MY FUCKING ADDICTION - Present Mic, Mr. Compress, Aizawa y tú

CAP 49 - El lago (+18)

El viernes por la mañana te diriges a la UA, lo primero que haces al llegar es dirigirte a la oficina de Nezu, como siempre, amablemente te invita a pasar a su oficina, se ve tranquilo.

—¿Ya tomó su decisión? —Pregunta

—Lo hice —Dices firme.

—¿Va a quedarse con nosotros?

—Agradezco mucho la oportunidad, pero... tengo otros planes para mí, lamento tener que retirarme, siempre estaré agradecida por el gran trato que recibí en esta academia.

—Entiendo, si ya no puedo persuadirla, acepto su decisión. ¿Regresará a la compañía a la que representaba?

—No, en realidad, acepté una oferta laboral fuera del país.

—Si es así, solo me queda agradecerle por todo lo que hizo por nosotros.

—Lo hice con gusto —Haces una reverencia y sales hacía la puerta pero te detienes y volteas a verlo—, Señor director, le agradecería que sea discreto con la información acerca de mi nuevo trabajo en el extranjero, hay personas que no lo saben aún, y quisiera mantener eso así por el momento.

—Como usted desee.

Llegas hasta tu oficina, dejas todo en orden para la nueva persona que ingrese a trabajar ahí, pones varias de tus pertenencias en una caja mediana, las flores que Mic te regalo hace un día todavía siguen frescas, las pones con delicadeza en la caja sobre las demás cosas y sientes algo de nostalgia al mirar a tu alrededor y mientras observas por la ventana te das cuenta de todas las cosas que han pasado desde que empezaste a trabajar ahí, las personas que conociste, las historias que se hicieron... Todo eso dejas hoy, y en las siguientes dos semanas, dejarás el país, puede que año y medio no sea mucho, pero es suficiente para darte el respiro que necesitas, y si las cosas salen bien, podrías quedarte por mucho más tiempo.

El sol sigue iluminando, no falta mucho para que se oculte, la puerta se abre de golpe, es Mic, su respiración es fuerte, se nota que vino corriendo hasta ti por alguna razón.

—¿Mic?

—¿Es verdad que te irás?

No sabes bien a lo que se refiere, solo esperas que esté hablando de tu trabajo en la UA y que no se haya enterado de tu trabajo en New York.

—Sí Mic, ya no trabajaré más aquí.

—¿Por qué? ¿Es por Shota? ¿Por mí? ¿O es por...?

—En parte —No dejas que termine la oración—, necesito mi espacio, y no puedo tener eso aquí.

—Honey... No puedes irte, si te vas yo...

—¿Vas a chantajearme? —Sonríes, es dulce la manera en la que se preocupa, pero estar junto a él, siempre parece imposible, siempre pasa algo, siempre dice o hace algo, no es el momento para los dos, lo sabes.

—No, si quieres espacio... Lo haré, por ti... yo sé que puedo.

—Así no puedas hacerlo... No tendrás otra opción más que hacerlo Mic. —Bajas la mirada.

—¿Qué quieres decir?

—Ya te darás cuenta luego —Sonríes con cierto aire a nostalgia, no lo sabe, pero vas a extrañarlo.

—Te ayudo con esa caja, no creo que puedas cargar todo eso, debe estar pesado. —Se dirige a la caja.

—No tienes que hacer eso.

—Lo haré... —Mira el contenido—, ¿Vas a llevarte las flores? —Sonríe y se sonroja un poco.

—No puedo dejar que se marchiten aquí.