sette

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—Lo amo, Simón... —. Exclamó Villa, Simón correspondió el abrazo sin responderle —Ahora me doy cuenta de todo, usted es demasiado para alguien, incluso para mi, aún así estando enojado conmigo, fuiste por mi... Y-y en nuestra relación, tu querías arreglarlo todo, pero yo no sabía lo que hacía... Todo este tiempo sin ti me ayudó a reflexionar que con Gabriela nunca tuve el amor que tú me diste, porfavor, dame otra oportunidad, me siento tan solo sin ti

—Juan... —. Simón lo miro a los ojos —Si quiero volver a intentarlo pero... ¿Cómo puedo saber que no volverás a hacerlo? Tengo miedo —. Dijo en un tono triste

—Y-yo... ¡Prometo hacerlo bien! ¡No te defraudaré!  ¡Dame una oportunidad porfavor! —. Suplico, Simón se alejo un poco

—No, Juan Pablo, tu quisiste terminar esto ¿O me equivocó? Ahora tendrás que afrontarlo, ya conseguirás a alguien más... —. Simón abrió la puerta y se fue, Villamil se quedó pensando entre lágrimas, acababa de perder a Simón... Pero no sé iba a dar por vencido

Salió corriendo del departamento sin importarle nada, bajo las escaleras corriendo y al ya estar en la entrada del hotel comenzó a ver hacía los lados para ver si veía a Simón, y al verlo comenzó a seguirlo y a gritar su nombre

—¡Simón! —. Grito, el de lentes al escuchar su nombre se giró y se sorprendió al ver a Villamil corriendo detrás de el

—¿Juan? —. Pregunto al ya tenerlo en frente, Villa trataba de recuperar el aire

—Dame... Una semana —. Dijo, Simón lo miro confundido

—¿Semana? ¿De que hablas? —. Contesto confundido, Villa lo tomo de los hombros

—No me pienso dar por vencido, yo se que todavía hay amor, lo nuestro no es casualidad —. Simón lo miro mientras negaba

—Juan Pablo... —. Dijo entre dientes

—¡Solo te pido una semana...! —. Tomo aire para decir las siguientes palabras —¡Si no lo logro te dejo en paz! ¡Me olvidarás, te olvidaré! ¡Y todo en el pasado! —. Simón no contesto, seguía en su trance —Porfavor...

—Si no lo logras, promete que no me volverás a buscar —. Villa lo dudo un poco ¿Y si no lo logra? Se quedaría solo, sin nadie a su lado, si, también puede quedarse con alguien más, pero nadie es como Simón, nadie

—Lo prometo —. Dijo, Simón lo miro, sin responder

—Esta bien, acepto, solo una semana —. Respondió, Villa con una gran sonrisa lo abrazó

—¡No te defraudaré! —. Dijo sin dejar de abrazarlo, Simón solo se lamentaba por haber aceptado ¿Que no el hace unos días quería volver con Villa? Se suponía que el le estaría diciendo esto al menor, pero a veces la vida da unos giros inesperados ¿No?

—♪—

Primer día...

Villa estaba arreglando el departamento ¿La razón? Había invitado a cenar a Simón a su casa, no lo quiso llevar a ningún restaurante, probablemente se encontrarían de nuevo a Gabriela y Villa quiere evitar eso, aunque, quiere llevarlo a un lugar, tiene todo preparado

Se sentía tan nervioso aunque nunca lo admitiría, cada cinco minutos se miraba en el espejo, quería lucir bien para Simón

Minutos después escucho la puerta y comenzó a entrar en pánico, se acercó a la puerta, dio un suspiro y abrió

—Ho-... ¿Andrés? ¿Que haces aquí? —. Villa al ver a su amigo delante de él quedó perplejo, no esperaba que viniera

—Quise venir a visitar ¿Puedo pasar? —. Pregunta, Villa se pone más nervioso por segundo, Simón en cualquier momento llega

No lo Recuerdo ───VillargasWhere stories live. Discover now