𝐬𝐢𝐱𝐭𝐞𝐞𝐧

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"Dios, que frío está."

Si. Ahora mismo se estaba arrepintiendo de sólo haber cargado con un abrigo tan delgado como el que traía puesto.

De vez en cuando le brindaba a sus brazos un poco de calor con sus manos al crear un poco de fricción con ellas. Tampoco es como si se estuviera congelando, pero hacía bastante frío y él sólo quiso vestir de una forma relajada y hasta sexy.

"Debí hacerle caso a YoonGi."

Si, si tan sólo hubiera aceptado su opinión, no estaría en esa vergonzosa situación.

De seguro Jeon llegaría a burlarse de lo idiota que fue.

Negó con la cabeza para alejar cualquier pensamiento negativo, concentrándose en el camino por el que el "taxi" lo conducía.

Aún faltaba bastante para la hora en la que ambos acordaron, sin embargo no había razón para ir en punto, si era posible llegaría antes, pues tampoco es como si tuviera otra cosa que hacer.

Después de que YoonGi se quedara un rato más, acordando su próxima cita en su casa para pasar tiempo juntos, lo ayudó a escoger un buen atuendo, aunque casi no escuchó las advertencias del rubio, si, fue algo idiota, pero ya no había marcha atrás.

Esperaba que al menos aquel conjunto impresionara un poco al ídolo.

No conocía la dirección del mayor por lo que agradecía que el chófer que lo estaba llevando no preguntara por alguna indicación o algo así. También agradecía que haya sido el mismo Jeon quien haya enviado a aquel hombre para recogerlo y llevarlo hacia su hogar.

Aún estaba un tanto desconcertado por ello, no es como le incomodara, pero le ponía un tanto asnioso que le haya enviado a un chófer de supuesta confianza. Aunque ahora que lo pensaba mejor, era una buena manera de mantener todo el asunto en discreción, no quería que luego su rostro saliera en las revistas siendo visto entrar o salir de la casa del artista.

"¿Como sería eso?"

De repente, su imagen intentó visualizar diferentes portadas en las que se podía ver a un SeokJin con su rostro más hermoso de lo que ya era, fotografiado distraído.

De seguro seria el "chisme" del momento y todos hablarían de ello.

"Hablarían de mi."

¿Pero qué cosas estaba pensando?

Negó con su cabeza para alejar esos pensamientos extraños de su cabeza.

Él no era alguien que necesitara de JK para crecer de forma sana y tranquila en la industria del entretenimiento. Además de que ser marcado como "el amante de una de las estrellas de la musica del momento" no era algo que le agradara realmente.

Decidió que simplemente se concentraría en el camino para evitar pensar cosas estúpidas y sin sentido a esa hora de la noche.

Aprovechó para apoyar su cabeza sobre el respaldo del asiento trasero de aquel auto negro, veía por la ventanilla como poco a poco se acercaban a lo que supuso era su destino. Su boca se abría poco a poco por la impresión.

¡¿Esa es la casa de Jeon JungKook?!

Era enorme en cualquier sentido, se notaba lo lujosa que era, la entrada, el jardín, todo el jodido frente de aquella mansión parecía que costara más que su propia vida.

──El idiota vive bien…── El pequeño pensamiento se había escapado en un suave susurro de sus labios, rápidamente callándose y cerrando su boca al notar como el chófer daba una pequeña mirada hacia la parte trasera del auto.

𝐫𝐨𝐜𝐤𝐬𝐭𝐚𝐫  |  kookjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora