En Este Infierno

capítulo 9: Toda una vida y más allá

Penélope se acostó en uno de los asientos acolchados ubicados dentro del gremio. Supuso que Vinter la llevó allí mientras su conciencia estaba atrapada dentro de esa habitación de fragmentos de vidrio.

Fue un lindo gesto, pero cuando recordó todo lo que él le hizo, todo lo que quiso hacer fue alejarse de él.

Sin embargo, pensó que sería más inteligente quedarse y escucharlo. Además, si él nunca le devolviera sus recuerdos anteriores, habría permanecido en la oscuridad todo este tiempo.

Así que se incorporó, usando el pañuelo que él le había dado antes para secarse las lágrimas que escapaban de sus ojos. Se obligó a calmarse tomando algunas respiraciones profundas, porque sabía que llorar no resolvería nada.

"Déjame traerte un poco de té, milady", dijo, a punto de alejarse para hacerlo.

Pero Penélope lo agarró de la manga y sacudió la cabeza, "No necesito té, necesito una explicación".

Se suponía que estaba muerta. Podía recordar claramente cómo tragó ese veneno y el dolor paralizante que atravesó su cuerpo inmediatamente después. Casi podía imaginarse la sangre pegándose a su barbilla después de toser.

¿Cómo? ¿Cómo podía estar sentada aquí, viva y bien, en el pasado?

Vinter suspiró y se sentó en la mesa de café, entrelazando los dedos mientras apoyaba los codos en los muslos. "Regresé el tiempo, Lady Penélope".

Ella podría haberlo adivinado.

No podía pensar en ninguna otra persona capaz de hacerlo, y el hecho de que fuera Vinter quien le mostrara los recuerdos anteriores simplemente respaldaba sus suposiciones.

"¿Pero por qué?" cuestionó, girando su cuerpo para mirarlo, "¿Y cómo es que todo es tan diferente?"

Los hechos que deberían haber tenido lugar nunca ocurrieron. Se suponía que se encontraría con Vinter durante el cumpleaños del Segundo Príncipe, no en el banquete del festival organizado por el Príncipe Heredero. Se suponía que debía comprar a Eckles en la subasta de esclavos, pero aún no lo había visto durante esta línea de tiempo. Se suponía que iría al festival con Derrick y Reynold, no con el Príncipe Heredero.

Lo que es más importante, se suponía que Callisto le dejaría una cicatriz en la garganta durante su primer encuentro, pero en lugar de eso, bailó con ella.

Vinter movió su muñeca y el espejo voló hacia su mano nuevamente. Las flores moradas en el mango permanecieron en flor.

"¿Sabes lo que significan estas rosas moradas?"

Genial, ya me duele la cabeza y ahora tengo que resolver este extraño acertijo de mago.

"¿Qué?" respondió con frialdad, cruzando los brazos frente a su pecho.

Vinter se quedó en silencio por un rato, dejando que sus dedos trazaran los pétalos como si quisiera prolongar la respuesta lo más posible. Penelope trató de ser paciente, pero estaba a un pelo de distancia de romper y decirle que se diera prisa.

Pero justo antes de que ella lo hiciera, él finalmente le dio una respuesta.

"Un amor imperfecto".

La molestia se borró por completo de su rostro y todo lo que podía hacer era mirar en estado de shock. Justo frente a ella estaba el venerable Marqués, un hombre noble que fue entrenado para ocultar bien sus emociones.

Y estaba llorando.

Las lágrimas caían de sus ojos, exactamente como ella estaba llorando antes. Penélope rápidamente miró a su alrededor antes de ver el pañuelo que le había dado antes.