Las crónicas de Tanya el Führer

Capítulo 09 - el pájaro enjaulado

capitulo 09

Sucedió tan sutilmente que nadie lo notó al principio. La mayoría nunca lo hizo, la verdad sea dicha. Como un cambio de minuto en el clima: incremental, silencioso, pero poderoso. Un diminuto grano de arena que inclina una balanza hacia la izquierda en lugar de hacia la derecha. Unos copos de nieve de más hacen que toda la masa se deslice del techo sobre un peatón desprevenido. O, en este caso, el sonido de una voz...

Debido a la gran cantidad de personas interesadas en el tribunal, la República de Francois había hecho arreglos para que los testimonios fueran transmitidos por radio... ¡una primicia en el país y en el mundo! Mediante el uso de orbes mágicos especializados y tecnología de punta, sus voces podrían capturarse, editarse para mayor claridad y entregarse a todas las partes interesadas. Pero la gente de Paree pudo escucharlo en vivo y sin censura. Los lugares de reunión, las escuelas, los pubs, los cafés... cualquier lugar que pudiera permitirse un receptor de radio sintonizaría las pruebas. Tan pronto como pudieron construirlos, fueron comprados y sintonizados en la única transmisión disponible.

Preocupadas por las interrupciones en el orden civil, las autoridades sugirieron prohibir la práctica, pero se encontraron con una desaprobación tan abrumadora que rápidamente cedieron. Y, semanas después, finalmente pudieron escucharla.

Como principal abogado de su defensa, testigo principal y también único sospechoso, se la escuchó más que a cualquier otra persona. ¡Tanya cuestionando, Tanya explicando, Tanya exhortando, Tanya superando! Su voz transmitía poder y convicción tanto como sus argumentos transmitían lógica. Para la mayoría, era como una melodía sutil que se abría paso en tu mente antes de que te dieras cuenta. Para algunos, un martillazo que dejaba estupefactos de un solo golpe.

Muchos la odiaban pero nadie la ignoraba.

* * *

Aunque en las deliberaciones, los jueces todavía tenían que responder a las partes interesadas, es decir, a Todos. Cualquier gobierno mundial que estuvo involucrado en la guerra tenía un interés en el caso y dejó saber su descontento. Aunque por diferentes razones, todos estaban descontentos con el tribunal y la presión iba en aumento.

Y ahora había una petición de Gladieau para sacarla de La Santé porque era "profundamente insegura". La sugerencia fue trasladarla a un lugar secreto fuera de la ciudad mientras continuaban las deliberaciones. Fue terriblemente difícil rechazar la solicitud ya que la evidencia estaba claramente de su lado.

El juez de la Federación golpeó su copia de la petición y, al considerar que era insuficiente, la rompió en pedazos. "¿Cómo podemos acceder a esto? ¡¿Ella es una criminal descarada y ahora estaba de vacaciones pagadas en el campo?! ¡Quizás un chef y una criada también serían agradables!"

El juez de Dacia reflexionó: "Incluso si estamos de acuerdo, está la cuestión de la ubicación. ¿Cómo podemos estar seguros de que es seguro?" De todos los jueces, sorprendentemente fue el que más simpatizó con el destino de Degurechaff. Aunque su derrota ante el Imperio fue vergonzosa, terminó tan rápido que sufrieron poco tiempo bajo el dominio imperial. A decir verdad, los dancianos habían aprendido mucho durante ese tiempo y su país se estaba modernizando rápidamente con la ayuda de ingenieros y equipos de construcción alemanes que no podían encontrar trabajo en su país de origen.

Los gobernantes de Dacia habían sido derribados media docena de muescas y él, en privado, pensó que eso era algo bueno. "No hay ninguna razón por la que no pueda estar igual de segura en otro lugar. Nada de vacaciones, eso sí, pero evitaría tener batallas sangrientas en medio de una prisión 'segura'".