Capítulo 20

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Faltaban oficialmente dos días para la boda y yo me encontraba realmente nerviosa no podía creer que esto estuviera ocurriendo casi como si se tratara de un deja vu, hace 5 meses mi boda con Armando también estaba a la vuelta de la esquina pero lo ocurrido en la junta directiva termino de mandar todo por la borda al igual que lo que ocurrió con Beatriz y no podía juzgarla si yo hubiera estado en su lugar habría matado a Armando y a Mario con mis propias manos delante de todos pero ella a pesar de lo que le hicieron prefirió irse para sanar su corazón y cuando volvió estaba irreconocible no quedaba nada de aquella mujer sumisa que podían manejar a su antojo ahora era una mujer que hablaba con una seguridad impresionante; además ya no se dejaba pisotear por nadie y puso en su lugar a sus dos verdugos para demostrarles que lo que ocurrió solo la hizo más fuerte yo la admire mucho en su momento porque tuvo el coraje y el valor de dar la cara y aunque me cueste negarlo a mi también me puso un estate quieto para que dejara de molestarla no cabe duda que el dolor y las heridas del corazón lo hacen a uno más fuerte.

Estaba tan perdida en mis pensamientos que no note que Armando ya había vuelto a casa, me levanté del sofá y me dirigí a la cocina para ver qué es lo que había traído porque cada que iba a casa de Margarita le mandaban comida para ambos, Armando se acercó a mi y me tomo entre sus brazos amaba estar con él pero en ese momento el olor de su loción provocó que se me revolviera el estómago y en consecuencia me solté bruscamente de sus brazos y salí corriendo al baño para vomitar lo poco que había podido comer durante el desayuno, él se acercó muy preocupado y yo solo atiné a decirle que estaba bien pero Armando no era tonto y había notado ya mis constantes ascos por lo que me ayudó a ponerme de pie y me llevo a la habitación para que pudiera descansar un poco, él por su parte fue a la cocina por un vaso con agua y al volver me lo ofreció yo lo tome con cuidado y me lo bebí lentamente nuevamente intento acercarse y por el bien de su ropa y de mi estómago decidí detenerlo...

-Mi amor que pasó? No quieres que esté cerca de ti?
-Armando mira no me lo tomes a mal pero tú loción me provoca asco.
-Mi loción? Pero si es la misma que he utilizado desde que me conoces.
-Yo se mi vida pero no sé que me pasa últimamente tengo asco por todo.
-Deberíamos ir al médico para que te revise mi cielo no puedes seguir vomitando lo poco que comes.
-Si mi vida, esque a mi también ya me está cansando esto.
-Bueno mi amor me voy a duchar para que ya no te den ganas de vomitar apenas me acerque.
-Mi vida no lo tomes personal, ya el médico me dirá que tengo bueno?
-Esta bien mi cielo ya vuelvo.

Si Armando supiera se moriría de la felicidad y esque está noticia va a cambiar el rumbo de nuestras vidas y nos va a unir más que nunca pero aunque se que el ya sospecha un poquito de que podría ser yo preferiría guardar la noticia para el día de nuestra boda así que me tocará distraer a mi amorcito estos dos días.

Siempre fuiste tú|| Marcela Valencia y Armando MendozaOù les histoires vivent. Découvrez maintenant