¡hey, gigante! › jikook.

Capítulo O2

─Mi pollito, ¿tú qué opinas de las películas románticas?

─Pérdida de tiempo.

Allí estábamos los dos en un local de licuados. Después de tantas insistencias (quitarle la mochila a JiMin para correr a una tienda de licuados) él no obtuvo más remedio de hacerme compañía. Ahora, mientras JiMinie me seguía fulminando con esos lindos ojos, aproveché para lanzarle un besito de mi parte.

JiMin bufo.

─¿Las películas de ficción?

─Exagerado e innecesario.

─Uh, ¿crees en el amor a primera vista?

─No.

Ouch. Haré como que mi corazón no escucho esa palabra de sus labios.

Al segundo después, miró sobre el ventanal y siguió tomando de su licuado. Pero wow, su perfil es muy atractivo. Cualquier cosa que hiciera JiMin, yo caería aún más enamorado, no tenía dudas.

Su rostro sereno, sus hermosos cabellos oscuros le daba un toque más guapo, e increíblemente mi Omega deseo estar acurrucado en el pecho de JiMin. Con esa hermosa imagen, un suspiro desbordo de mí.

Él me miró. Oh, joder... seguramente estoy más rojo que nunca.

─¿Me darás mi mochila?―. Se puso de pie, estirando su brazo a mi dirección listo para que le diera sus útiles─. Necesito cosas que hacer.

─Pero hoy es viernes...

─JungKook.

¡Sabe mi nombre!

JiMin, ¿sabes qué eres el imposible e inalcanzable amor de mi vida?

─Quiero que pases tiempo conmigo. Juntitos y darnos muchos besitos, ¿no quieres?

─Mi mochila. Ahora─. Él parecía no caer a mis tiernos encantos. Bien. Lo pones muy difícil, Park JiMin. Tendré que usar uno de mis dones. Forme la carita más triste y regañada, y sin mirarlo le di su mochila. Él pareció algo disconforme a mi repentina actitud─. Sea lo que estés haciendo, sabes que-

─Hasta luego, JiMin-ssi─. Fingí limpiar algo en mis ojos. Seguramente JiMin pensaría que estoy llorando o a punto de hacerlo. Borre mi sonrisa a un puchero y pasar de largo─. Adiós...

Él entreabrió sus labios, seguro estaba procesando lo ocurrido. No sospecho de mi actuación, estoy considerando en que debería pensar en ser actor. Sería el Omega más atractivo de todas las novelas, ¡Jeon JungKook merecía un Oscar!

Al salir de aquel local, suspire sólo debía esperar alguna reacción de JiMin, ¿él vendría por mí, como aquellas románticas historias de amor que ruegan por el perdón del amor de su vida? Rogaba que sí lo hiciera, para que él rogara por el perdón de su bebé, soy su bebé.

─... me complico mucho─. A veces yo mismo podría confundir mi cerebro, genial. Seguí mi camino, paso por paso y mirando de soslayo atrás mío cuando me alejaba cada vez más.

Empecé a sentir un dolor raro en mi pecho, misma donde guíe mi mano. No recuerdo haberme lastimado, menos haberme golpeado. ¿Por qué dolía? ¿Por qué me duele justamente el corazón...? ¿Estaré enfermo?

Ignorando aquello. Mire por última vez el lugar, JiMin había salido pero no miró a su alrededor, nada. Siendo tonto y bobo me ilusione, pero él siguió su camino al contrario.

Sin girar a verme.

El dolor en mi pecho se intensifico... tengo que ir al doctor.