo que hacerme ilusiones de otra forma. Jajajajajajjja.

Minho se apartó con gran disgusto. – No me jodas Park, eres un asqueroso pervertido, seguro hasta te la jalaste.

El preso volvió a reír sarcásticamente. – Jjajajjjajajjajja, sólo te voy a advertir que no lo hojees, algunas páginas pueden estar pegadas, jajajajajaaajjja.

Esas situaciones eran el pan de cada día. Pero, ¿Qué se podía esperar de tipos que tenían años viviendo en confinamiento obligatorio? Las buenas maneras no solían ser las reinas del lugar. Ahí más bien las palabras altisonantes y las malas mañas imperaban. Sobrevivir en ese infierno era un verdadero privilegio.

CORAZONES SOLITARIOS (2 MIN)🔞 [EDITADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora