Joshua solía pensar que tenía una vida sexual saludable, pero después de dos semanas de follar a su mejor amigo, se dio cuenta de lo equivocado que había estado. Prácticamente había sido un monje en comparación con la frecuencia con la que se había cogido últimamente.
Jeonghan era muy insaciable. A Joshua le gustaba pensar que los hombres con los que había tenido relaciones sexuales en el pasado dejaron su cama perfectamente satisfechos, pero Jeonghan... era otra cosa. Se puso duro en el momento en que Joshua sacó su polla, retorciéndose impacientemente hasta que Joshua finalmente le dio lo que quería: su polla. Nunca había conocido a un chico que estuviera tan jodido como Jeonghan.
Joshua tuvo que admitir que fue un poco más de un impulso de ego que ni siquiera tuvo que tocar la polla de Jeonghan, no es que Jeonghan quisiera que tocara su polla. Eso sería demasiado gay: Jeonghan era así de ridículo. Aparentemente, tener la polla de Joshua dentro de él no era para nada gay, pero Dios no lo quiera si Joshua lo tocaba. Joshua no sabía si reírse de él u ofenderse por esa actitud. Quería sentirse ofendido, realmente lo hizo, pero siempre había sido terrible al estar enojado por la ridiculez general de Jeonghan. Era como estar enojado con un cachorro despistado y demasiado ansioso.
"Vamos, hombre," se quejó Jeonghan.
"Después del partido de hockey," dijo Joshua, sus ojos en la televisión. Los Bruins estaban absolutamente aplastando a los Pingüinos.
"Pero estoy caliente," dijo Jeonghan, dejándose caer en el sofá junto a él.
Joshua resopló. "Siempre estás caliente." Mantuvo sus ojos en la pantalla, fingiendo no darse cuenta de que los ojos de Jeonghan estaban fijos en su entrepierna. "Usa un consolador si no puedes esperar."
En su visión periférica, el labio inferior de Jeonghan sobresalía. Cristo, él realmente era un niño a veces.
"No quiero un consolador," dijo Jeonghan, mirando la entrepierna de Joshua. "Quiero tu polla."
La polla en cuestión se contrajo. Joshua lo ignoró. Estaba viendo un buen juego de hockey, y no iba a dejar que Jeonghan lo distrajera solo porque quería usar la verga de Joshua para venirse.
"Shuaaaa," dijo Jeonghan, poniendo su cabeza en el hombro de Joshua. "Vamos."
Joshua dejó escapar un suspiro. "¿Crees que este tipo de actitud me enciende? Cuanto más te quejas, menos excitante es. Déjame ver el maldito juego."
"Bien," dijo Jeonghan con mal humor. "Aunque no sé por qué te molestas con este juego. Los Bruins van a ganar, de todos modos. Blackburn y Fairley son imparables."
Joshua tuvo que admitir que Jeonghan tenía razón. Los Bruins tuvieron un comienzo increíble esta temporada, principalmente gracias a la increíble química entre el novato Fairley y el capitán de los Bruins, Hunter Blackburn. Eran imparables, marcando logros en cada juego como si no fuera nada. Como si escuchara los pensamientos de Joshua, Blackburn recibió un pase enfermizo de Fairley y cortó el disco en la red, para deleite de los fanáticos de los Bruins.
"Apuesto a que están jodiendo," dijo Jeonghan, viendo a Blackburn y a Fairley abrazarse.
"No seas ridículo," dijo Joshua. "Blackburn es definitivamente hetero. Está saliendo con esa famosa modelo, de la que olvide su nombre."
Jeonghan se encogió de hombros. "Está bien, tal vez no cojan. Pero apuesto a que Fairley quiere. Observa cómo mira a Blackburn: como si fuera a caer de rodillas allí mismo con tan solo una palabra de Blackburn."
Resoplando, Joshua puso los ojos en blanco. "Estás viendo cosas que no están ahí solo porque estás caliente."
Jeonghan le dio un codazo. "¡Estoy en lo cierto! Es bastante patético que incluso yo tenga un gaydar mejor que tú."
