She and me... - Choni [g!p]

【𝑻𝒘𝒆𝒏𝒕𝒚-𝒇𝒊𝒗𝒆】

POV: TONI.

—¡Hmm, si! Tab... —gemi llegando al orgasmo en voz baja. Mi pecho subia y bajaba, mi respiración estaba agitada y mi frente sudorosa. Tabitha salió de abajo de las sábanas sonriendo.

Es tan linda.

—¿Estas bien? —pregunto subiéndose arriba de mi y besando mis labios suavemente, sintiendo la esencia de mis flujos en su boca.

—Si... eres demasiado buena en esto. —le sonreí de lado y ella imito mi acción—. Ahora te toca a ti, cariño. —coloque mis manos en su espalda y la gire en un movimiento rápido, haciendo que ella quedase abajo de mi.

Bese su cuello y masajee sus pechos desnudos, mientras bajaba con besos hasta su entrepierna. Abri sus piernas y bese ligeramente sobre sus bragas de encaje rosadas. La escuche jadear e involuntariamente sonreí.

Tome entre mis dedos los hilos de su braga y la baje hasta quitarla por completo. Mordí ligeramente mi labio inferior en cuanto vi lo mojada que estaba.

—Me encanta la manera en la que te mojas fácilmente cuando me das sexo oral. —murmure haciendo ligeros círculos sobre su clitoris con dos de mis dedos y besando su cuello. Ella nuevamente jadeo, pero esta vez acompañado de un sonoro gemido.

Sin dar más vueltas, me adentre en sus piernas y las sábanas, lami su húmedo sexo, mientras la tomaba fuertemente de los muslos y la pegaba más a mi. Tabitha comenzó a gemir en voz baja, pero antes de que pudiera hacer algo más, los golpes en la puerta nos interrumpieron.

—¡Mamá! ¡Tabitha! —grito mi hijo desde afuera del cuarto. El intento abrir la puerta, pero tenía seguro puesto, por lo que escuché un pequeño gruñido por su parte—. ¡Mami, abre!

Mire a mi novia y ella tenia cara de frustración. —¿Ves? Te dije que no era buena idea hacerlo mientras Luka dormía siesta, ya te dije que no me gusta hacerlo cuando el esta en casa. —murmure suavemente mientras salia de abajo de las sábanas y me levantaba de la cama, para comenzar a vestirme.

—Lo se, pero te extrañe. —una vez que ambas acabamos de vestirnos me abrazo y escondió su cara en mi cuello, para luego sentir unos tiernos besos allí—. Pero no pasa nada, podemos dejarlo para otro día.

Le sonreí y bese una última vez sus labios antes de dirigirme a la puerta y abrirla.

—Mami, tardaste mucho en abrir, ¿Qué estaban haciendo? —hablo mi pequeño, intento mirar atraves de mi, observando la habitación.

—Estábamos durmiendo, cariño, al igual que tu. —menti tratando de aguantar la risa, ya que Tab me estaba mirando con una sonrisa burlona y sus cejas alzadas.

—Oh, bien. Solo venia porque la tia Veronica llamó y dijo que en una hora vendrá con Daira. —murmuro emocionado y dio un pequeño brinco de felicidad.

—Esta bien. Ve a preparar la ducha para bañarte, iré en unos minutos. —el asintió y se fue corriendo a su habitación.

Nuevamente cerre la puerta y me dirigí al baño, donde vi a Tabitha cepillando sus dientes. Ella al verme me sonrió.

—Espero que no haya escuchado nada. Luego le dice a Verónica lo que escucha y tengo una regañada por parte de mi mejor amiga. —murmure riendo mientras bajaba mis bragas y mi short de pijama, para luego hacer mis necesidades mientras Tab me escuchaba y reía mirándome atraves del espejo.

—De todas maneras no creo que haya escuchado nada, apesar de que eres muy ruidosa. —dijo riendo, después de haber enjuagado su boca y dejar su cepillo de dientes en su lugar. Solté una carcajada y negué.