20. "Mío"

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Una semana sin salir de mi habitación exactamente, un día mas o un día menos para mi no fue nada importante a decir verdad, yo quería desaparecer y no tener que ir mas, Lucia habia estado trayéndome las tareas así que por ende no me atrase en las clases, ella comenzó a pasar mucho tiempo aquí conmigo ayudándome y ella fue mi escape de las miles de sensaciones que seguían vivas dentro de mi y yo fui su escape de haber terminado con Jaziel porque por mucho que ella diga que esta bien, yo se que también le afecto y yo, me siento la cosa mas miserable del mundo porque eso, es culpa mía. 

Quería evitar por mucho tiempo el tener que asistir pero según mi padre no puedo seguir evadiendo responsabilidades, no me habia vuelto a golpear ni decirme nada y lo agradecí porque no sabia si seria capaz de defenderme o bueno, intentarlo, como lo hice la ultima vez aunque queda mas que claro que perdí en esa discusión, porque fui yo el que quede llorando luego de discutir.

6:15.

Tome mi mochila y ya cambiado solo baje lento las escaleras, mi cuerpo aun pesaba, no habia dormido bien porque sigo siendo yo el que se despierta cada rato reviviendo una y otra vez como todos se reían de mi y aquella voz en mi cabeza no deja de repetir que lo mejor que podía hacer era dejar de existir.

-Mi niño. -Dijo mi mamá en cuanto asome por la puerta de la cocina tratando de evadirla pero no lo logre.

-Hola mamá -Respondí marcando la mejor sonrisa que pude y me acerque recibiendo un pequeño beso en mi frente y dio dos golpecitos con su dedo sobre una tasa que estaba sobre la mesa.

-Te hice tu desayuno.. Llévalo, y mira… -Saco un billete de 10 dólares de su bolsillo y lo puso sobre la tasa. -Prométeme que vas a comer, si quieres algo mas tienes para comprar. -Movió la tasa hacia mi y yo me contuve de hacer una mueca.

-Lo prometo. -Al menos lo intentaría, tome la tasa y la guarde en mi mochila y los 10 dólares en mi bolsillo para no perderlos.

Me moví poder salir, lo mas tranquilo de todo es que desde ese día papá no come con nosotros, al menos no el desayuno y eso significa que tengo que verlo menos. Lucia me prometió llevarme en la motocicleta así que estaba confiado respecto al tiempo, comencé a caminar lento hacia la casa de Lucia, no quedaba muy lejos y solo la vi ahí sentada en su motocicleta esperándome o bueno, eso pensé y me acerque suavemente tocando su hombro pero aun así se asusto y note que casi tira su celular.

-Lo siento. -Me disculpe en tono bajo y ella me mostro una sonrisa animada.

-¡Zain! Ya podemos irnos, anda, sube. -Se acomodo bien y yo me subí sujetándome de ella. -Pero antes.. ¿Comiste? -Bufe y ella soltó una pequeña risa.

-No. Pero me traje mi desayuno, ¿Por qué todos preguntan eso? Hasta Kane me llamo. -Reclame y ella giro un poco su rostro para mirarme por encima de su hombro.

-Porque no estas comiendo bien, te saltas las comidas, porque te queremos mucho y queremos que estés bien. -Eso si me hizo sonreír y yo solo pegue mi frente a su espalda mientras la abrazaba y ella lo tomo bien porque acelero.

De inmediato sentí la brisa golpeando mi rostro de una manera que me relajaba tanto, se que no es seguro ir en motocicleta sin casco pero a mi no me importa realmente si algo me pasa. El viaje fue tranquilo, sencillamente relajante como si dejara de existir por al menos unos minutos hasta que Salí de mi burbuja porque la motocicleta se freno y me toco separarme y me baje, me dejo en la puerta y ella siguió para ir a estacionar la motocicleta.

Ahora me tocaba entrar, negué ligeramente y deje escapar un suspiro jugueteando con la las tiras de mi mochila, quería y tenia que poder entrar tranquilo, no era tan grave.

Un secreto del cielo [Completa✓] Where stories live. Discover now