Mi Rayo De Luz (Shinazugawa Sanemi)

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CAZADORA DE DEMONIOS

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Narradora Omnipresente

El día había llegado Nozomi estaba emocionada ya que esa misma mañana llegaría a dejarle su uniforme y Katana, estaba tan ansiosa que no dejaba de dar vueltas por toda la casa.

— Nozomi quieres dejar de dar vueltas comienzas a marearme -dijo el anciano mientras bebía té.

— Perdón abuelo -se sentó frente a él- pero es que estoy muy ansiosa. 

— Lo sé pero el echo de que no quedes quieta no significa ya vayan a llegar  -se escucho como tocaban la puerta.

— ¡Ahhh! ¡Ya llego! -antes de lo que canta un gallo ella estaba en la puerta viendo a una persona que cubría su rostro.

— Buenos días vengo a dejar el uniforme de -miro un pequeño papel- Kuwajima Nozomi.

— Si soy yo -su sonrisa era de oreja a oreja.

— Aquí tiene -ella le extendió el paquete- espero sea de su agrado cualquier cambio que quiera me puede decir, así se podrá hacer el cambio.

— Gracias, por favor pase -se hizo a un lado.

— Veo que ya tienes tu uniforme.

— Kuwajima-sama -le saludo haciendo una reverencia, recibiendo un movimiento de cabeza de parte del mayor.

— Bien con su permiso, voy a probármelo -corrio a su habitacion-  Bien veamos como es -saco el uniforme y este se veía que era un falda- Bien veamos como me queda.

Luego unos minutos la chica salió de su habitacion hacia donde estaba el mayor y la Kakushi ambos vieron a la chica de ojos grises 

— Bien como me queda? 

— Pediste que fuera una falda? 

— Si  creo que me dará más libertad -el uniforme era de color verde era una falda hasta un poco arriba de las rodillas, no tenia mangas  y en su espalda tenia su nivel Mizunoto- es de mi agrado muchas gracias 

— Me alegra saberlo Nozomi-sama bien debo retirarme con su permiso -hizo una reverencia y se marcho.

— Por un momento creí que te darían el típico uniforme de las cazadoras o por lo menos de algunas.

— Como es el de las demás cazadoras?

— La falda es mucho más corta y tienen al una abertura en el pecho, me alegra que el tuyo no sea así 

—Estoy emocionada solo falta que me den mi Katana -dio unos pequeños saltitos- será que tardaran mucho. 

— Calma hija todo a su tiempo -le extendió una caja- felicidades por haber pasado la selección final 

— ¡Gracias abuelo! -tomo la caja y le dio una abrazo- veamos, veamos que es... abuelo esto -dentro de la caja había un par de botas blancas y un haori  rosa pálido con triángulos blancos- 

— Por un momento dude que fueras a escoger una falda pero veo que no me equivoque así que decidí comprarte unas botas y bueno ese haori espero te guste 

— Me gusta Mucho gracias abuelo -nuevamente le dio una abrazo, pero el abrazo se vio interrumpido por el sonido de la puerta-  ¡AH! ¡Debe ser el herrero! -dejo los objetos a un lado y fue hacia la puerta, había un hombre con una mascara Hyottoko, con una haori de girasoles, un sombrero de paja con campanillas - Buenos días