A través de las estrellas

Destrucción en el horizonte

Ten un vaso de agua, ignoro si sabe diferente a la que tomas de donde sea que vengas, pero es lo único que tengo para ofrecerte en este momento, al menos hasta que se termine de cocer la comida que puse al fuego. ¿En qué me quede...? Ah sí, ya recordé... vamos a continuar con la historia:

Hay una frase que describe bien ese momento... "La paz antes de la tormenta", nadie sabía la oscura trama que se estaba tejiendo en la galaxia durante esa época, aunque en retrospectiva, culpo a los caballeros Jedi, ellos eran los autonombrados "guardianes del orden" y solo se quedaron en su zona de confort, ciegos ante los planes de sus oponentes El misterioso enemigo que estaba detrás del asedio a Naboo estaba formando el ejército más poderoso que esta galaxia haya visto jamás, una armada que tardó cerca de 10 años en entrar en acción, pero este oculto personaje no estaba solo, lo ayudaban en sus planes un antiguo Jedi conocido como Dooku el Conde de Serenno y un mortal cazarrecompensas llamado Jango Fett, algunos decían que no era en realidad un mandaloriano, que su armadura era robada; no obstante nadie podía negar su eficacia en combate, fue uno de los pocos sobrevivientes de la guerra civil mandaloriana...

Estoy desviándome.

Anakin se inició en esta antigua orden y el mandato de Amidala como reina en su mundo estaba por concluir. Una época feliz para ambos... bueno, al menos lo poco que podían obtener, pero cuando hay sentimientos involucrados, hasta las migajas sabían a gloria.

Hubo un tiempo en que podían comunicarse en secreto a través de hologramas, no fueron más que unos meses y Amidala dejó de responderle al joven de Tatooine; para ambos sus responsabilidades los habían alcanzado, para Anakin convertirse en el Padawan del Caballero Obi Wan Kenobi y para Padme empezar su carrera como Senadora para representar a Naboo en el senado Galáctico y prevenir que el asedio que sufrió su pueblo no se repitiera jamás.

Fue años después cuando se volvieron a encontrar, un reencuentro doloroso en muchos sentidos, mientras que Anakin Skywalker parecía estancado y constantemente restringido como aprendiz de Kenobi, Padme siguió hacia adelante, convirtiéndose en una importante senadora, pero justo por eso corría un grave peligro.

El joven Skywalker de pronto estaba ahogándose en un mar de emociones, emociones que no sabía controlar, emociones que los Jedi le habían dicho eran malignas y debía enterrarlas, emociones que lo confundían al ver a la persona que amaba en peligro mortal.

Kenobi investigó el rastro del cazarrecompensas que estaba tras Amidala: Fett, que lo llevó directo al ejército secreto de clones que se encontraba en el planeta Kamino, mientras Anakin servía como guardaespaldas privado de Padme. Ambos sabían que sus sentimientos no tenían cabida en el drama que estaba en desarrollo, les destrozaría la vida si algo así ocurría, ella perdería su credibilidad y él sería expulsado de la orden. Todo por lo que lucharon y se habían esforzado hubiera sido en vano. Así fue como ambos se resignaron y abandonaron sus sentimientos.

Sin embargo, todo empeoró cuando Skywalker, acompañado de Padme, viajó hacia su natal Tatooine para rescatar a su madre de la esclavitud, ahora tenía la autoridad, el poder para llevársela y darle una vida digna y libre, pero lo que vio lo cambio para siempre, su madre fue secuestrada y posteriormente asesinada por los nativos salvajes del planeta, los moradores de las arenas: los Tuskens.

Quizá fue ese momento de vulnerabilidad que selló el destino de los jóvenes. Seguro te preguntarás: si la orden Jedi era tan buena, ¿Por qué nunca ayudó a la madre de Skywalker? Quizá la orden nunca tuvo ni el poder ni la autoridad para traer verdadera paz y justicia a la galaxia. Si nosotros que somos ajenos tenemos estos cuestionamientos, imagina como se debió sentir Anakin, por desgracia no hubo tiempo de guardar luto, un escenario mucho más oscuro se forjaba en el horizonte y la "guerra de los clones" estaba comenzando en las fábricas de droides en el planeta de Geonosis.

Todos los caballeros Jedi y sus respectivos aprendices fueron llamados a combatir en aquel planeta, y de los 200 que lucharon solo sobrevivieron menos de cincuenta.

Habían perdido la guerra mucho antes de comenzarla, y todos hubieran muerto de no ser por la repentina aparición del más grande ejército que jamás se haya visto en la galaxia, una armada formada a partir de clones de Jango Fett entrenados por mercenarios mandalorianos y totalmente leales a la República galáctica. Ellos fueron los que salvaron a los Jedi sobrevivientes, incluidos Padme, Anakin y su maestro Obi Wan Kenobi.

La batalla de Geonosis fue de las más sangrientas, fue un duro golpe para ambos bandos, varias unidades especiales de comandos clon fueron aniquiladas debido a la inexperiencia de los Jedi, los geonosianos perdieron incontables vidas, fábricas y fue en esta batalla donde Jango Fett perdió la vida, dejando solo a su único hijo: Boba Fett. Todos los planetas vieron los horrores de la batalla por medio de las holonoticias y muchos que dudaban dieron por fin el paso para apoyar a los separatistas en una guerra que duraría varios años.