𝐓𝐡𝐞 𝐦𝐚𝐫𝐜𝐡 𝐨𝐟 𝐭𝐡𝐞 𝒃𝒍𝒂𝒄𝒌 𝒒𝒖𝒆𝒆𝒏. (𝑴𝒂𝒚𝒍𝒐𝒓)

Drowse

Brian alzó la voz y hablo.

---Hola, Roger. Lindo, hoy he llegado con otra canción, espero te guste. Se llama Drowse... Especialmente para ti, mi pequeño. Además, me alegra que te gustaran las flores, ¿Comiste los chocolates?. ---Pregunto Brian con la esperanza de el rubio hablara.

Pero en respuesta, vio como un libro se asomaba, junto con la letra de Roger y su manita, leyó.

Los chocolates no los comeré, los guardaré como un tesoro, por que nunca antes alguien se había tomado del tiempo de pensar y buscar un chocolate que me gustará sin saberlo. Gracias.

---Bueno, termina siendo tú regalo, peque. Esta vez, la canción la cantaré yo solo. Freddie está ocupado.

Roger se sentó de manera cómoda, escucho la guitarra, y segundos después, la voz de Brian.

--- It's the sad eyed goodbye
Yesterday's moments I remember
It's the bleak street, week kneed partings I recall
It's the mistier mists the hazier days
The brighter sun and the easier lays
There's all the more reason for laughing and crying
When you're younger and life isn't to hard at all
It's the fantastic drowse
Of the afternoon Sundays
That bored you to rages of tears
The unending pleadings
To waste all your good times
In thoughts of your middle-aged years
It's the vertical hold all the things that you're told
For the everyday hero it all turns to zero
And there's all the more reason
For living or dying when you're young
And your troubles are all very small
Out here on the street we'd gather and meet
And scuff up the sidewalk
With endlessly restless feet
Half on the time we'd broaden our minds
More in the pool hall
Than we did in the school hall
With the down town chewing gum bums
Watching the night life the lights and the fun
Never wanted to be the boy next door
Always thought I'd be something more
But it ain't easy for a small town boy
It ain't easy at all
Thinkin' it right and doin' it wrong
It's easier from an arm chair
Waves of alternatives wash over my sleepiness
Have my eggs poached for breakfast I guess
I think I'll be Clint Eastwood
Jimi Hendrix he was good
Let's try William the Conqueror
Now who else do I like.

Roger río divertido, escribió rápidamente algo y lo puso en la ventana, esta vez, asomándose disimuladamente.

Brian leyó.

¿Te identificas, Brian?.

Brian soltó una risita, Roger soltó una carcajada que el mayor escucho, Roger volvió a escribir.

Es buena... Estoy sorprendido.

---Roger, me encantaría seguir cantandote. Pero tengo que ahorrar canciones mientras creo más. Peque, ¿Mañana podrías decirle a el profesor de biología que no podré asistir?, Es algo importante y nadie más es de allí. Juro que te pagaré con más flores.

Bien... ¿De verdad me amas?.

---Te amo más que a nada en el mundo, Roger. Lo hago con mi vida. Podría dar todo lo que tengo y no me importaría.

¿Ya tienes que irte?.

---Si, lindo. Mañana en la noche volveré con otra canción para ti, bebé.

...

Roger entró a la habitación con una de las flores en su cabello, con una sonrisa amplia y muy feliz.

Vio una cajita de chocolates, un gran ramo de rosas y cartas. Al lado, Paul con una pintura escondida detrás de él.

Roger sonrió, tomo el ramo con cuidado, vio un papelito encima de este, la tomo y leyó.

De: Brian May.
Para: Mi lindo rubín.
Espero disfrutes lo demás.

Roger sonrió torpemente admirando la carta, la doblo con sumo cuidado y olió las rosas.

Suspiró y dejó las rosas con cuidado en la cama de nuevo, tomo las cartas, las cuales decían por encima que el debía de leerlas cuando estuviera solo.

Paul hablo.

---Dice Brian que desde lo que pasó, el tardo tres meses en crearte algo totalmente para ti. Tuvo ayuda de Freddie y Jimmy.

---¿Jimmy?... ¿Que es?.

Paul sacó detrás de él un cuadro una pintura de ambos, tomados de las manos viéndose con cariño, apunto de besarse.

Roger sonrió levemente enternecido, la tomo con cuidado entre sus manos con una sonrisa ahora amplia y un par de lágrimas en sus ojos, susurró.

---Es hermosa... Es tan hermosa.

Roger soltó una pequeña risita, con una mano limpio una lágrima que había salido, sin evitarlo, sollozo de alegría.

Era hermoso.

Lo colgó al lado de su cama, para verla antes de irse a dormir todos los días.

Roger la admiro.

Paul se fue en silencio.

Dejando a un Roger encantado de la pintura.

Roger tomo las cartas, las cuales eran tres.

Las leyó.

Roger, nunca nadie va a poder superar la belleza que tú tienes. Es tan inmensa, que cada vez que te veo, me sorprendo. Nunca había visto a una persona tan hermosa como tú. Eres tan lindo, que deberías de ser admirados por todos en este mundo. Todo el mundo debería de admirar a Roger Taylor.

La carta número uno hizo sonreír a Roger, leyó la dos.

Esos ojitos azules son hermosos, los amo con toda mi alma. Son tan hermosos, tan perfectos. Y cada vez que esos ojos me miran, me hacen sentir en el paraíso. Verte me hace sentir bien. Me anima a ser mejor cada día.

Roger sonrió aún más, leyó la última carta.

Ni recuerdos ni presagios:
sólo presente, cantando.

Ni silencio, ni palabras:
tu voz, sólo, sólo, hablándome.

Ni manos ni labios:
tan solo dos cuerpos,
a lo lejos, separados.

Ni luz ni tiniebla,
ni ojos ni mirada:
visión, la visión del alma.

Y por fin, por fin,
ni goce ni pena,
ni cielo ni tierra,
ni arriba ni abajo,
ni vida ni muerte, nada
sólo el amor, sólo amando.

Roger sonrió ampliamente, abrazo la carta y dio un salto completamente emocionado.