La Musa

Capítulo II

Beso

Y aqui estaba, frente a la puerta de la que antes fue su novia, que Dios lo ayude porque el mismo fue a las garras del lobo feroz. Era toda una molestia que su identificación siga teniendo la dirección del antiguo departamento que compartía con su anterior alfa, todos sus paquetes llegaban ahí.

Tocó la puerta, esperando a que estuviera en casa, bueno tal vez sería prudente esperar a que Sugu regresará de las nacionales. Sin tener que esperar mucho, la puerta se abrió, dejando ver a la mayor, quién lo miró con indiferencia.

— Así que sigues viniendo por tu correo, pensé que tu hermana vendría, ya comenzaba a acostumbrarme a su molesta presencia — dijo en tono aburrido, mientras se hacía aún lado para permitirle el paso al más pequeño.

Con los nervios de punta, entró a dicho departamento.

— Y-Yo no tengo porque darte explicaciones, si vengo yo o no... — sin poder terminar la frase, la mujer tomó el libro que traía en sus manos para lanzarcelo a la cabeza.

— ¡Claro!, vienes, a mi ¡MI! Casa, solo para decirme tal estupidez, espero que en tu pequeña cabecita te quepa, tu me perteneces, eres mío, yo hice de ti un verdadero omega, y todo lo bien que sentiste, el placer... Todo... Esta escrito en las malditas páginas de este libro — dijo con rabia, mientras el aroma de sus feromonas se intensificaba demostrando su enojo.

— No es lo que piensas... Todo lo que escribo es ficción, nada es real — la castaña sonrió de lado, mientras que el menor comenzó a entrar en pánico, pues ella comenzaba a acercarse, sin ningún tipo de sigilo o cautela, incluso sin percatarse de que la puerta aún estaba abierta — ¿Q-Que haces? — preguntó aún con los nervios puestos.

— Viniste a mi por eso, bien, te lo daré — estuvo a nada de tocar al más pequeño, cuando fue apartado por alguien más.

— ¡¿Que mierda crees que estas haciendo, eh?!, Maldita perra, ¿Estas bien cariño? — dijo con un tono aterciopelado tocando con delicadeza la mejilla del pequeño omega.

— ¡Perfecto, ya te conseguiste a otra!, ¡Eso demuestra lo zorra que eres, maldito omega de un rato! — grito con rabia, sin que la otra alfa pudiera aguantar más su ira, le dio un golpe en la mejilla.

— No te atrevas a volver a hablar así de él, es mi omega, si vuelves a intentarlo, te arrancaré la piel de los huesos — sus feromonas amargas hicieron retroceder a la castaña — La verdad me había esforzado demasiado para que nadie se enterará... Pero, Kirito y yo, vamos a casarnos — su declaración hizo que de alguna forma, Asuna se sintiera mal.

— ¡Eso no es cierto!, ¡Él es mío, no importa si lo marcas! — una sonrisa llena de soberbia se plasmó en el rostro de la alfa de hebras grises.

— ¿Estás retandome? — preguntó con sarna, con poca fuerza, jalo al omega hacia ella. Tomó su cuello y acercó sus labios en un beso, cálido y tranquilo, transmitiendo amor y compasión — Ves... Si no te importa, nos iremos de aquí. Más vale que envíes todos los libros que habían en la caja — gruñó molesta — Oh si no... Te mueres — terminó de decir.

Pará luego, cargar al omega, mientras esté se aferrarse a ella sin intención de querer soltarla. Aún con Kirito en sus brazos, subió al ascensor, oprimiendo el botón del último piso. Akane no decía nada, y Kazuto tampoco, más que nada por que no sabían que decir.

El ascensor se detuvo, bajo de este, camino hasta el estacionamiento. Abrió la puerta de su auto, el peli negro iba a bajarse, pero para su sorpresa, ella se subió al vehículo aún con el pequeño en brazos.

— O-Oye... Bajame, puedo irme en el asiento del copiloto — dijo nervioso. No lo quería pensar demasiado, pero su intimidad rosaba contra el bulto dormido de la alfa.

— No~ quiero que vayas aquí, ¿si? — preguntó inocente, el Kirigaya quería decir algo, pero no logró decir una sola palabra pues la mujer junto sus labios en un apasionado beso, tranquilo y sin prisa, lleno de cariño y amor.

— E-Está bien — con eso dicho, inicio el camino a la casa de Kirito, Akane iba tarareando una canción, relajando por demás al de ojos onix. Pocos minutos después había quedado completamente dormido.

[...]

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Fin

Oye, ¿has escuchado este rumor?.

La canción que Akane tarareo es "Bésame mucho".

Siento que este capítulo no sea largo, pues no tenía muchas ideas, prometo hacer más largo el próximo.

¡Gracias por leer!.

19 de septiembre 2022

11:08 PM.