three, beauty like a knife

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ଘ 𝙳𝙾𝙽'𝚃 𝙱𝙴 𝚃𝙷𝙴 𝙷𝙴𝚁𝙾𝙴𝚂

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ଘ 𝙳𝙾𝙽'𝚃 𝙱𝙴 𝚃𝙷𝙴 𝙷𝙴𝚁𝙾𝙴𝚂.' ๋࣭ 
( capítulo tres ; 𝐩𝐫𝐞𝐜𝐢𝐨𝐬𝐚 𝐜𝐨𝐦𝐨 𝐮𝐧 𝐜𝐮𝐜𝐡𝐢𝐥𝐥𝐨 )
     🥽🕰: や日向が甘く/♡

ESA PELÍCULA APESTA.

Max giró su rostro al escuchar su voz, suave y con una pizca de gracia. Se odió a si misma por no evitar mostrar una pequeña sonrisa.

—¿Ah, si?— Dijo la pelirroja con cierta ironía— ¿Cómo estas segura de que es mala?.

—Por que la vi— Contestó, Max observó como la joven se acercaba a ella, buscando entre las películas de sección de terror, y luego de encontrar la que le gustó se giró hacía ella. —Esto es una buena película.

Max tomo el pequeño cd en sus manos, Pesadilla en elm street, leyó, observó los ojos de la joven y esta la estaba observando con tranquilidad, era como si estaba esperando mucho tiempo de estar a solas con ella.

—¿Cómo sabes que va a gustarme?— Preguntó la pelirroja.

—Por que es de terror puro— Sonrió Harrington —Y tu... amas el terror. Esa es la antigua pero hace poco de estreno la segunda y obligué a Steve de que me guarde la película.

Max hizo una mueca divertida mientras no despegaba su vista de la rubia, algo hizo que su corazón vaya a un ritmo rápido, tal vez fue al observar como ella estaba allí parada a centímetros de distancia, con su ridículo outfit punk y como hablaba rápido cuando se encontraba nerviosa.

Su corazón reaccionó más rápido que su cerebro.

—Deberíamos verla juntas.— Murmuro Max.

La pelirroja abrió sus ojos de inmediato al darse cuenta de lo que había dicho, ni siquiera lo dudó. Sus mejillas ardían y giró su vista al estante de películas para ocultar su rubor. Jules Harrington había quedado paralizada, sintió su corazón latir con fuerzas y sus manos sudar, pero no quitó su mirada del rostro ruborizado de la pelirroja.

Sonrió.

—Me parece un buen plan. — Dijo.

Max volvió a observar a los ojos claros que no dejaron de observarla. Su rostro seguía rojizo, mordió el interior de su mejilla nerviosa, odiaba ese efecto de Jules y también odiaba no poder estar lejos de ella simplemente por que su corazón no se lo permitía.

—¿Tu crees?—Preguntó Max.

La joven asintió con una sonrisa en su rostro.

—Si quieres durante esta semana, puedes venir a mi casa y las vemos...— Dijo Jules observando su rostro.

Max asintió.

—Suena bien— Contestó inmediatamente.

—Si...— Murmuró la rubia por lo bajo.

HEROIN, max mayfieldDove le storie prendono vita. Scoprilo ora