𝐫𝐨𝐜𝐤𝐬𝐭𝐚𝐫 | kookjin

𝐞𝐢𝐠𝐡𝐭

──Me gusta── Al oír la semi-aprobación de su mánager, sonrió feliz y emocionado de que le gustara. ──Es buena ──

──Ah…── Soltó todo el aire que tenía contenido en sus pulmones, enseñando una sonrisa de alivio. ──Tarde mucho en pensarlo y ahora en armarla, estoy cansado──

Se recostó nuevamente sobre el costoso sofá de la sala de su casa, mientras HoSeok dejaba la libreta del menor, para luego tomar las dos tazas de café que se encontraban en la mesita ratona y llevarlas a la cocina.

──Se nota que pusiste mucho en ella, estoy comenzando a enorgullecerme de ti── Habló desde la cocina, comenzando a lavar las tazas que habían estado utilizando anteriormente.

Por su parte, Jeon estaba feliz, después de la pequeña cita que tuvo con el chico que había conocido hace poco, su humor había cambiado demasiado para ser sincero, incluso tenía más ánimos para muchas otras cosas. Se sentía raro, pero feliz. Además de que la "cita" no había terminado tan mal como lo pensó, incluso dieron un pequeño paseo luego de desayunar.

Y por más extraño que le parecía, desde entonces no había dejado de hablar ni un momento, incluso el chico le envió varios mensajes seguidos.

Quizás todo termine como lo planeé.

──¿No te enorgullecía antes?── El pelinegro llevó una mano a su pecho, donde se encontraba su corazón, fingiendo que se encontraba ofendido y dolido de las palabras de su mánager.

──Claro que me enorgullecías y me enorgulleces, pero ya sabes, últimamente te estabas comportando como un verdadero idiota── Dejó el par de tazas para secar y secó sus manos con un trapo de la cocina, regresando a la sala con su "conejito". ──Ahora te levantaste de buen humor, eso no lo veo todos los días, y me enseñaste las letras de tus nuevas canciones, te veo muy inspirado── Se cruzó de brazos caminando hacia el sofá, y se sentó sobre uno de los posa brazos de éste. HoSeok no era idiota, conocía muy bien al pequeño mocoso molesto y malcriado con quien trabajó por años, quitándole su gran amistad de muchos años más. Algo estaba muy raro con él. ──¿Qué te sucede?──

El más alto lo miró un poco extrañado con la pregunta. Realmente no le pasaba nada, si bien sabía que despertó de muy buen humor y con mucha energía a diferencia de otros días, pero eso le pasaba de vez en cuando, no era la gran cosa o algo porque sospechar. Por lo de las letras, si que se encontraba muy inspirado, que llegó a escribir al rededor de cuatro canciones en sólo un día, aunque sabía que necesitaban revisarse.

──Para suerte sincero; nada──

──No te creo, algo sucede contigo y no quieres decirme, ¿por qué?──

Abrió la boca para volver a negar ante las sospechas de su mánager, pero volvió a cerrarla cuando un loco pensamiento se cruzó por su cabeza, había olvidado caso por completo la idea principal del porque llamó tan temprano al pelirrojo.

──Quiero cambiar de tema, ¿cómo se ha visto mi imagen últimamente?──

──Bien…── El mayor sacó su celular, mientras recreaba un par de cosas, hasta que habló. ──Después de tu último concierto, las reseñas fueron muy buenas, sin embargo, todos están hablando de la última fiesta a la que fuiste── Miró al menor con algo de molestia y cansancio. ──Parece que aún no se les olvida como te drogaste e iniciaste una pelea con un par de los invitados──

──Mierda…──

Era poco decir que necesitaba borrar de todas las revistas, diarios y notas, ese tipo de situaciones, estaba algo desesperado por conseguir una buena imagen, de lo contrario aquello estaba afectando tanto la venta de su música, como en las posibles entrevistas y sus conciertos. Su estúpida actitud podría llegar a hundirlo, y no estaba dispuesto a permitir que eso pasara.