VIOLENTÓMETRO - Akaza × Douma +18 (1ª Parte)

5 - Culpabilizar

--- ¿Al final cenaste fuera? ¿Quieres que vaya a por un kebab?

Akaza resopló molesto sin mirarlo. --- ¿Qué te importa? ¿Que no ves que te estoy ignorando como has hecho tú hoy? Me dejaste en visto, piérdete.

--- ¿P-pero que querías que te dijese? Me confundiste y comparaste con tu ex. --- Responde cayéndole una lágrima. --- Hoy dormiré en casa de Gyokko. Estos días estuviste algo violento, creo que deberíamos estar un tiempo distanciados. --- Tras eso el menor baja la mirada triste y empiaza a coger ropa.

El mayor frunció el ceño y se levantó furioso, ¿Cómo se atrevía a desafiarlo así? Akaza lo haría arrepentirse, incluso si tenía que mentir.

--- Adelante. Hazlo, si tú te largas con el maricón de tu mejor amigo yo me iré con Kyojuro, pero espero que no te pongas celoso cuando sepas que sigue sintiendo algo por mí.

--- ¿Q-qué? --- Las prendas que estaban en su mano cayeron a la vez que su rostro se llenaba de lágrimas y un pinchazo en su pecho aparecía, de pronto la falta de aire se hizo presente en su pecho obligándolo a sobarse con fuerza en un ataque de pánico.

Akaza vio cómo Dōma extiraba una mano hasta el cajón donde estaban sus ansiolíticos y sin pensárselo lo agarró del pelo para impedir que se moviese, agarrando en su mano libre las pastillas como amenaza.

--- ¡Esto es culpa tuya, tú me haces ser así! ¡Siempre estás igual! ¡Admítelo!

El corazón del menor se aceleró a la vez que sus sollozos se hacían presentes en su cara pálida y su cuerpo empezaba a temblar. Sin más remedio que admitirlo, Dōma asintió con el poco aire que le quedaba comenzando a hiperventilar

--- E-es mi culpa. --- Tras escucharlo Akaza lo soltó y bruscamente le hizo tragar una de las pastillas.

--- Cálmate de una vez, joder.

Después de unos duros minutos para Dōma, consiguió calmarse y abrazó a su esposo temblando, quien le correspondió con una falsa sonrisa.

--- ¿Ves que no era para tanto? Si es que eres muy exagerado, tontito. --- Ante sus palabras el rubio hizo un puchero limpiándose las lágrimas.

--- P-perdón por darte problemas. Dormiré en el sofá con los niños.

Dōma se levantó con un puchero y agarró el pijama dispuesto a irse, pero Akaza tenía otros planes. El mayor lo agarró por las caderas y succionó su cuello con fuerza.

--- Shhh... --- Lo pega a él por las caderas succionando su cuello con fuerza. --- Los niños están muy bien solos y yo... --- Akaza tocó su entrada por encima de la ropa. --- Quiero esto ahora.

--- A-akaza~ a-ahh~ c-creí que me estabas ignorando~ --- Respondió cerrando los ojos al estremecerse. El mayor rodó los ojos y le tapó la boca furioso.

--- Pórtate bien y manten el pico cerrado, ¿O quieres ponerme violento de nuevo?