𝐓𝐡𝐞 𝐦𝐚𝐫𝐜𝐡 𝐨𝐟 𝐭𝐡𝐞 𝒃𝒍𝒂𝒄𝒌 𝒒𝒖𝒆𝒆𝒏. (𝑴𝒂𝒚𝒍𝒐𝒓)

Body lenguague.

Era un hermoso sábado por la mañana, Roger le tenía dos sorpresas al rizado.

Tenía los ojos de May vendados, el cual caminaba con los brazos extendidos en el aire, Roger tenía sus manos en los hombros de Brian guiandolo.

Pararon, Roger abrió la puerta de la cabaña que había alquilado para el dia de hoy y mañana, Brian paso, Roger cerró la puerta y quitó la venda que tenía Brian en sus ojos.

Brian miro el lugar, se volteó hacia Roger y hablo.

---¿Me vas a matar?.

---No, tonto. Vamos a quedarnos aquí dos días.

---¿De verdad?.

---Sipi, compre un poco de comida, y como puedes ver, solo hay dos puertas y una sala-cocina, es pequeña y solo para nosotros dos.

---¿Para eso me dijiste que trajera ropa para dos días?.

---Sipi.

---Que tierno.

---¿Vamos a pasear?, Por aquí hay un lago con patitos y traje maíz para ellos.

---Bien, vamos por el maíz y por esos patitos.

...

La noche había llegado, y con ello, el rubio llevaría su plan a cabo.

Brian estaba acostado en la cama, el menor buscaba su pijama en las maletas, al tenerla entre sus manos, miro a Brian, mordió su labio y tiro hacia atrás de el su pijama, confundiendo a May.

Roger se subió en la cama, Brian, quien tenía abiertas sus piernas, vio como el menor gateaba en medio de estás, Roger llegó y acercó su cara a la de Brian, susurró.

---Brimi...

---¿Que pasa, pequeño?.

---Debo decirte algo.

---Soy todo oídos.

Roger sonrió levemente, y susurró.

---Promete una cosa.

---Bien.

---No vas a decirle a nadie y no vas a lastimarme en esto, ¿Bien?.

Brian, confundido, hablo.

---Lo prometo, ¿Que pasa?.

---Es que... Yo... No se como decirlo... ---Roger suspiro para sacar su nerviosismo, miro a Brian y hablo seguro. ---Hazme el amor.

Los oídos de Brian se endulzaron, pero no creyó que el rubio lo dijera en serio.

---¿Estas hablando en serio?.

---Quiero que me hagas el amor, házmelo, quiero gemir tu nombre y estar contigo cuerpo con cuerpo, sin ropa que estorbe, por favor.

Brian sonrió.

---Esta bien, tendré mucho cuidado.

---Gracias...

Se besaron lentamente, Brian le dio la vuelta y lo acostó en la cama, el rubio sonrió levemente mientras Brian bajaba sus besos a su cuello, le quito la camisa al menor y bajo sus besos a su pecho, tocandolo con sus manos, recorriendo con sus labios el torso del menor, el cual gemía alto a zonas inexploradas de su cuerpo.

Brian bajo sus manos al pantalón del rubio, lo quitó y dejó que este cayera al suelo, quitó su ropa interior de carritos, la cual le dió un poco de ternura, tomo el pene de Roger, el cual estaba erecto y miro al menor, el cual hablo.

---Y-yo soy el que hace eso, ss supone que soy el pasivo...~~ ---Se quejó el rubio confundido.

---Mi amor, hoy te haré disfrutar como nunca alguien lo hizo, te haré el amor, y para eso, debo de recorrer cada parte de tu cuerpo y amarla como sé que tú harás con el mío.

Roger no evitó sonreír levemente.

...

Las caricias, los besos lentos y llenos de amor, lo cuidadoso que era Brian, los gemidos ahogados, los susurros, algunos gritos que se escapaban de sus labios hacia la escena perfecta.

Era la primera vez que Roger hacia el amor.

Roger solo se había aferrado en un abrazo a Brian, besándolo todo lo que pudiera, Brian no se vio negado, encantado también lo besaba.

Para Brian, también era la primera vez que hacía el amor.

Roger estaba más que contento como por todo iba yendo, era perfecto.

Brian acarició el cabello del rubio besando las mejillas de este, Roger se dejó caer entre las sábanas, su orgasmo había llegado recientemente al igual que el de Brian.

May salió de el, se acostó a su lado, lo admiro. Admiro como el rubio estaba sonrojado, como trataba de recuperar aire, como su cuerpo temblaba levemente, como sus manos se apretaban entre sí, como sus ojos azules no lo miraban, pues tenía pena de hacerlo.

Brian sonrió ampliamente, ¿Enamorado?... No, no podía estar enamorado... Brian acercó a él rubio a el, lo besó con cariño, al separarse, admiro los ojos de Roger, el cual hizo lo mismo, la mirada de Roger expresaba más que mil... Tal vez dos mil... No, más que un millón de palabras, Roger estaba muy agradecido, estaba muy contento. Estaba enamorado de Brian May.

Amaba a Brian, lo amaba con todo su corazón.

Y por primera vez, después de muchos años. Roger se sintió querido, apreciado, cuidado y sumamente seguro con la persona que tenía a su lado.

Roger sonrió levemente, hablo.

---Gracias... Fue hermoso.

---Gracias a ti, me dejaste hacerte el amor, lo agradezco demasiado. ---Dijo Brian admirando los ojos del rubio.

Roger dejo de sonreír unos segundos, pensó. Pensó en como era Brian, en sus relaciones anteriores, ¿Y si lo iba a utilizar?... ¿Y si después de esto ya no lo veía más?, ¿Y si después Brian le terminaba de romper su corazón y se iba dejándolo echo un mar de lágrimas y simplemente ya no se recuperaba?... Y entonces, además de sentir amor. Sintió miedo. Miedo al abandonó, miedo a perderlo, miedo a perder a el amor de su vida, miedo a perder a Brian May.

---¿Te vas a alejar de mi?. ---Pregunto el rubio en susurró mirando los ojos de Brian, buscando la verdad.

---No, jamás. Tu eres mi bebé, ahora. Mi pequeño Roger. El rubín de mis ojos. ---Dijo Brian viéndolo a los ojos.

Roger vio la sinceridad, un brillo en esos ojos color hazel, vio amor. Sonrió y hablo.

---¿De verdad?.

---Claro, no puedo dejarte solo, mi amor. Eres lo más preciado que tengo ahora. Me mataría antes de dejarte solo en este mundo en donde puedes sufrir aún más. Yo, Brian May, prometo que nunca voy a dejarte solo, nunca jamás.

Roger sonrió, lo beso y abrazo hasta quedarse dormido.