"THE EXPLOSIÓN SLAYER" (Bakugo en Kimetsu No Yaiba)

CAPITULO 64: "COLMILLO"

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Pocos eran aquellos cazadores que no iban al entrenamiento de los pilares, y entre ellos en especial se encontraba el indiferente, serio y malhumorado Kaigaku. Quien a sus palabras, rechazó esta "Estupidez" como él le decía y se dedicó a vagar por su cuenta entre las sedes de cazadores entrenando por su cuenta, como siempre lo hacía

--¡Hey, golpeaste a alguien de mayor rango que tú!-- Regaño uno de los tantos chicos que miraban con desprecio al pelinegro usuario del aliento del rayo, quien tenía su katana en la espalda

--¿Qué no sabes lo que es el respeto?--

--¡Cállense, ustedes no conocen nada de mí como para juzgarme!-- Respondió el chico usuario del aliento del trueno mirando con molestia a los demás --Unos imbéciles como ustedes no están a mi nivel--

--No entiendo porque se cree mucho-- Comentó una chica --Si es verdad que sabe usar el estilo del trueno que es unos de los más complicados de usar, pero escuche que no sabe la primera forma--

--Eso es verdad, la primera postura es la base de las demás, que no la sepa usar es patético... Y así se cree mucho--

Las burlas empezaron a llegar para Kaigaku, quien rechino los dientes, tenía ganas de golpearlos pero simplemente no le dieron ganas y optó por alejarse a toda velocidad de la sede, corrió tan rápido como sus piernas le dejaban que cuando menos se dio cuenta se había perdido entre las montañas. Camino por ellas y por los bosques, hasta que llegó a una pequeña aldea, la cual para su sorpresa estaba vacía y eso no era buena señal, en especial porque noto que algunas puertas y ventanas estaban destrozadas

Rasgadas más bien, como si un animal hubiera arrasado ahí...

--¿Qué pasó aquí?-- Con el miedo dominando su cuerpo haciendo que temblara, él todavía se atrevió a desenfundar su espada --T-tal vez un demonio...--

--¿Así que te crees fuerte, humano?-- Una gruesa, seria y siniestra voz habló desde la oscuridad de una de las cabañas

Kaigaku se giró hacia esa residencia y se puso en pose de pelea, esperando a su enemigo, pero más mala suerte no pudo tener al apreciar como era Kokushibou, la primera luna superior quien salió de esa casa mostrando sus colmillos bañados con sangre acompañado de una mirada asesina que lo observaba fijamente... 

Se veía tan imponente que con tan solo su dura mirada, hizo que el chico soltara su espada y no pudiera ni siquiera hablar, pues solo un pilar o en todo caso un suicida se atrevería a atacar a la creciente uno

--Y ahora... ¿Te mato de una?-- Cuestionó el demonio mientras sacaba su katana y le apuntaba al cuello a Kaigaku --Oh te pongo a prueba...--

Kaigaku ni siquiera podía hablar, sentía que con solo responder estaba perdido, ¿Que más podía hacer ante tal enemigo?

--N-no... Por  favor no...-- Se atrevió a decir el pelinegro

El demonio de cabellos rojizos oscuros entrecerró sus ojos, en parte era la cobardía lo que hizo hablar al cazador, pero había algo más que llamó su atención, tal vez si valía la pena ponerlo aprueba

--Puedo darte una ultima oportunidad para vivir... ¿Tú qué opinas, humano?--

"CON BAKUGO Y COMPAÑÍA"

El entrenamiento con Sanemi ya tenía poco más de un día que había empezado y se minimizaba básicamente a una pelea en la que se intercambiaban golpes con las espadas de madera sin parar o prácticamente el pilar del viento los molía a golpes, no había restricciones, Aoi y Kanao también fueron apaleadas sin piedad, y a menos que se desmayaran o vomitaran no podrían descansar, incluso Iguro les daba tiempo para tomar aire, pero Sanemi no, a pesar de que Bakugo o Inosuke lograban golpearlo cada tanto el no paraba