Un secreto del cielo [Completa✓]

1. Un dia normal.

¡soy un idiota! Si. Debo serlo, ahora como le explico a la editorial que se ofreció a publicar mi libro que Ni siquiera lo he terminado porque estoy bloqueado por estar enamorado y pensando mas en uno de los chicos deportistas de mi preparatoria, de los que nunca le hacen caso a las chicas nerd, menos a un chico que sueña con ser escritor, un escritor de tontas novelas románticas y que ha gastado la mayoría de sus ahorros en pagar una editorial por publicar un libro que ni siquiera esta terminado, ¡si! Definitivamente soy un completo idiota.

Despertar cada día siempre es complicado, principalmente cuando tengo que ir a estudiar, abri los ojos con delicadeza mirando el techo de color azul cielo en el que tenuemente se reflejaba la luz del sol que entraba por mi ventana, eso es un problema, me levante bruscamente jalando mi celular para ver la hora.

-¡6:30!

Exclame con nerviosismo y algo exaltado, tenia que correr si quería llegar a tiempo para mi primera clase, debí olvidar poner mi alarma, otro día mas sin desayunar, pero de eso ya me he acostumbrado, solo me llevaría dos botellas de agua y las tomaría para calmar mi estomago.

Me mire al espejo luego de cambiarme, lo bueno de la universidad es que solo había que usar uniforme un solo día a la semana, el problema: ese día era hoy y siempre he creído que ese pantalón a cuadros y camisa formar con el logo de la preparatoria nunca me quedara
bien.

-Lo odio.. -dije con los ojos entre cerrados mientras llegaba a la cocina-

-Zain, ¡te queda bien!-respondió mi mama mientras me miraba con su sonrisa y sus lindos ojos azules-

-Lo dices porque eres mi mama-me reí nervioso mientras trataba de evadirla-

Mi mama no tiene idea de lo inseguro que soy con mi maldito y delgado cuerpo, aunque eso claramente era mi culpa, nunca me alimento bien y pues, el ejercicio no es lo mío tampoco, robe las dos botellas del refrigerador y antes de huir, mi mama me interrumpió de una manera que enserió, odie.

-Tu padre regresa hoy, recuerda no vestirt....-La interrumpí levantando mi mano porque lo que seguía, yo lo conocía-

-No vestir como un marica con mi
ropa de tonos claros y recordar que soy hijo de un hombre hecho y derecho que da la cara por su familia, Lo se-continúe su frase con pesar,
tristeza y algo de rabia-

No le di tiempo de decir nada y tal vez tampoco quería escucharla porque seguro serian comentarios a favor de mi padre que cada que tiene la oportunidad de verme me recuerda que soy afeminado y marica, nunca pedí ser gay y nunca debí decírselos a ellos, Solo pensé que son mi lugar seguro, Son mis padres, Pero me equivoque, lo bueno es que en la universidad sigue siendo un secreto entre el cielo y yo, porque si tan solo Algo se supiera, mi vida nunca seria la misma. Se que estamos en un mundo diferente, sin discriminación, pero las personas pueden ser muy crueles cuando se lo proponen y mi vida ya tiene suficientes problemas por ahora.

Me fui y recargue mi espalda en la pared afuera de mi casa, necesitaba un segundo para respirar y procesar que mi padre regresaría de ese viaje, sin embargo, no pude tomarme mucho tiempo porque enserió tenia que correr, porque si no, me quería afuera y eso no era para nada bueno para mi, eso significaría que tendría mas tarea para reponer Y eso es muy tedioso, de verdad. Me moví lo suficiente para acomodar mi mochila bien en mi hombro y ahí si, comencé a correr, la preparatoria no quedaba tan lejos, pero lo único seguro aquí es llegaría muy cansado, demasiado, sin embargo, en el camino me encontré a Lucia, una de mis pocas amigas y noto mi desesperación, así que me ofreció llevarme en su motocicleta, después de todo, íbamos al mismo lugar. Y pude sentirme aliviado de que al menos me ahorre todo el camino corriendo y pude llegar mas rápido
-¿Emocionado?-Me pregunto Lucia
justo cuando baje de la motocicleta-

