OSCURIDAD DESCONOCIDA

EL SUEÑO

Al despertar por la mañana, Khantos recordó su sueño, le pareció muy extraño y quería saber si era un sueño común o le estaba intentando decir algo, así que fue a preguntarle al sabio de su ciudad a preguntarle.

Khantos: Sabio, quisiera saber algo, tuve un sueño extraño y quería saber más sobre el sueño.

Sabio: Cuéntamelo.

Khantos: Recuerdo que estaba en un lugar oscuro, se empezó a iluminar y una voz me hizo unas preguntas, después luche contra una forma extraña muy grande.

Sabio: No veo nada de raro.

Khantos: Eso no es raro, una vez soñé que una lagartija gigante me iba a devorar, pero lo extraño es que cuando me hizo las preguntas no podía hablar, sin embargo supo lo que quería decir, y antes de despertar me dijo que yo era la luz, no parecía un sueño, parecía que me decía algo, por eso le vengo a preguntar si sabe algo de esto.

Sabio: Si lo sé, ahora quieres que te lo diga o quieres saberlo tu mismo.

Khantos: A que se refiere.

Sabio: Ven conmigo.

Entonces Khantos acompaño al Sabio a la parte baja del palacio donde el cristal de vida estaba resguardado.

Khantos: Este es el cristal que nos contó a Vemdur y a mí, ahhh, Vemdur.

Sabio: Si pero eso no es lo que nos interesa, te noto un poco aflijido.

Khantos: Lo estoy un poco pero no tiene importancia.

Sabio: Para esto tienes que relajarte, ya llegamos.

Khantos: ¡¿Es aquí?!, Yo solo veo una cama y ya, de esas hay en cualquier casa.

Sabio: Si, es una simple y común cama, pero lo que nos importa es el lugar, a esto lo llamo el cuarto de la verdad, puede ser un dormitorio cualquiera pero al estar cerca de la energía del cristal es lo que hace especial este lugar, te revela verdades por medio de sueños, así como el sueño que tuviste.

Khantos: ¡Entonces solo tengo que dormir y ya!, ¡Así de fácil!

Sabio: Exactamente, duerme y así sabrás lo que quieres saber.

Khantos dudando de las palabras del Sabio se acuesta y poco a poco se empieza a quedar dormido, tiempo después despierta y la voz misteriosa le dice:

Voz misteriosa: Así que has vuelto.

Khantos: Quien eres?

Voz misteriosa: Soy quien quiera que tú desees.

Khantos: Eso no responde mi pregunta.

Voz misteriosa: Tienes tantas preguntas, pero es mejor que yo no las contesté, sino que tú las averigues.

Khantos: Entonces no puedes ayudarme.

Voz misteriosa: Aunque no pueda responderte tus preguntas, si puedo guiarte a resolverlas, camina hacia la oscuridad y no tengas miedo.

Khantos hizo caso y a medida que se adentraba más, menos podía ver, se nublaba su vista e iba perdido.

Voz misteriosa: Tienes miedo, no sabes por dónde vas, la oscuridad se alimenta de eso, cierra los ojos y elimina a la oscuridad.

Khantos cerro los ojos y siguió caminando recto, no necesitaba su vista para ver por dónde iba, ya que su corazón lo guiaba, al abrir los ojos Khantos se dio cuenta que la oscuridad había desaparecido.

En eso surgieron del suelo unos seres oscuros, muy pequeños y débiles pero en una gran cantidad.

Voz misteriosa: Si huyes de un problema este te perseguirá, si lo enfrentas este desaparecerá, ten esto y vence a la oscuridad.