cinco

569 99 57
                                    

capítulo 5.
nop, no fue divertido


En primer lugar, salir de la fábrica nos costó lo suyo. Cuidaban el portón desde afuera, y tenían un sistema de vigilancia que mandaba cada tanto un pequeño grupo de hadas a explorar calle arriba para evitar ataques sorpresa. Cualquier paso en falso haría a los vigilantes alertar al Mayor y cancelar nuestra excursión improvisada. Nos quedaríamos en la Fábrica, bajo supervisión de alguien, y Beomgyu se las tendría que arreglar solo. Jisung no estaba conforme con ese escenario. Yo sí.

— Desearía que fuera el turno de Soobin en los portones— se lamentó él—. Es muy fácil de despistar.

— ¿Cómo hacías para salir cuando espiabas a Minho?— preguntó Hyewon. Jisung se encogió de hombros.

— Me las arreglaba. Puedo escabullirme si voy solo, pero no funcionará con nosotros cuatro.

Le di una mirada superficial y concordé con él. Jisung era pequeño y ágil, de pies ligeros. En la escuela siempre era el último al que agarraban en las atrapadas.

— ¿Por qué me espiabas?— pregunté, y Jisung dio un brinco en su lugar. Fue divertido,  pero me forcé a no sonreír.

— ¿Eh?

— El Mayor y Seungmin dijeron que llevabas días siguiéndome— expliqué—, y acabas de confirmar que te escapabas cuando podías. No fue sólo hoy, en el supermercado, y definitivamente no fue porque creíste que yo corría peligro.

Jisung intentó sonreír con calma, como hacía cuando la maestra estaba por castigarlo después de alguna broma tonta. Solía salvarlo de las reprimendas, pero no podía funcionar ahora. Me asustaba lo mucho que recordaba de él, después de 10 años sin verlo ni pensarlo, sólo porque ahora tenía su sonrisa enfrente.

— Mira, Minho...

— No soy idiota— dije, sonando mucho menos exasperado de lo que me sentía. Su sonrisa sí funcionaba, después de todo—. Nadie me ha dicho nada certero, pero sé sacar conclusiones por mi cuenta. Están buscando a alguien importante, ¿no? Y creíste que era yo. Así que me perseguiste por días y me salvaste y me trajiste aquí. Ahora, confirmaron que sí lo soy. Y sé que no vas a decirme exactamente qué es lo que se supone que soy, pero espero que lo hagas cuanto antes. Tengo una vida, Jisung. Necesito respuestas.

— ¡Lo sé!— exclamó. Se pasó una mano por el cabello, y resistí el impulso de acomodar los mechones revueltos sobre su frente. Eso sería raro—. Te mereces explicaciones, pero es algo largo de contar. Necesito un mejor momento. No puede ser ahora, tenemos que rescatar a Beomgyu.

— ¿Y por qué tengo que ir yo? No sé pelear, no tengo poderes, ¡soy un humano!

— ¡Porque te necesito!

Me tambaleé hacia atrás, deseando no sentirme tan golpeado por su respuesta. Algo dentro mío se sacudió, y ni siquiera me pareció raro porque yo absolutamente le creía. Él me necesitaba. Y no en una forma metafórica, sencilla o hasta romántica, sino en el sentido más crudo de la palabra. Yo era importante, era vital. La fiereza de sus ojos me lo decía.

No supe qué hacer con esa información.

— Está bien— dije. La expresión de Jisung se inundó con un alivio inmediato que me hizo sentir culpable—. Iré contigo, pero sólo si prometes responder todas mis preguntas cuando regresemos.

DDD FACTORY ❍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora