future husband ︎ʚɞ taekook

03

—No lo sé, digo, sí, es lindo y ajá, pero Jungkook, tienes a montones de chicos y chicas atrás de ti como lunáticos, y cualquiera de ellos es mejor partido que el estúpido de Kim.

Como respuesta, recibió un fuerte chillido ante la ofensa a su gran amor, a su algodoncito y amorcito Taehyung.

—¡Yoonie-ah! no digas eso sobre él, él me ama enormemente, solo... no está listo para decírmelo, piensa que soy demasiado inalcanzable, pobrecito. —Jeon puchereó triste ante su suposición.

Jamás, jamás en sano juicio diría que no a su bonito gran amor.

—Yo solo decía. —bufó Yoongi, dando un pequeño golpe con su pie a la puerta, puerta del cubículo del baño donde Koo permanecía, cambiándose las anteriores prendas por unas más cómodas y bonitas, luego de que sus intenciones con Kim fueran rechazadas.

Otra vez.

—Acabé, ¿qué tal me veo? ¿crees que me guste, aunque sea poquito? —preguntó el de cabellos azabaches, dando vuelta sobre su eje, mostrando el nuevo atuendo al pálido.

Min vagó su mirada sobre el cuerpo ajeno, encogiéndose de hombros, murmurando un bajo "luce bien".

Koo sonrió, mirándose en el espejo del lavamanos, que dejaba ver hasta la altura de su cadera.

Su atuendo ahora consistía de unos pantalones flojos rasgados, unas converse blancas y una camiseta holgada de un suave azul pastel.

Yoongi lo pensó, y probablemente en otra persona, dicha vestimenta luciría desalineada y parecería algún tipo de vago, pero en Jungkook, oh dios, se veían jodidamente bien.

La parte superior del pantalón parecía adherirse a la estrechez de la cintura de Jungkook, misma que poseía a penas unos visibles abdominales, pero se veía muy bonito.

Jeon modeló un poco para sí mismo. Le gustaba estar de moda, vestir revelador y llamar a costa de todo la atención; pero en días como esos, donde su corazoncito se sentía frágil, le gustaba ser él.

Pero no tanto. Antes muerto que sencillo.

—¿Te puedes apurar? La próxima clase empieza en dos minutos y estamos demasiado lejos del aula. —habló Yoon, saliendo de los baños, escuchando el chillido de Jungkook, seguido de sus pasito siguiéndole.

Jeon intentó tomarle del brazo, cosa que no pudo, sintiendo al pálido removerse y safarse, alejándose considerablemente de él.

Carraspeó, fingiendo que aquello no le dolió.

Sí, podía ser un jodido orgulloso, vanidoso y ególatra, pero tenía, muy en su interior, sentimientos y ganas de tener amigos que no se avergonzaran de él, y un bonito novio de nombre Taehyung que lo mirara con amor, tal como él hacía con él.

Pronto sus pensamientos se esfumaron, sintiendo un leve choque en su hombro, y luego una pesada mirada sobre él.

Se estremeció en su lugar, con su espalda doliendo, y un jadeo escapando de sus labios, cuando el alto cuerpo de Taehyung lo empujó contra los casilleros de metal, sujetando fuertemente de sus caderas.

Aquello parecía ser uno de sus muchos sueños, incluso se pellizcó un brazo para confirmar que era verdad, que Taehyung lo tenía acorralado, con su aliento chocando suavemente contra el suyo.

No iba a desaprovechar, posando sus blancas manos en el pecho ajeno, con su mirada ensoñada perdida en las orbes miel oscurecidas de Taehyung.

—Amorcito... ¿Estás bien? —murmuró a penas, acariciando la mejilla canela de Kim, quien gruñó ante el tacto.

Y allí no entendió absolutamente de lo que pasaba, hasta que vio la mirada de Taehyung viajar al final del pasillo.

Entonces los ojos de Koo divisaron a una chica pelirroja, demasiado, demasiado bella.

Volvió su vista a Kim, entendiendo todo.

Aquella muchacha debía ser Joy, la chica de la que Taehyung hablaba tanto, con sus ojos brillando y una sonrisa desbordando de sus labios.

Hasta donde sabía, Kim parecía estar realmente flechado, pero intentaba ignorar aquel hecho.

Taehyung debía amarlo a él, solamente a él.

—¿Ella te hizo algo? —preguntó el azabache, alejándose del tacto, por mucho que su corazón reclamó ante su acción.

Entonces las orbes claras del mayor volvieron a él, notándose su molestia.

—Nada que te importe. —escupió, respirando agitado por el enojo.

—Prácticamente estás usándome para descargar tus celos o tu ira por ella, así que, sí, me importa. —retó, estando lo suficientemente herido como para medir su sumisión a Kim.

Taehyung sólo negó entre una sarcástica risa, alejándose, dejando a algunos mirando el pequeño espectáculo.

Jungkook respiró profundo, no queriendo llorar, ni tampoco ser orgulloso, solamente neutral.

—Joy está saliendo con Seung. —dijo Yoongi, asustando al azabache por su presencia, que aún seguía allí.

Entonces entendió. Taehyung odiaba a Seung a montones, y a parte salía con la chica que le gusta. Esa era la razón.

Su boquita se amoldó a una pequeña "O", pensado unos segundos.

—Tal vez se siente mal y necesita compañía, nos vemos después, Yoonie. —habló en voz alta, corriendo y despidiéndose con la mano del pálido, que sencillamente rodó los ojos.

"Dios, Jungkook, ¿acaso no ves que Taehyung a veces parece dudar de tu existencia? ."