Triangulo Erótico

1.4K 6 0
                                    

Es la celebración del cumpleaños de un amigo, hay muchas chicas sensuales dispuestas a todo ésta noche, había de dónde escoger sin duda, la noche pintaba a derroche sexual al mejor estilo.

Todos estábamos bailando, bebiendo, pasándola bien a ver hasta donde aguantaba el cuerpo, las parejas empezaron a formarse pero algo resaltaba, había una chica sola, muy sensual, con un vestido ceñido al cuerpo, color negro con encajes, cabello lazio, con un cuerpo muy sensual que se resaltaba más con aquel hermoso vestido, tacones altos y mirada pecaminosa, en sus senos dejaba ver un hermoso tatuaje de flores, el cual me causaba mucha intriga saber el tamaño y el final, ya que solo se notaba el inicio, me acerqué a ella y hablamos plácidamente durante un largo tiempo, mientras bebíamos y bailabamos las canciones que el dj reproducía para alegrar el ambiente, ya un poco mareada ella me manifiesta que quiere sentarse, accedo sin objeción, quiero seguir la noche con ella bajo sus condiciones.

- Estoy algo entonada, dice aquella sensual dama antes de soltar una carcajada como fuera de lugar.

* Pues anímate, la noche es joven, y podríamos llevar la fiesta a otra parte si gustas, le sugerí.

- Eso me encantaría, podrías invitar a una de tus amigas y terminaríamos la fiesta de manera épica, me dijo mientras mordía sus labios de manera sugerente.

Los tragos habían hecho lo suyo amigos, estaba tan excitada que me daba besos apasionados mientras tomaba mi mano derecha y la metía entre sus piernas, corriendo un poco su panty para que sintiera lo húmeda que estaba, y si que estaba húmeda, muy tibia, provocaba sacarla de ahí para darle todo el placer y el goce que su cuerpo estaba pidiendo, quería complacerla así que invite a una amiga con la que solía salir meses antes de la fiesta, con la cual gozamos mucho de noches de efervescencia y calor, tragos, marihuana y sexo desenfrenado. Ella está aún más emocionada y excitada por la idea que la chica y sin dudar se pone en marcha conmigo, las subo a ambas en mi motocicleta y las llevo a mi apartamento.

Seguimos bebiendo de manera alocada jugando a quitarnos prendas y a tomar tragos llenos, a ver quién aguantaba mas, todos ya en ropa interior, nos veíamos de arriba a abajo con ganas de comernos, de manosearnos y probar de todo lo tres, la chica del vestido tenía una ropa interior de encajes exquisita excelsa, color negro, acorde con la faena que de avecinaba en instantes, mi amiga traía un hilo rojo que dejaba ver sus nalgas duras y morenas, era muy excelso de ver, no pude disimular mi erección en los boxer, ambas lo notaron al instante.

- Se ve que tienes una buena verga, ¿Porque no la dejas salir? Dijo la chica de vestido negro

+ Creeme, es enorme su verga, llena de venas y si que sabe dar placer con ella, sácala, quiero saludarla con mi lengua, replicó mi amiga con quién ya había saboreado clítoris con anterioridad

- Es inútil disimular lo ricas que están, yo la tengo dura desde antes de salir de la fiesta, respondí manoseando sus nalgas mientras paraba para bajar mi boxer y deja salir mi pene.

Salió como a presión, siempre que estoy excitado se hace notar claramente, muerden sus labios al verla, y ambas bajan su cabeza para lamerlo al unizono, siento un cosquilleo que me recorre todo el cuerpo, si que saben con dar placer con su boca, ambas me masturban con sus labios moviendo sus bocas de arriba a abajo suave y lento a la vez, babean mi pene completamente hasta humedecerlo por completo, fue exquisito sentir el jugueteo de sus lenguas en mi glande, me sentía tan relajado y excitado a la vez, el humo de la marihuana en la habitación hacia que todos estuviéramos como dopados y con ganas insaciables de buen sexo la noche completa.

