NOONA❞ knj

"Traiciones"

—¿Esa también está rota?

Le miró mal. Namjoon de verdad había traído todas las pruebas de embarazo que había encontrado y todas las había probado, todas marcaban positivo.

—Nam...

—¿Ya puedo sentirme feliz? Porque deberíamos estar felices, dijiste que era muy difícil para tí quedar embarazada y mira— rió — solo bastó un intento, lo que nos dice, que nunca fue un problema tuyo. Vamos.

—¿A dónde?

—A dejar a tu marido, ya no estoy dispuesto a esperar más. Esto lo cambia todo— la besó— serás madre.

Aquello era lo que Dhay más había anhelado en toda su vida de casada; ser madre. Pensó que ya era muy tarde para ella y de hecho, seguía pensando en que ya era tarde, pero, podía permitirse sentir gozo.

Sentía una presión en el pecho que la instaba a llorar, eso hizo, dejó que algunas lágrimas se deslizaran haciendo presencia y a su vez permitió a Namjoon abrazarla y consolarla.

La entendía, Dhay era una mujer que ya se había resignado a vivir como lo hacía, sola y sin amor, entonces Namjoon había decidido hacer algo al respecto porque se enamoró de todo lo que vio en Dhay, todo lo que nadie más notaba, Namjoon lo resaltó.

Ella solo necesitaba amor y nada más.

—Ven, te haré el amor para celebrar— la cargó en brazos— no puedes quedar más embarazada, de todas maneras.

—¡No corras!

En la sala de su casa había una disputa que se apaciguó cuando ella entró, Namjoon detrás suyo.

—¿No pudo quedarse en tu casa unos minutos más?— alegó el señor Kang a Namjoon quien negó.

—Ocurrió algo— fue su respuesta.

—¿Qué hace él aquí?

Dhay no sabía que hacer, Honggi lucía tan confundido y perdido entre todos ellos, que sintió algo de pena.

—Tenemos que hablar— dijo— Nam me contó que te buscó, papá, está bien.

—Espero que no te enojes con él por eso, hizo lo que tenía que hacer ya que tú no lo haces.

—Si, lo sé— se giró hacia su esposo— ¿Firmaste?

—No— respondió con obviedad— ¿Quieres que firme? No lo haré, incluso si quieres, esto no me beneficia en nada.

Su madre reclamó su atención.

—¿Te das cuenta, Dhay? No te aprecia en absoluto, solo le importa no quedarse sin nada, pelea por la casa, no por tí.

Su pecho se llenó de aire y asintió, no le sorprendía. Namjoon la observó desde su lugar, no tenía idea de cuál sería su siguiente movimiento.

—Puedes quedarte con la casa, no me importa, solo firma.

—Dhay.

Ella apartó la cláusula de la propiedad en los papeles del divorcio, luego fue hasta la habitación que compartía con Honggi, tardó bastante en regresar. Le entregó los papeles de la casa.

—La casa no me importa, no podría vivir aquí porque todo me recordaría a tí, además, todo lo has alterado, cambiaste el suelo, las paredes... todo sin consultarme. Supongo que esto es más tuyo que mío.

—¿Por qué quieres el divorcio?— cuestionó—Nunca te has quejado, has cumplido con tu papel de esposa y ahora, quieres esto— se cruzó de brazos —¿Qué hiciste, Dhay? Porque es obvio que te sientes culpable por algo.

El señor Kang bufó.

—Lo que se ve, no se pregunta— haciendo referencia a la presencia de Namjoon ahí, quién sonrió viendo al suelo.

—Papá—negó con la cabeza, volviendo su atención a Honggi—He traicionado nuestra relación, no me siento culpable por lo que hice, ya no, espero que no te atrevas a reclamarme cuando no tienes derecho, tú nos traicionaste primero y no te reclamé nada. Es tiempo de que hagas algo por mí y acabemos con esto que no va para ningún lado.

El silencio era abrumador hasta que Honggi volvió a negar.

—No voy a firmar el divorcio— musitó— ¿Dejarte ir con tu amante? No, eres mi esposa hasta la muerte y así será hasta que sea inevitable. Jamás pensé en dejarte por nadie, incluso si te traicioné, tu lugar como esposa siempre estuvo claro e innegable, porque siempre te elegiría por encima de cualquier otra mujer.

Dio media vuelta, dándoles la espalda para irse a su habitación y dar por cerrado el tema.

—Estoy embarazada— Dhay apretó sus puños a sus costados— y claramente no es tuyo, así que...

—Te acostaste con el entrenador...— suspiró.

Parecía no haber espacio para un acuerdo.