Los extranjeros y el protector

Capitulo 3 : Luchando por vivir

Esa noche, Naofumi preparó la cena a pesar de que Shirou se ofreció como voluntario para cocinar. Estaba bueno, pero Rin estaba segura de que Shirou podría haberlo hecho mejor con los mismos ingredientes que usó el moreno. Cuando les dijo que durmieran, Rin se ofreció a vigilar con él ya que no tendría la energía para despertarse en medio de la noche para estar de guardia. Después de que Shirou le dijera que no era una persona madrugadora, Naofumi le permitió estar en primera guardia con él mientras Raphtalia y Shirou dormían en rollos que Naofumi había traído.

Y ahora, ambos estaban sentados junto al fuego que Rin atizaría y alimentaría con ramitas para mantenerlo vivo, mientras Naofumi hacía más pociones, sin duda la mayoría se vendería mañana. Cuando Naofumi dejó que su escudo absorbiera algunos de los productos más nuevos que hizo, Rin decidió tomar algunas de las piedritas planas que recogió en la orilla del río antes y se sentó en el lugar adyacente a Naofumi.

"¿Por qué estás haciendo tantas cosas?" Rin preguntó con curiosidad.

Naofumi la miró por un momento, luego decidió responder la pregunta. "Podemos venderlos mañana, luego podemos conseguir mejores armas y armaduras para ustedes tres. Sin embargo, voy a necesitar más monstruos Globo antes de que lleguemos a la ciudad.

"¿Esos globos? ¿Por qué necesitas esos apegados a ti de todos modos? podía aventurar una conjetura, pero siempre era bueno obtener la respuesta de la fuente misma.

"Son un seguro, así que esos malditos comerciantes me darán un precio justo", frunció el ceño ante los recuerdos de esos comerciantes que intentaban engañarlo, lo que rápidamente remedió mostrando los Globos mordiendo su cuerpo debajo de su capa.

"Entonces, estás haciendo eso solo para obtener un precio justo en lugar de extorsionarlos por una gran cantidad de dinero", tarareó antes de sonreír un poco. "Supongo que en realidad no eres una mala persona".

"Audaz de tu parte decir eso cuando eres literalmente mi esclavo," comentó Naofumi.

"Lo sé. Pero podrías habernos obligado a pelear mientras esperas en el campamento. Sin embargo, tú mismo te uniste a la batalla, protegiéndonos con lo mejor de tu habilidad. Somos esclavos, pero nos tratas como personas normales".

"Si ustedes mueren, entonces mi inversión de comprarlos a ustedes tres desaparecerá. Ustedes tres todavía necesitan trabajar para pagarles. Además, los estoy obligando a pelear, ¿cómo los estoy tratando como personas normales?

"Bueno, supongo que eso es parcialmente cierto," miró a la dormida Raphtalia, antes de dirigir su atención de nuevo a Naofumi. "Pero he visto a personas tratar a otros mucho más crueles que esto, mirándolos como si fueran más bajos que la basura, haciendo cosas indescriptibles que podrían haberles ganado múltiples viajes al pozo más profundo del infierno. Puedes pensar que lo que nos estás haciendo es horrible. Pero en realidad, eres mucho mejor que los que he visto en mi vida".

Naofumi tuvo que detener su trabajo ante el cambio de tono de Rin. Podría haber sido la luz del fuego, pero parecía mucho mayor de lo que debería haber sido. Incluso su mirada se sentía como si estuviera perforando su alma hasta el punto de que tuvo que reprimir los escalofríos que subían por su columna. Aquí pensó que había matado esas emociones desde que lo apuñalaron por la espalda. Se preguntó si ella estaba hablando de su tiempo bajo las manos del científico, donde fue sometida a experimentos inhumanos. Por su edad y comportamiento noble, no podría estar hablando de otro tipo de escenarios, ¿verdad?

Antes de que pudiera especular más, el rostro de la chica se iluminó, volviendo a la juventud adolescente mientras miraba el cielo nocturno. "Aún así, hay muchos monstruos por ahí. Así que no puedes negar que lo que estás haciendo nos da una mayor probabilidad de sobrevivir en este duro mundo, esclavos o no".