-¿por qué?-Levante una ceja mientras me acomodaba la camisa y el pantalón-

-hoy. Hay juego, viene un equipo contrario a competir con tu enamorado-Dijo sin poder ocultar ni un poco de su tonto entusiasmó-

-Oh.. Es cierto, o lo recordaba, Pero no le digas así-Respondí haciendo puchero-

Mi amiga no perdía nunca la oportunidad de molestarme desde que le conté lo que sentía y ella no me ha juzgado y lo apreciaba mucho, de verdad, Negué porque no quería seguir hablando del tema porque si seria divertido verlo jugar. Pero prefería verlo entrenar.. Era mucho mejor porque a veces estaba sin camisa, y el Futbol me parece tan aburrido, solo unos chicos corriendo de un lado a otro golpeando un balón, Solo voy a eso por el, tal vez por comentarios como esos no le agradaba para nada a mi papa y ya estoy acostumbrado a eso. Me apresure a llegar al salón, a pesar de todo el retraso pude llegar a penas a tiempo, un segundo mas y no hubiera podido entrar porque en eso si eran muy estrictos.. Los horarios y eso es problemático cuando eres un chico tan jodidamente despistado como yo, Que olvido siempre las alarmas y siempre termina corriendo de un lado a otro, lo bueno es que siempre he sido el chico fantasma, Nadie me ve, Nadie me conoce, y así es perfecto.

-La paciencia es la mejor virtud del hombre-Dije mirando al cielo como siempre hacia antes de cada clase-

Ese horrible momento en el que entras a un lugar y todos voltean a verte, lo bueno es que no me miraban a mi, miraban a mi amiga que siempre era hermosa, con su cabello largo y castaño y sus ojos verdes cristalinos, con esa sonrisa que los deslumbra a todos, y luego estoy yo. Un chico delgado no tan alto, unos 1.70 de 19 años, con cabello negro, ojos negros, y nada increíble en mi. Solo pase de largo y me senté a un lado. Una pequeña cajita se deslizo por mi asiento y la mire y luego gire hacia donde provenía y era Jaziel. Mi otro mejor amigo, tenia una sonrisa amplia, y yo solo podía sentirme contagiado de eso, baje la cabeza de nuevo para mirar aquella cajita y poder abrirla, mis ojos se abrieron de par en par, era un pequeño anillo plateado con una hermosa piedra roja, el tallado es tan, Hermoso, así que voltee a mirarlo

-No te emociones, no es para ti-me dijo soltando una pequeña risita-

-Idiota.. ¿Para quién? ¿Lucia?-Dije cubriéndome la boca con ambas manos-

-Le quiero pedir que sea mi novia. Es. No.. Bueno, no se como, pero vi ese anillo en la tienda y... tenia su Nombre Zain, no podía dejarlo pasar-Dijo casi susurrando mientras sus ojos brillaban-

Le entregue la cajita de vuelta y lo mire. Es que siempre hablaba de ella con una sonrisa y feliz, enserió estaba enamorado de ella. Mi amiga, que es algo coqueta, pero nunca he logrado sacarle si siente algo por el, pero lo que no dudaba es que tuviera oportunidad, es un chico lindo, atractivo, con un llamativo cabello rubio y unos ojos Azules oscuros que parecían el mar, nunca entendí como el quiso ser mi amigo, pero compartimos la pasión por escribir, así que eso lo explica un poco.

-Esta hermoso, Le va a encantar, se porque te lo digo-le respondí confiado acomodándome en el asiento-

Lo que mas esperaba claramente era el tiempo libre.. Solo irme de este salón porque tengo cosas mucho mas importantes, mi cabeza giro a ver a Lucia, tan radiante sentada en su asiento, yo respetaba las reglar pero un mensaje no era malo, Saque mi celular con cuidado y manteniéndolo bajo perfil le envié el mensaje "Tan linda, de seguro andas pensando que comer" tardo unos segundos.. Pero al instante giro su cabeza buscándome y yo le regale una sonrisa triunfante cuando nuestras miradas se encontraron, Y antes de apagar mi celular. Su única respuesta fue "Púdrete Blake" tan delicada ella.