Las siento a ambas el sillón de la sala, abro sus piernas mientras me siento en el piso de rodillas, meto ambas manos en sus entrepiernas y tanteo lo humedad que están, es delicioso sentir lo caliente que están ambas, tiemblan del placer al sentir que mis dedos entran en sus vaginas, manoseo sus clítoris con suavidad para despertar esa infinidad de pulsaciones y hacer que se hichen de placer, con mi lengua lamo sutilmente el clítoris de la chica de vestido negro, mientras penetro con mi dedo índice y corazón a mi amiga, ambas sollozan y gimen de placer mientras yo siento como mi pene se endurece al escucharlas, al sentirlas, era perfecta la noche, muy húmeda y calurosa para coger bien duro.

Aprovecho su humedad y siento a una de ellas en la cabecera del mueble, mientras pongo en cuatro a la otra encima del sillón, me pongo en pie y penetro a la chica del vestido negro, meto solo mi glande llegando hasta la mitad de mi pene, la chica enloquece de placer al sentirme dentro, siento como lubrica aún más al sentirme dentro, gime de placer y manifiesta lo rico que siente mi pene en su vagina, mientras masturba a mi amiga con sus suaves y pequeñas manos, también mete su lengua en la cavidad vaginal para darle doble placer, nalgueo a la chica de vestido negro mientras apreto los senos y pezones mi amiga, sus caras de placer eran indescriptibles, sin duda querían que su noche llegara a este nivel, estaban predispuestas para compartir placer, era como si lo hubiéramos hecho de siempre, sabían dónde tocarse y tocarme, era algo mágico, erótico hasta los dientes, gemían al sentir mi fuerza y al entrar y salir de la chica del vestido se notaba como aumentaba la potencia al masturbar y chupar la vagina de mi amiga.

Me acuesto en el sillón y subo a mi amiga en en mi pelvis, toma mi pene, lo lubrica un poco con saliva antes de entrar y acto seguido, blanquea los ojos al sentir de nuevo esos 23cm de puro goce que ya había probado en la playa antes, se siente caliente su interior, me encanta lo húmeda que está por dentro, un líquido blancusco cubre mi pene al verla subir y bajar en el, tomo a la chica de vestido negro y la subo en mi cara, beso su rica y deliciosa vagina carnosa que parece corresponder mis besos como una boca, lamo su clítoris y paso mis dedos índice y corazón por encima de su clítoris para magnificar las sensaciones, esa mujer empezo a temblar a descontrolada, decía sentir tanto placer que parecía que un corrientazo le pasaba por todo el cuerpo, que sentía que algo la quemaba pero de placer, un dolor placentero que jamás había sentido al obtener sexo oral.

Las llevo a la habitación y pongo una encima de la otra para que ambas vaginas queden juntas, abro sus piernas y penetro a una y otra intermitentemente mientras las nalgueo y apreto sus deliciosas nalgas con fuerza, sin duda esto les causa mucho placer, primero le doy con fuerza, firmeza y velocidad a mi amiga, mientras meto mi mano entre ambas chicas para estimular sus clítoris mientras las penetro, siento como mi amiga se llega a chorro y me moja todo el pecho al sacar mi pene a presión de su deliciosa, jugosa, exquisita, excelsa vagina de diosa erótica, sin duda le encantó que le diera tan duro que su vagina quedara palpitando y que chorreara todo en la habitación, meto mi pene en la chica del vestido negro, mientras mi amiga la besa y se sienta en su cara para automasturbarse con su boca, es una delicia ver cómo juguetean ambas, muchos gritos y gemidos, que son música para mis oídos, estímulo el clítoris de la chica desde arriba mientras la penetro con fuerza y velocidad sin introducir todo el pene, para más placer, llegan al orgasmo juntas, siento como los fluidos de mi amiga bajan por los pechos, abdomen y vagina de la chica de vestido negro, mientras que meto y saco mi pene para hacerla gritar, sollozar, temblar, blanquear sus ojos de placer al llegar a un delicioso orgasmo, apretando sus muslos sobre mi pene y contrayendo sus músculos vaginales de una manera magistral, celestial, única, como toda una experta en erotismo y pasión desenfrenada.

Ya no aguanto más las ganas de llegarme y las arrodillo a ambas frente a mi, me masturbo con fuerza y velocidad hasta sacar mi semen a presión como manguera sin control, chorreo sus rostros pechos sin piedad alguna, ambas lamen mi pene de cabo a rabo hasta saborear cada gota de mi semen, sin duda alguna, de los mejores tríos que he disfrutado practicar, y que me encantaría sin dudar, volver a repetir.

El Deseo Que El Subconsciente OcultaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora