2.- Mentiras para todos

2.3K 276 106
                                    

—¡Soy la sirvienta personal de un poderoso hunter de listas negras! Mañana será mi primer día, estoy muy nerviosa. —apenas saliste de la entrevista, llamaste a Jade para contarle las buenas noticias.

—¡¡No puedo creer que hayas conseguido el trabajo!! ¡felicidades! oye, ¿y cómo es?

—Eh, ¿quién?

—¡Ese hombre! ¿es cierto que da miedo? ¿cómo es su voz? ¿no te asustaste?

—La verdad es que... —Recordaste su voz, que no era ni de lejos temible y su apariencia era más la de un ángel vestido de gala. Sus palabras resonaron en tu cabeza impidiéndote responder a la pregunta. —Jade, lo siento, pero no puedo decirte, firme un acuerdo de confidencialidad.

—Me lo imaginé. —dijo decepcionada— Las otras entrevistadas decían lo mismo. Al menos dime si te sentiste cómoda.

—Síp, estoy contenta por haber sido contratada, pero ahora no sé cómo les voy a explicar a mis padres que llegaré más tarde entre semana.

—Diles que entraste a un club extraescolar o algo así.

—Tienes razón, ¿puedo decirles que también estás ahí? así puedo contar contigo si llegan a pedirme pruebas o me molestan en el trabajo.

—No sé porqué siento que en algún momento se darán cuenta, espero que no tengas que trabajar más tiempo del que te dijo, porque tus padres ya me tienen en la mira como mala influencia, para colmo yo te sugerí el trabajo.

—Pero yo acepté, es mi responsabilidad, me haré cargo de decir la verdad en su debido momento, por ahora no los quiero preocupar.

—¿Y el dinero?

—¿Qué tiene?

—Vas a ganar 10 mil dólares al día por un año, ¿sabes cuánto es eso?

—Mucho... pero no pienso gastarlo a lo tonto, es para mis estudios.

—Más te vale, no dejes que pase mucho tiempo para que se lo digas a tus papás.

—Me cuidas más que mi mamá. —renegaste con el sermoneo de Jade.

—Es que es tu primer trabajo y no quiero que tengas malas experiencias, sobre todo con un hunter, cuídate, ¿sí?

Llegaste a casa en el horario de siempre gracias a que saliste temprano. Tus padres no se dieron cuenta, pero aún así estabas nerviosa, ellos solían hacer preguntas muy específicas y sospechaban de todo, ya que eran extremadamente cautelosos cuando se trataba de su inocente niña.

—¡Cariño! ¿cómo te fué en la universidad? —saludó tu madre dándote un abrazo que correspondiste de inmediato.

—Me fué bien, mami, hoy me inscribí a un club en la escuela. —dijiste entrando en tu papel de pinocho.

—¿Un club de qué? —se metió tu padre desde el sofá donde veía la televisión.

—Emm... de... —No lo habías pensado, así que debías improvisar antes de que notaran tus nervios. —Fotografía.

—¡Qué bonito! ¡me da gusto, hija! por fin podremos tomarnos una foto familiar decente. —se alegró tu mamá.

—Le llamaré a tus tíos para que sepan que ya tenemos fotógrafa para el bautizo de tu primito.

—No, papá, eso lleva tiempo... —excusaste sabiendo que eso pasaría, tus padres siempre estaban un paso adelante de ti. —Bueno, pues nada más era eso, llegaré un poco más tarde entre semana por el club.

—¿Quieres que vaya por ti a la universidad? —preguntó tu padre.

—¡No! —respondiste un poco alterada, lo cuál casi logra exponer tu mentira. —Es que... sólo es una hora extra, puedo tomar el autobús, seguirá siendo de día.

—Muy bien, pero llama si necesitas que vaya a recogerte.

—Sí, papá. —asentiste para luego cambiar el tema antes de que preguntarán más detalles. —¿Y qué vamos a cenar?

Al anochecer, subiste a tu habitación y dejaste caer la mochila sobre la cama, cerraste la puerta con llave y sacaste una carpeta con una copia del contrato que habías firmado, el cuál te pidieron leer cuidadosamente antes de tu primer día.

Estabas tan cansada que apenas leíste la primera página donde se hablaba de horarios y vestimenta, te quedaste dormida sobre las hojas y soñaste con él.

—Le mentí a mis padres, no iré a un club de fotografía... —murmuraste entre sueños —y le mentí a Jade... creo que no voy a ser una sirvienta.

Entonces, ¿de qué se trataba ese trabajo?

Tentación pagada [+18] [Completa]Where stories live. Discover now