27 ° El arte de la guerra.

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Allison.

Esto es guerra, esto es lo que el difunto Jack Rinaldi ocasiono con sus estupideces y para mi desgracia no esta presente para ver el final de su linaje. Los minutos para nuestros enemigos se están acabando y cada vez mas nos estamos acercando a lo que tanto he anhelado. Recargo mis armas y las guardo en las fundas que llevo en el cinturón, me aseguro de llevar mis cuchillos y una vez armada miro a Adrix quien asiente hacia mi en señal de estar listo.

- Vamos a matar a esos hijos de perra - dice y tomo un suspiro.

- No mueras en el intento - le pido

- Tu tampoco , nena - me guiña un ojo antes de darme un beso rápido - Te cubriré la espalda en todo momento. - asegura en intenta marcharse a uno de los jeeps

- Pase lo que pase, no dejes que Dante salga con vida de ese lugar - lo detengo y voltea a verme con el ceño fruncido - Si caigo antes, prométeme que iras tras ese bastardo...

- Allison, no empieces...

- Prometemelo - insisto - al menos así me iré al infierno sabiendo que lo veré allá para seguir con su tortura.

- ¿Recuerdas lo que te dije? - pregunta de repente y suspiro antes de asentir - Eres mi mujer, mía - repite - Si te vas, encontrare la manera de hacerte regresar, y si mueres, iré al cielo o al infierno por ti, me importa una mierda la lógica, o lo que digan los demás, también las malditas estadísticas... eres mi mujer y no pienso permitir que nadie me arrebate de las manos lo único que me ha hecho probar esa mierda a la que llaman amor, ¿Entendiste?

- Solo prometelo... - insisto

- No tengo que prometer nada - espeta - porque ambos saldremos de ahí con vida, y ambos vamos a matar a el imbécil que no ha dejado de jodernos la existencia.

- Venga, nos vamos ya - aparece Mackenzie

- ¿Estas segura de ir? - le pregunto y asiente al mismo tiempo que maniobra con uno de sus cuchillos en su mano.

- Muy segura - responde - Ademas pocos saben que soy tu hermana, no correremos peligro con eso.

- Génesis lo sabe - le recuerdo - y si esta con el, no dudara en decírselo para poder usarlo contra mi.

- No somos guardería - dice Adrix - Intenta mantenerte cerca de nosotros y no mueras.

- Gracias por tu preocupación, pero estaré bien - le asegura - fui entrenada para esto

- Fuiste entrenada para ser una asesina, pero no para esquivar balas - espeta

- Vale, lo entiendo - alza ambas manos - Mantenerme cerca y no morir - rueda los ojos

- Buena chica - le dice Adrix antes de marcharse a uno de los Jeeps

- Si las cosas se complican, sal de ahí y no mires atrás - le digo y tomo su brazo para ir juntas hacia el Jeep en el que se ha subido Adrix junto a Nadir, Hacemos lo mismo y Freya se nos une en el asiento trasero.

- ¿Aun hay lugar? - aparece en colombiano en la ventanilla de Freya quien ni se molesta en mirarlo

- No - le dice con frialdad y sube la ventanilla dejándolo fuera - Arranca antes de que le pegue un tiro y mande a la mierda su estúpido orden y paz entre mafias. - espeta y Adrix enciende el motor para llevarnos hacia la matanza.

- Freya - le hablo a la malhumorada que esta sentada junto a Mackenzie

- ¿Mjm?

- No pierdas de vista a Mack - le pido y me mira

- Antes que tu, estaba yo - dice - Así que no tienes que pedirme algo que llevo haciendo años.

- Vale - suspiro y saco uno de mis armas para quitarle el seguro y recargarla - Maneja mas rápido - le digo a Adrix quien me mira por el espejo retrovisor - Quiero acabar con esta mierda de una maldita vez. - resoplo y obedece mi petición porque pisa el acelerador a fondo provocando que los demás hagan lo mismo para seguirnos el paso.

La Reina De La Mafia: Nacimiento del Ave Fénix Donde viven las historias. Descúbrelo ahora