Placeres Del Infierno (Spin Off)

16° Carcelero

Rita.
Hace tres años...
Washington D.C.

Las mañanas en casa son gratificantes para mi, tengo la vida perfecta que siempre quise, un esposo, una casa, un trabajo que amo y posiblemente en un futuro una familia.Ser agente condecorada de la DEA tiene sus beneficios, gano bien y disfruto de algo que me hace feliz.

- Amor, es tarde -  Me avisa mi esposo obligándome a salir de la cama, lo único que odio de mi trabajo es levantarme temprano. - El jefe nos espera - abre la puerta y le dedico una sonrisa

- Me ducho rápido y estoy lista - le aseguro y me apresuro a entrar al baño. No tardo mas de diez minutos y salgo envuelta en una toalla blanca directamente hacia mi closet... mas bien, nuestro closet.

- Rita, date prisa - presiona 

- Adelantate - le digo - iré en la Harley - le aviso 

- Vale amor, te amo - me grita y segundos después escucho la puerta abrirse y cerrarse

- Yo también - murmuro para mi misma. Resoplo y me mongo la ropa interior, mi pantalón de mezclilla y una blusa de tirantes blanca, me pongo mis botas negras y tomo mi chaqueta verde militar del perchero. - Lista - me digo y tomo mi mochila café de piel con mis cosas. Salgo de la casa y me voy directo a la cochera en donde tengo mi motocicleta, Tomo las llaves y me monto. Llego tarde así que debo darme prisa. Enciendo la motocicleta y salgo disparada de la casa hacia la autopista, lo bueno de ir en moto es que si hay trafico puedo pasarme sin problema entre ellos, ademas si me multan solo digo que soy agente de la DEA y ya esta. 

Veinte minutos después al fin estaciono la motocicleta en el estacionamiento de las instalaciones de la DEA.

- Hola Carl - saludo al de seguridad 

- Buenos días Rita - me devuelve el saludo y entro a las instalaciones. Jamas me voy a cansar de decir que amo mi trabajo, siempre que llego aquí me siento que estoy dentro de las series de policías o algo así.

- Llegas tarde - me reprende el hombre de mis ojos. Su cabello castaños y ojos grises me enamoraron desde el primer momento en que lo vi. 

- Tranquilo amor - me acerco para darle un beso pero se aleja

- Estamos en el trabajo - me regaña

- ¿Eso que? - arrugo las cejas - para nadie es un secreto que estamos casados - ruedo los ojos

- El jefe nos espera - insiste y suspiro. Trabajo, trabajo, trabajo. Amo mi trabajo pero a veces me molesta que Nick lo ponga como prioridad entes que a mi. 

Camino a su lado como cualquier compañero y nos detenemos en la puerta de la sala de juntas, toca la puerta y espera a que el jefe nos de la luz verde para que podamos entrar.

- Pasen - ns dice y abre la puerta para entrar

- Hola jefe - lo saludo 

- Buenos días Cortes - me dice y tomo asiento en una de las sillas que rodean la mesa ovalada 

- ¿Que tenemos? - pregunta mi esposo

- La mafia roja se ha posicionado con el lugar numero uno en trata de blancas - informa y pone una carpeta frente a cada uno - Los casos de mujeres desaparecidas para ser prostituidas están incrementando cada vez mas, venta de órganos, los Volkov están creciendo día tras día - habla mientras reviso las hojas y fotografías de la mafia roja, Alexei Volkov, el es el Boss, el cargo quedo en sus hombros cuando Vladimir Volkov fue asesinado por la legión... Otros malditos que aun no hemos podido encontrar, pero que tarde o temprano van a caer. Nikolai Volkov es el menor de ellos, y el de en medio es Dimitri Volkov o como todos lo conocen; El destripador de Rusia.. Los tres son muy guapos, eso no lo voy a negar,  pero no son mas que demonios disfrazados de dioses. - Tenemos un contacto que nos dijo que habrá una carga de mujeres esta misma noche - informa - Llegaran a la fortaleza de los Volkov.