"Mi vida se a basado de promesas y personas incumplibles" Hope Mikaelson, ¿temida o respetada?, nadie a logrado llenar su vacío corazón hasta el día de hoy. Nuevos estudiantes en la escuela Salvatore, nuevas oportunidades de ganarse a la princesa Mi...
Soy Hope Mikaelson, hija de Klaus Mikaelson y Hayley Marshall, única en mí especie, suena raro, pero mí vida los es aún más.
Hoy llegan alumnos nuevos a la escuela Salvatore, rutina de presentaciones y una enorme sonrisa en la cara como si en verdad me agradarán las personas desconocidas.
— ¿Todo está listo? — Pregunto Lizzie con una libreta en su brazo — MG necesito el cartel de bienvenida un poco más arriba —
A Lizzie en verdad le angustiaba la primera impresión.
— Como digas—- MG rodó sus ojos
En verdad era realmente agotador tener que estar acomodando sillas y muebles en la sala principal y además de eso Lizzie me había convenció de dar un pequeño tour a los nuevos, para distraerme después de mi ruptura con Landon.
— Hope, ¿tienes un segundo? — pregunto Josie detrás mío.
— Claro solo dejare estás 5 mesas por aquí...¿me permites? — en verdad era solo una, el dramatismo corría por mis venas.
— Si claro, pase usted señorita Mikaelson — sonreía con ironía ante mi comentario
— Bien, dime qué sucede Jo — me sacudía el polvo que desprendia de mi falda.
— Mi padre... Necesita hablar contigo... —
— Sobre qué si se puede saber — fruncí levemente el ceño.
— La daga de tu padre — Josie me susurraba cómo si fuéramos asesinas en serie.
Estaba dispuesta a contestarle pero ya era costumbre que Lizzie nos interrumpiera.
— Jo, ¿dónde te habías metido? — se cruzo de brazos esperando una respuesta.
— En la oficina de papá tal vez — sonreía a labios cerrados.
— Bien señorita te necesitamos en la zona de recreación, ¿puedes? — dijo la rubia, mientras su mirada marcaba cosas de la lista que tenía en su brazo izquierdo.
— Claro, voy en un minuto — contestó Josie apartando La mirada de su hermana.
— Nos vemos luego Josie — sonreí amablemente.
Ambas teníamos cosas que hacer y para se honestas las mías eran muchas.
— Claro... No lo olvides — Josie ya caminaba hacia la salida, recordándome la charla que tenía pendiente con Alaric.
Me dispuse a seguir moviendo mesas y sillas, pero mi mirada se desvío por el gran ventanal de la sala.
Había un auto rojo bastante antiguo, auto que ya había visto antes, pero no recordaba de quién era. Quería ver quién salía de el, pero MG me interrumpió.
— ¿Hope? — llamo mi atención y me gire — Veras... Necesito un pequeño favor... — lo dijo tan suave que por poco no escucho.
Sabía perfectamente que algo tramaba por la forma en la que lo decía.
— lo que sea, siempre y cuando no quieras que te cree un auto con mis manos, está bien — me cruze de brazos esperando su respuesta.
— Ayy Hope pues así ya no quiero nada — alce una ceja — Era broma... Mira, se que soy un vampiro, y tengo súper velocidad y todo eso pero... — entrecerre mis ojo, ya sabía por dónde iba esto —¡Ay vamos Hope ni siquiera con toda la velocidad del mundo acabaría esto hoy! — gire mi cabeza, mientras el señalaba las 150 mesas que quedaban y las 300 sillas que faltaban por organizar.
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Pensamos que eran muchas sillas pero luego nos dimos cuenta que la fiesta no solo era para los estudiantes nuevos y antiguos, si no que también era para los que ya se habían graduado hace años, y eran bastantes, por eso la cantidad de mesas y sillas.
— Quieres que lo haga con magia ¿no es así? — el asintió y la verdad no me pareció mala idea, yo tambien estaba cansada.
Organits
En un momento un esplendor casi nos deja ciegos, pero cuando volvimos a abrir los ojos cada cosa estaba en su lugar y nosotros ya podíamos descansar.
— No entiendo cual era la necesidad de Alaric para ponernos a organizar todo esto a mano — MG detallaba todo el orden en la sala.
— Esto no es muy justo si lo ves desde el punto de vista de Ric... Perooo me ahorré dos horas de trabajo — choque los cinco con MG.
— Wowww... Si que son veloces — Una voz que usualmente molesta a todo el mundo, se oía detrás de nosotros.
— Penélope — me di la vuelta para verla y sonreí falsamente — Pensé que estabas en el muelle... Ya sabes besando al primer pez que ves —
— Ohhh. Si lo dices por MG, besa bien... Deberías de probar, tal vez así se te olvide el ridículo pajarito que tenías por novio —
