◖17◗  

394 47 11
                                    

Estaba nervioso, otra vez, poco a poco se iba acostumbrando a estos sentimientos los cuales no podía refutar

Practicaba internamente esa pregunta que le abrirá paso a un mundo de fantasías que nunca pensó entrar.

Y su corazón latía cálido como una tasa de café en invierno y tan rápido que incluso podría superar al de un ratón

Al momento de llegar, paro curioso para inclinar su cabeza a un costado como si se tratase de un niño, mirándolo

Estaba parado, observando el pasto frente suyo. Completamente inmóvil, como un muñeco. Sin vida

- ¿Estas bien ______? -preguntó mientras se acercaba a él, con el nerviosismo y vergüenza fuera de él al verlo tan irreal-

En sus ojos se notaba su exaltación, su sorpresa. Volteo y lo miro para dar una pequeña y rápida sonrisa, volviendo a su postura inicial. Pero esta vez, con algo más de vida

- Hace un rato, se escucho algo. Pero era tan inaudible -paro para ahora marcar un camino con sus dedos. Abriendo sus ojos una vez más con sorpresa- Aún así también era familiar, antes oía frecuentemente un ruido que aunque no hacia suficiente eco sentía sus movimientos en el aire. De forma tan curiosa pero muy difícil de reconocer una segunda vez, o tercera, o cuarta...o - y así continuó en un susurro mientras jalaba a Camilo en silencio por el pasto sin apartar la vista de este-

Para frente a la casa de inquilinos, La casa Rosa, haciendo que Camilo aunque de forma lenta, comience a unir todo. Ahí estaba el ladrón. Y ese camino demostraba no solo su paradero, si no que había vuelto

- Pero...no, no puede ser. Ellos juraron respetar el pueblo, sus costumbres, creencias, su gente. Todo

¿Por que seguían parados ahí sin hacer nada? ¿Por qué él seguía parado sin hacer nada? Tal vez sea el miedo de llegar al final, de que se tenga que ir una vez encuentre al culpable de todo e irse, el objeto ya habría cumplido su valor después de todo

Pero para Camilo estas ideas no estaban en él, así que poco le importó lo demás y corrió, a punto de abrir esa puerta de vidrio

- ¿Que tipo de gente viene aquí? -volteo a verlo y tomó su mano antes de que esta tocase la manija. Haciendo que se miren, pero esto no era ese tipo momento ni intensión-

Lo miro esperando una respuesta, alargando todo de forma irresponsable

-se incorporó dando un pequeño suspiro- Mayormente personas con fines laborales; doctores, meteorólogos, botánicos. Y así, a veces personas que solo vienen a pasar el rato. No dicen que tipo de personas son, pero... Con Luisa todo queda sellado, si entiendes a lo que refiero

Volvió a mirar la puerta con ganas de abrirla, con impaciencia. Pero su mano era detenida por una más delgada y fuerte

______ se sento en el mismo pasto jalandolo a él a su lado, viendo todas las posibilidades. Lo robado solo es joyería barata y telas buenas, pero no lo suficientemente cara como para robarla constantemente. No tenía sentido, o son muy idiotas... O trabajan para alguien más

Así solo harían su trabajo sin ir más haya que simplemente tiendas

Las palabras iban a salir de su boca de no ser por un nuevo ruido, este sin ser discreto. Una caída que cualquiera con buen oído escucharía

Corrían ambos, unidos por sus manos en los tejados, saltando y exalando aire por la boca ignorando las consecuencias que traería esto

La tienda de los gemelos iba a ser nuevamente robada, los platos y vasos de cerámica cuidadosamente pintados que eran presumidos con orgullo, desaparecerían

Secreto (Camilo Madrigal x Lector) Where stories live. Discover now