Solamente Mía 💖 V&B

Capitulo 57

Ambos chicos se sonrieron mientras que la distancia era escasa, un leve silencio los envolvió mientras sus miradas jugueteaban un poco, esos segundos de tranquilidad se rompieron cuando recordaron que las cosas entre ellos aún no estaban resueltas. Se separaron un poco y cada quién agarró su camino.

Las horas transcurrieron haciendo que la oscura y fría noche se hiciera presente, el joven de los ojos azules se centraba en una importante conversación que mantenía en su laptop. Tecleaba y tecleaba palabras mientras el silencio era su única compañía, después de unos intensos minutos de conversación suspiro dando por terminada la importante charla que habia tenido.

--- "Por fin esta terminado, ya casi esta todo listo para la boda falsa de Bulma y Vegeta" --- pensó para si mismo mientras se estiraba un poco, decidió darse una ducha larga como recompensa de su arduo trabajo.

El ojiazul secaba su cabello con una toalla mientras escuchaba una canción de la radio, leía una revista de modas que le encantaba. El gruñido de su estómago lo desconcentro y decidió bajar por un bocadillo, al entrar a su cocina solo encontró empaques de comida congelada o cosas caducadas.

--- No tengo comida --- bufó cansado --- iré a comprar algo --- dijo para tratar de calmar a su estómago hambriento.

Se colocó una chaqueta ya que hacia algo de frío, tomó sus llaves, abrió la puerta y se encontró con Raditz al otro lado de la puerta apunto de tocar. Los dos chicos se espantaron al verse.

--- ¡Ah! ¡Raditz! ¿Qué demonios haces ahí? --- preguntó asustado.
--- E-estaba apunto de tocar el timbre --- explicó también alterado.
--- Que susto --- mencionó calmándose --- entra, hace frío afuera.

El ojiazul dejó entrar al pelilargo, los dos se sentaron en un sofá.

--- ¿Y cuál es el motivo de tu visita? --- dijo sonriendo --- De saber que ibas a venir hubiera salido más temprano a comprar algo para comer --- dijo apenado
--- B-bueno... eso no será problema, noté que me he comportado algo raro últimamente asi que es un tipo de compensación --- puso una bolsa encima de la mesa --- traje unos ingredientes para hacerte una cena.

Los ojos del chico se iluminaron de ilusión al saber que su mejor amigo le cocinaría cuando él estaba hambriento, la comida casera sería mucho mejor que cualquier comida del supermercado. Raditz se dió cuenta de esto y soltó una pequeña risa al ver la emoción del pequeño.

Los dos se dirigieron a la cocina del chico la cual estaba bastante limpia y ordenada, bueno... más bien se miraba intacta. Sólo los empaque de comida congelada o vasos de café eran lo que ensuciaba este lugar.

--- Admiro tu metabolismo, comes tanta porquería y sigues tan delgado --- dijo viendo los empaques.
--- ¿Gracias? --- respondió confuso.
--- Debes cuidarte más --- ordenó mientras metia los empaques en una bolsa de basura --- deja de beber bebidas energéticas, y cafés con extra de cafeína --- seguía regañando.
--- Buh... ¿acaso eres mi madre? --- bufó aburrido.
--- No, no lo soy --- se acercó a él --- no soy tu madre, soy tu amigo.

Esas palabras tuvieron un pequeño impacto en el ojiazul, hizo que su corazón se acelerará, la mirada de Raditz transmitía muchas emociones por lo que notó que su amigo no llegó sólo a hacerle la cena, había algo más.

Las mejillas de Lapis se sonrojaron haciendo que apartará la vista, el pelilargo sin más se dedicó a empezar a cocinar una cena casera para el chico de los ojos azules, que por años fue y sigue siendo su mejor amigo.

Se llevó un poco más de una hora para tener una cena increíble lista, el ojiazul preparó su mesa en el jardín para que cenarán a la luz de la luna y las estrellas, era un lugar acogedor lleno de plantitas y luces led en forma de focos, decorado cuidadosamente por el ojiazul. Llevaron la comida hacia fuera acompañados de una botella de sidra de manzana y un par de copas.