𝐇𝐈𝐓𝐒𝐌𝐄 ೃ
Sukuna está enamorado de un chico que solo le escribe en cartas e Instagram, pierde su cabeza tratando de imaginar cómo sería la sonrisa de aquel individuo.
Mientras tanto, Megumi se hunde en sí mismo, manteniendo en secreto quién es...
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Capítulo tres: Sonrisas del pasado.
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Y mientras él está cerca de tus labios en el «otro mundo», yo estoy alejado de ti, en el mundo de la luz, un mundo al cual no deberían de llegar las sombras, pero, ahí en una esquina de mi habitación, está el oscuro vacío que dejaste aquel día
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5:00m
Era la hora de salida, Megumi no se juntó con Itadori en todo el día, no porque estuviese molesto con él, sino porque no quería ver la cara del chico que había dicho algo tan grosero en la mañana. No, Itadori no hizo ni dijo nada malo, pero no podía evitar pensar en Sukuna cada que miraba el rostro de su mejor amigo, así que para prevenir que dijera algo malo o actuara cortante con el chico que no tenía nada que ver, mejor decidió evitarlo, luego se disculparía con él.
Durante el último recreo Megumi sabía que Sukuna estaría en entreno, así que fue a por el peluche que le había regalado, bueno, más bien el peluche que le había regalado a Gum, a veces Megumi sentía celos de Gum, sentía celos de que él sí pudiese tener el afecto de Sukuna, que alguien falso haya enamorado a su chico y no él.
Extrañamente, sintió como si algo o alguien lo estuviese vigilando, se asustó un poco ante la idea de que alguien le mirase sacando el peluche, pensaría que está robando del casillero de Sukuna cuando claramente no era así. Cuando se cercioró de que no hubiese nadie en el pasillo, salió y metió el peluche en la mochila.
Los recuerdos venían a la mente de Megumi, él riendo al lado de Itadori y Sukuna mientras jugaban, ¿Es que acaso él de verdad lo había olvidado? ¿Aquellos momentos ya no significaban nada para el de cabellos rositas? Estaba frustrado, frustrado porque él había atesorado esos momentos como si fuesen lo más preciado que tuviese, él no los había olvidado, él quería sentir mariposas en su estómago, pero solo sentía un dolor punzante desde su vientre hasta su columna.
A veces Sukuna podía llegar a ser muy cruel, pero, uno de sus recuerdos es de él defendiéndolo de Haruta Shigemo, un chico muy molesto el cual disfrutaba de hacerle la vida imposible al más joven, pero después de una de las palizas del pequeño Sukuna, este no se volvió a meter con Megumi, o al menos así había sido hasta que estos se separaron, puesto que sus burlas volvieron, pero esta vez él mismo se encargó de mandarlo al diablo, por lo que su acoso bajó de físico a verbal.
Y hablando del rey de Roma, Haruta venía con sus "amigos" caminando por el pasillo, Mahito y Hanami, Mahito era un chico que disfrutaba de molestar a los de años inferiores junto a Suguro Geto, pero este no lo hacía tan seguido como el de cabellos celestes, Hanami era alguien más tranquilo, un chico ciego medio hippy amante de la naturaleza el cual si quería te bajaba el autoestima, y a la izquierda estaba el molesto Haruta, cómo odiaba a esos tipos.
