La aldea de Orhin es conocida por albergar a los mejores cazadores del reino y también por estar cerca del bosque donde se esconden las brujas. Un encuentro inoportuno pondrá en peligro la frágil paz entre ambos pueblos.
#3 en Fantasía (04/07/2022)
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Los amantes se vistieron luego de ahogarse en los placeres del cuerpo. No sabían cuánto había pasado, pero la fogata aún ardía un poco y los pescados estaban achicharrados. Tenían sus bolsos listos para el regreso, aunque el joven recordó su inquietud primordial, pese a todavía estar sometido al éxtasis.
—Di, tengo una pregunta...
—¿Cuál es, bonito? —la chica también estaba plena y su voz tenía tintes de satisfacción.
—Es que no comprendo ¿Qué se supone que ha mejorado en mi lanza?
—¿Aún no te has dado cuenta? Bueno, es cierto que no lo he explicado todavía —trató de hablar seriamente pero las mejillas rojas por el calor anterior le daban una imagen de ternura— Lánzala.
—¿Qué?
—Lánzala —apuntó con el dedo hacia adelante.
—A ver... —Jol levantó el brazo y disparó a Colmillo de Obsidiana, esta voló recto un poco y luego curvando su trayectoría se clavó en el césped—. No entiendo.
—Ahora extiende el brazo y debes desear que vuelva hasta tu mano.
El cazador hizo exactamente lo que le dijeron, un poco incrédulo ante semejante declaración, pero el arma tambaleó retrocediendo de la herida a la tierra y volvió disparada envuelta en un silbido hasta la mano de él. Este tuvo que dar medio giro al recibirla debido a la inercia. Se quedó pasmado mirando la lanza atrapada con sus dedos, como si quisiera corroborar que realmente estaba allí. Sin mermar la desconfianza en sus ojos repitió el lanzamiento, la mano extendida, el mismo silbido con el mismo resultado. Cuando la certeza se fue tornando sólida la emoción apareció irrefrenable por su nuevo poder.
—Es... ¡INCREÍBLE! —no podía dejar de ejecutar el proceso, la distancia a la que el arma regresaba era muy amplía, también comprobó que si se atascaba en algo la fuerza de atracción no era la suficiente como para liberarla, como ocurrió al lanzarla con mucha fuerza contra un árbol donde quedó incrustada, el muchacho tuvo que retirar la lanza con sus manos, aún así, la habilidad era muy conveniente— Jamás imaginé tener un poder como este...
—¿Te gusta?
—¡Me encanta! —abrazó a la bruja con mucho énfasis y le plagó las mejillas con besos— Muchas gracias...
—Me hace muy feliz verte contento —dijo ella apretujada.
—Creo que "feliz" es demasiado poco para describir lo que siento. Sin dudas es una mejora que cambiará por completo mis jornadas —el chico mostró seriedad después de ese comentario, una idea atravesó por su mente.
—¿Qué ocurre?
—Nada. Solo recordé algo —respondió Jol mirando la lanza que sostenía con las dos manos—. Imagina todo lo que podrían lograr nuestros pueblos si cooperaran.
