Capítulo 6

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POV Lisa

Las vacaciones pasaron más rápido de lo que me esperaba.

No he cambiado mucho físicamente. Sigo teniendo mi pelo largo castaño, aunque he crecido un poco. Si es verdad que estoy más fuerte, pensé que si me veía más musculada podría ser más aterradora, y así no me molestarían tanto.

O eso pensé, ya que lo primero que pasó cuando llegué a el andén correspondiente, fue que tuve una gran cantidad de miradas femeninas puestas en mí.

Al momento me sentí incómoda, no me gustaba llamar la atención y menos sin saber de qué forma, ya que se me estaba haciendo imposible descifrar el significado de las miradas de mis compañeras.

Tan sólo bajé mi vista y caminé hacia el interior del tren, con suerte alguna de mis amigas ya estarían dentro.

POV Jennie

Las vacaciones pasaron de forma muy rápida, ni siquiera me di cuenta. Y ahora tocaba empezar un nuevo curso escolar.

Ahora me encontraba junto con Sana y Nayeon fuera del tren, ya habíamos encontrado un compartimento, así que dejamos nuestras cosas y salimos fuera del tren para hablar sobre nuestras vacaciones.

Les contaba a mis amigas sobre mi inolvidable experiencia en Islas Mauricio, mientras ellas me escuchaban atentamente... O eso creía, ya que un jadeó de parte de Sana interrumpió mi historia.

-¿Qué pasa?¿A dónde miráis tan sorprendidas? -Pregunté mientras buscaba algo fuera de lo normal a mi alrededor.

-Dios mío Jennie, ¿acaso no la ves? -Me dijo Sana, yo me negué inmediatamente y ella atrapó mi rostro para girarlo en una dirección exacta -Ahí lo llevas.

Mi boca estaba abierta de par en par, ¿acaso era esa Lalisa Manoban? Oh por dios, ¿qué ha hecho durante las vacaciones para ponerse así? Tenía a pocos metros a una castaña de posiblemente más de un metro setenta, vestida con una camiseta blanca sin mangas y unos jeans anchos. Lo mejor de todo es que la camiseta dejaba a la vista sus fornidos y entrenados brazos, a la par que sus manos, las cuales se habían vuelto un poco venosas.

Al parecer Manoban se había matado a hacer ejercicio durante las vacaciones, y había surgido efecto. Tenía todas las miradas en ella, algunas desprendían confusión, otras envidia y otras deseo.

-Dios quiero tocar esos brazos -Nayeon hablaba después de un momento de estupefacción -Seguro que están duros como rocas -Dijo mientras se limpiaba un poco de saliva que había caído de su boca.

-Yo también quiero tocarlos -Dije sin pensar -Quiero decir, para comprobar si es músculo de verdad o si ha utilizado un hechizo -Intenté excusarme de alguna manera.

-Claro que si, Jen -La mirada pícara de Sana no me gustó mucho, así que decidí entrar de nuevo en el tren -Vamos Jennie era una broma, no tienes sentido del humor.

Lo que sea, no hablaré con ninguna de las dos hasta que lleguemos a Hogwarts.

POV Lisa

Por fin estaba tranquila, había estado hablando durante veinte minutos con chicas que no conocía de nada.

Ahora me encontraba en mi compartimento junto con mis amigas. Rosé revisaba por décimo octava vez todo su equipaje, Jisoo leía un libro de nuevos hechizos y Ginny practicaba con su varita, haciendo diferentes formas a un trozo de papel.

Yo por mi parte, me encontraba con la cabeza apoyada en la ventana e intentando dormir un poco, la verdad es que ayer no puede dormir apenas, por lo nervios.

-Deja de revisar tus cosas, rubia -Jisoo rompió el silencio para quejarse sobre lo molesta que estaba siendo Rosé. La verdad es que ninguna de las dos están teniendo una buena relación últimamente -Ya lo hiciste como veinte veces, ¿es tan difícil comprender que no te falta nada? -Rosé la fulminó con su mirada, pero no dijo nada. Seguía a fuego con su plan "Ignorar a Jisoo es de guays", Rosé quiso ponerle ese nombre al plan para que pareciese más interesante.

De todas maneras, Lisa no le prestó mucha atención a lo que pasaba a su alrededor, su mente divagaba entre muchas cosas.

Una de ellas tenía nombre y apellidos, Jennie Kim. Lisa no sabía como iba a actuar la morena con ella después de aquel beso. No se lo esperaba, y gracias a eso tuvo la fantástica experiencia de sentir los labios suaves de Kim, sobre su mejilla.

De repente, el tren se paró y un frío inexplicable comenzó a helarle los huesos. Los ventanales se estaban congelando y la oscuridad estaba absorbiendo el tren. Vio como una figura flotante estaba en la entrada del compartimento, un ser sin cara y que levitaba. Las miró a cada una de manera seria y después continuó con su travesía por los demás compartimento.

Las cuatro estábamos sorprendidas, no nos habíamos dirigido la palabra y nuestras expresiones eran más que suficiente para entendernos a cada una.

Un tiempo después todo volvió a la normalidad, y el tren continuó su camino hacia Hogwarts, ahora lleno de estudiantes con un enorme interrogante sobre sus frentes.

El tren se paró, y esta vez fuera de peligro. Esa parada significaba que ya habíamos llegado a Hogwarts.

Esta vez no fuimos en barcas, ni fuimos guiados por un profesor o profesora. Si no que caminamos hasta el gran salón por nuestro propio pie.

Cuando mis amigas y yo llegamos, ya había una cantidad de alumnos y profesores razonables.

Tomamos asiento y comenzamos a comer como si no hubiera un mañana.

Después de las selecciones de casa, el director Dumbledore se levantó para pronunciar unas palabras.

-Queridos alumnos y alumnas, bienvenidos a un nuevo curso escolar -La verdad es que ese profesor si daba un poco de miedo.

-Como sabréis, hubo un incidente en el tren, lo que provocó que algunos dementores decidieran intervenir . -Al parecer era la única que no conocía el motivo.

¿Que está pasando? ¿Y porque no paran de mencionar a un tal Sirius Black.

¿Otro Potter? |JenlisaWhere stories live. Discover now